Capítulos Contrarian Investing - Capítulo 40: El chartismo no funciona en el VIX.
Todos sabemos que muchas veces hacemos cosas irregulares o de dudosa utilidad. Pero hay una que se lleva la palma por lo estrambótico que resulta. Se trata de dibujar rayas, soportes, resistencias, canales, triángulos, hombros con cabeza, etc en el gráfico del VIX.
Sobre esto hay que aclarar una cosa: Cada producto o lo que sea (el VIX es sólo una estadística) puede ser analizado con X herramientas. Lo que no podemos hacer es intentar desatornillar un tornillo de estrella con una llave inglesa. Pues precisamente eso es lo que hacen todos los que intentar dibujar rayas en el VIX.
Por tanto, primero hay que comprender la naturaleza de lo que se analiza y luego encontrar los métodos y herramientas adecuados para proceder al análisis.
Si bien el chartismo clásico tiene cierto sentido aplicado a las acciones pues presupone unos puntos donde se identifica la oferta y la demanda, en el Vix ese tipo de chartismo no funciona. Se podría argumentar que el VIX que es la representación de la volatilidad implícita de las opciones del SP500 también está sujeto a este arte, pues la volatilidad implícita como todo es un productos sujeto a la oferta y la demanda. Y esto es verdad, pero yo me remito al mundo de los hechos, al empirismo y cada vez que alguien traza una raya, el VIX hace lo contrario, cosa nada rara pues la propiedad del mercado es dejar a la mayoría con el culo al aire y tirar por donde menos se le espera.
No funciona porque el mercado es impredecible. No hay nadie que sepa lo que va a ocurrir mañana. Lo único que se puede hacer es analizar el pasado y esperar que el futuro sea parecido. Se puede acotar el mercado observando donde están las probabilidades, pero sabiendo que son sólo probabilidades. Por eso un operador ha de mantenerse flexible.
No obstante en el mundo hay cosas menos variables que otras. Entre los elementos más estables se encuentra la psicología humana, pues alterarla significaría alterar nuestros genes. Mientras eso no ocurra el miedo será miedo y la complacencia será complacencia. Yo le llamo a esto: principio fundamental. El carácter de las masas va desde la complacencia al miedo y vuelve a la complacencia, igualmente que la tormenta da lugar al buen tiempo y el buen tiempo siempre es seguido por una tormenta.
Ahora bien, hoy tal vez hace un buen día y sabemos que algún día lloverá y hará truenos, pero a día de hoy no sabemos cuando llegará ese día. Los informes del tiempo no preveen nubes, pero todos sabemos que en 3 días se puede formar una tormenta perfecta.
Sin embargo, cuando estamos en medio de una tormenta tenemos la seguridad de que esta no va a durar mucho ¿verdad?. Las tormentas son rápidas y pasajeras si lo comparamos con el resto de días del año. Por tanto cuando tenemos tormenta sabemos que esta pasará pronto.
Lo mismo ocurre con el carácter de las masas y por eso escribí un artículo tratanto de la gran diferencia entre suelos y techos.
Pues está misma naturaleza, o este principio fundamental del carácter de las masas es la que nos hace poder analizar el VIX con cierta fiabilidad en determinados momentos. Es decir, el VIX es fiable para buscar techos de volatilidad y por tanto suelos del mercado de acciones (puestos en contexto con la tendencia). Lo expliqué en dos capítulos previos: aquí y aquí.
Ahí es cuando el VIX es predecible. Durante las fases de complacencia pueden pasar meses y meses mientras la gente busca techos. Si bien es cierto que hay formas de determinar si hay mucha euforia según el VIX, también es cierto es que es bastante poco fiable.
Cuando vea a alguien hablar del VIX y dibujar rayas, desconfíe, esa persona con un 99% de probabilidad no sabe de lo que habla. Y además puede tomar la posición contraria. Recuerde, no hay triángulos, no hay canales, no hay nada, todo es producto de la imaginación.
He ido a google y he puesto el VIX para ver la cantidad de horrores, claro que de vez en cuando aciertan de igual manera que hasta un reloj roto da bien la hora dos veces al día:
Conclusión: hay gente que le haría una raya hasta a su madre.