¿Adivináis de quién se trata?, ¿Quién ha sometido territorios esclavizando a sus habitantes sin utilizar la fuerza?, ¿Quién ha distorsionado el fin en sí mismo de cualquier economía, que, debe estar al servicio de toda la ciudadanía?...¿Aun no sabéis quién soy?, Soy yo, Las Finanzas, también conocida ahora como economía.
Soy yo, el 70 % del actual sistema de mercado monetario, soy yo, un sector parasitario que se caracteriza por no aportar nada de valor vital a la sociedad, soy yo, la artífice de una práctica que únicamente se basa en el movimiento arbitrario del dinero, tratando a éste como un producto en sí cuando ni siquiera tiene realidad física, soy yo, el casino que os gobierna, soy yo, la banca que siempre gana, soy yo, la que controla todas vuestras des-cracias.
Efectivamente, la economía, soy yo. ¿Queréis conocer mi historia?
Actualmente, solo dedico una parte de mis recursos al área real, es decir, a través de sociedades jurídicas o acciones participadas, que, solo sirven a los intereses del capital, y, que además controlo, el área de producción y distribución de cualquier economía no supone más del 30 %. Este hito, ha sido posible gracias a la expropiación de la eficiencia tecnológica, que, actualmente es la principal causa del desempleo mundial.
Si desgloso el anterior porcentaje, encontramos otra desproporción significante; del total de recursos monetarios destinados a esta área productiva, el 70 % va destinado a publicidad comercial, propaganda orientada.
Actualmente, cualquier corporación, que, también controlo a través de la deuda y Banco-Cleptocracia, gasta mucho más dinero en publicidad comercial que en el proceso de elaboración del producto o servicio que distribuya.
No importa si existe o no necesidad que cubra una demanda realmente interesada, tampoco si se establecen criterios de oferta sostenible que practiquen la ausencia de desperdicio y el respeto al medio ambiente, fabricar consumibots orientados es la clave para establecer valores distorsionados y así perpetuar sus ganancias cíclicas. No importan las SocianCias, es decir, mi parte de economía real productiva.
Para realizar este lavado de cerebro, se inventó una palabra muy chula, Marketing; actividad propagandística que genera entradas de pensamiento condicionado, y, produce salidas de comportamiento deseado. No interesa la Conocidad aplicada.
Pero como ya os he dicho, ahora las Finanzas, también yo, es la parte de mi identidad que os controla, siempre al servicio de una clase dominante con fines sociales aberrantes. No obstante, muy pronto perderé la partida, sufro daños estructurales irreparables desde mi origen y fundación, ya que, los árboles no crecen hasta el cielo, es decir, cuando mis amos, corrompidos por la sed de ganancias, estallen intencionadamente la burbuja definitiva del mercado de derivados, que, actualmente supone más del 70 % del PIB mundial, será el fin de la partida, jaque mate a la humanidad monetariamente vencida.
Pero no son las finanzas un área buena o mala de la economía, es su aplicación la que determina su valía, rescatarme, y veréis de que soy capaz en un solo día. Aun estáis a tiempo, podéis ganar la partida, aplicadme como sociales finanzas, y, la humanidad no será vencida. Para ilustraros el camino, regresemos al eficiente punto de partida:
Amsterdam, Holanda, finales del siglo XVI, capital mundial de la innovación económica, fue la precursora y creadora del primer banco central tal y como lo conocemos hasta ahora. Se diseñó con el fin de proteger a los mercaderes, ya que, a principios del siglo XVII existía una gran cantidad de monedas acuñadas en circulación, que, generaba un mercado especulativo y de incertidumbre sobre el valor de las mismas. Para remediar esta situación, el banco de Amsterdam, recibiría todas las monedas locales y extranjeras por su valor intrínseco, y, a cambio entregaría certificados de crédito al cliente. Así nació el dinero bancario, que, para este caso únicamente permitía realizar transacciones entre los clientes, será más adelante cuando se inventó el papel moneda.
Se estableció además una regulación, donde, todas las transacciones en Amsterdam debían ser pagadas con estos certificados de crédito, estableciendo así por primera vez el dinero bancario de curso legal. Esta ley obligó a todos los comerciantes a mantener una cuenta en el banco, aumentando así la demanda de dinero bancario.
