El otro día, mi post "Ibex 35: sin comentarios" creó confusión entre algunos lectores. En él decía que estábamos ante un doble suelo de libro. Y dos lectores me reprocharon que donde veía yo un doble suelo, ya que ellos no lo veían.
La confusión es culpa mía. A veces estoy tan metido en mis propios conceptos e ideas que llamo igual a categorías que convencionalmente han sido definidas de otra manera.
Veamos los que es un doble suelo tradicional:
Un doble suelo son dos mínimos aparecidos a la misma altura y solo lo daremos por bueno cuando rompe la resistencia del rally intermedio. La teoría convencional también dirá algo sobre el volumen que acompañe y esas cosas. Pero bueno, se leen el libro de AT de Murphy y se lo miran si quieren. Yo pienso que el volumen en general no tiene mucha importancia.
El otro día, en aquel post publiqué esta imagen.
Algunos lectores me imagino que no verían ningún doble suelo ahí, primero porque ambos mínimos no han aparecido a la misma altura y segundo porque no ha roto la resistencia del rally intermedio entre ambos mínimos.
Y es verdad. No es un doble mínimo según el chartismo clásico. Así que tengo que tener cuidado con las categorías y palabras que uso y renombrarlas en caso necesario.
Por tanto bautizo a todos mis patrones, siempre que no se interpreten igual que en el chartismo clásico, con el apellido de "Contrarian".
De esta manera, lo que apareció el otro día en el Ibex, no es un doble suelo. Sino un Doble Suelo Contrarian.
Y lo definiría así:
Un doble suelo contrarian es una de la estructuras básicas del mercado. De igual manera que los fonemas conforman el habla, los dobles suelos son parte del lenguaje íntimo del mercado. Los dobles suelos contrarian, nos señalan los puntos de inflexión del mercado, así como los cambios de escenarios. Cuando aparece un doble suelo, no se argumenta contra el. Cuando el mismo mercado anula un doble suelo tampoco se argumenta contra el.
Un doble suelo contrarian lo forma una vela alcista (heiken ashi mejor) que se forma a una altura (nivel de precios) aproximada de una anterior vela alcista que dió lugar a un rally inmediatamente anterior a la actual vela alcista.
No hace falta confirmación de ningún tipo, más que la propia vela alcista. Y no hace falta que la segunda vela alcista se forme a la misma altura de la primera, ya que el mercado presenta muchos dobles suelos irregulares.
Un doble suelo contrarian está vigente hasta que no se demuestre lo contrario, es decir, mientras el mínimo que marca el doble suelo no se quiebre la figura sigue siendo correcta. Una vez el precio quiebre el mínimo y por tanto la figura, significa que el mercado va a caer más.
Para más información sobre dobles suelos: pulsar aquí.
Ayer publiqué aquí lo que mandé en el Boletín Semanal y mencionaba un gran doble suelo en el Ibex 35:
Ya se que hay aproximadamente 1000 puntos de diferencia. Pero es un doble suelo, funcione o no funcione. Casi todos los suelos son irregulares. Un doble suelo es un punto anterior donde el mercado rechazó un nivel de precios y lo está volviendo a rechazar. Ese es su único significado. No hay nada mágico en ellos. Pero han de ser valores aproximados, no exactos.
Después, la teoría clásica dice de esperar a romper la resistencia. Pero la pregunta es ¿vamos a esperar a que todo el mundo gane para entrar y encima tener un stop loss super holgado? La respuesta es NO. Es mejor entrar ahora, que los que gustan de dobles suelos de toda la vida compren nuestro doble suelo contrarian. Y lo mejor de todo, como entramos antes tenemos stops más ceñidos y lo podemos intentar más veces.
En todo caso, los patrones por sí mismo no significan nada, siempre hay que ponerlos en contexto. Por eso, cuando yo hablé de doble suelo contrarian o anticipado, como se prefiera, lo hacía teniendo en mente una visión mucho más amplia de los mercados.