Pero el éxito de este precursor banco central fue el siguiente: “…de igual modo, se fijó una misma ley para los depósitos en lingotes de oro y plata. Cuando alguien quería retirar oro del banco, tenía que comprar crédito bancario suficiente para hacerlo. Al adquirir dinero en papel, lo que el titular compraba era el derecho a reclamar el equivalente a los lingotes depositados. El éxito del banco se debía a su política conservadora de no prestar ningún lingote, manteniendo un respaldo completo sobre el dinero emitido, por lo tanto los depósitos a la vista serían suficientes para convertir inmediatamente todos los recibos de papel en dinero metálico. Esta política brindó gran estabilidad a los certificados de crédito emitidos por el banco, los cuales, en muchos casos, valían más que las monedas reales…”
Y así, fue como nacieron las Finanzas, sanas y saludables, dirigidas únicamente a facilitar el intercambio de bienes y servicios. La riqueza, por tanto, dependería únicamente del comercio asociado a una productividad efectiva. Sirva de ejemplo la primera corporación multinacional de la historia, la compañía de las indias orientales, donde, se aplicaron las finanzas con fines sociales.
Las indias, disponían de un tesoro que todos reclamaban, las especias, productos que daban sabor a la comida, y, que además conservaban los alimentos. Su gran demanda, junto con el ingenio tecnológico marítimo de los países bajos, originó la expansión comercial desde este territorio hasta Asia por mar, ya que, la ruta de las especies terrestre suponía un mayor riesgo de saqueo y largo tiempo para realizar el viaje. La expedición en barco supuso entonces un gran ahorro de tiempo y costes, ya que, con un solo viaje podia incluso pagarse la construcción de un navío. Las ganancias y rentabilidad estaban aseguradas.
No obstante, como la travesía era muy larga y arriesgada, los mercaderes tuvieron que unir sus recursos y compartir riesgos, como resultado, se crearon seis empresas de las indias orientales. En unos años, presionadas por el gobierno holandés para ser más fuertes, todas las empresas se fusionaron para formar la compañía de las indias orientales, que, gozaría del monopolio del comercio desde el cabo de esperanza hasta el cabo de Magallanes, aproximadamente medio mundo.
El diseño y estructuración de la compañía fue muy original, ya que, cada ciudad holandesa tenía su parte proporcional, y, además se invitó a los ciudadanos a participar del próspero negocio mediante aportaciones económicas, actis, acciones tal y como las conocemos ahora, que, suponían una fracción del capital social de la compañía, y, una participación en las futuras ganancias de la empresa. Unos años más tarde, la compañía decidió que los accionistas no podrían recuperar su inversión, pero, si podían vender sus participaciones a otros inversores. Y así, nació el primer mercado de valores, que, se regiría por las leyes de la oferta y la demanda, es decir, el precio se decidiría entre compradores y vendedores.
A principios del siglo XVII, la primera empresa bursátil, la compañía holandesa de las indias orientales, se disponía a conquistar el mundo con sus accionistas y un próspero mercado para sus participaciones.
Establecieron factorías, almacenes, puertos y nuevas colonias a lo largo de toda la costa de Asia, que, les reportaron grandes beneficios como compañía, incrementando así el valor de sus acciones e interés por otros inversores. Además de su habilidad para los negocios, tuvieron que protegerse de la competencia española e inglesa, armándose de una gran capacidad de fuego, e, incluso podían declarar la guerra si era preciso para proteger su comercio. Aplicó también economías de escala y una red de información interna que ayudó a mejorar su actividad en todas las áreas. Allá por 1.620, la compañía de las indias orientales ya disfrutaba del monopolio del comercio de todas las especies de Asia a Europa. Eso si es eficiencia de mercado, real claro.
Su éxito económico, despertó el interés de otros inversores, ya que, siempre repartía un dividendo anual del 16 %, y, en tan solo unos años, el valor de su acción se multiplicó por 7.
Y así, es como un sistema financiero sólido, que, opera con reservas plenas respaldado por metales preciosos, y, emite dinero bancario libre de deuda inyectado directamente en la economía real productiva, puede estar al servicio de toda la sociedad creando valor indefinidamente.
Bancos Centrales, soy yo, las Finanzas, dejadme que pueda rescatar a la ciudadanía.
Como práctica, os proponemos que expongáis en el área de comentarios ejemplos dirigidos a actuales sectores productivos tales como; energía, infraestructuras, alimentación, textil, etc., ¿Cómo crearíais una actualizada compañía de los indias orientales, respaldada por saneados bancos centrales?
¿Queréis Conocer y Compartir el Nuevo Proyecto de la AbundioTeca?, WikiBolsa, Enciclopedia Bursátil y Monetaria, que, Informará y Compartirá Abiertamente con todos sus Usuarios, Códigos y Métodos Aplicados para Ganar Dinero en todos los Mercados Monetarios: Bolsa, Renta Fija, Derivados, y, Divisas.
Si durante el periodo de Promocion ya Descargarteis Gratuitamente el Primer Tomo, ahora tambien podreis Ganar unas Monedas con su Expansion Masiva. En un anterior post, "Como Ganar Dinero Expandiendo WikiBolsa", anunciamos esta inciativa
No obstante, si quereis adquirirlo en cualquier formato (fisico o electronico), y/o idioma, por unas cuantas monedas, podreis encontrarlo en la siguiente estanteria