...viene de la primera parte:
¿Cómo acabará todo esto en España?
El problema de España está ligado al de toda la periferia europea. Los años de boom después de la entrada al Euro proporcionaron: 1) Dinero fácil vía tasas de interés reales negativas; y 2) sobrevaluación de precios en referencia a los tipos de cambio reales.
España, y el resto de la periferia de Europa, podrían salir de ésta tanto con un incremento masivo de la productividad, lo cual es altamente improbable, como reduciendo dueldos y precios del orden de un 20-30%, que es lo que ocurrirá muy despacio a base de sufrimiento. A esa reducción de precios y salarios se la podría llamar también una devaluación "interna".
Una devaluación como esa implicará grandes pérdidas en los bancos locales y para los creditores externos. En el caso de los países de la Europa del Este, el daño será sustancial pero no muy grande. En el caso de España la eliminación de deuda hipotecaria será masiva. Estimamos que las pérdidas inmobiliarias en España superarán los 250.000 millones de € cuando todo esté dicho y hecho. Obviamente, los bancos españoles y extranjeros no van a admitir la envergadura del problema, y por eso se están maquillando las pérdidas.
El aumento del déficit en la balanza comercial es una forma de "ahorro negativo". El gran crecimiento del consumo en España ha tenido que ser financiado por el resto de Europa. El déficit comercial español fue de los mayores del mundo en términos absolutos y relativos, con un 10% del PIB a finales de 2007.
Sin duda, el déficit por cuenta corriente español fue el mayor del mundo junto al de los EE.UU. en términos absolutos. La economía española actuó como un gigante consumista chupando los ahorros del resto de Europa.
El alto grado de consumo en España vino principalmente de créditos externos y no fue financiado por ahorro doméstico existente.
¿Cómo es de negativo respecto a otros países? La deuda exterior española es extremadamente alta en términos absolutos y relativos. Está entre los cinco mayores del mundo, y aumentando de forma escalofriante:
Tipos de interés reales: La Deflación es el demonio
LA Europa del Este, España e Irlanda están experimentando el comienzo de la deflación. Creemos que vamos a ver mucha más deflación en el futuro en estos países, que tendrán ramificaciones hacia todo el sector bancario europeo. Los países de la periferia son deudores netos, y el resto de Europa es acreedor neto. Cuando un deduor no puede pagar, el acreedor sufre. Alemania, Francia y otros necesitarán afrontar la recapitalización de la periferia y de España. En palabras de Plauto: "Soy rico, si no pago a quienes debo". Una espiral deflacionaria significa que la mayoría de deuda necesitará ser amortizada, cancelada por los creditores, que tendrán que absorber las pérdidas.
En un escenario deflacionario, ser deudor se convierte en algo mucho más duro. Incluso cuando los tipos se van a cero, los precios y salarios pueden bajar más, y la cantidad real debida pude aumentar más todavía. Por eso la deflación es algo terrible.
España tiene ahora un IPC (índice de precios al consumo) y un IPM (índice de precios mayoristas) negativo.
La inflación en España ha sido negativa en los últimos trimestres, y no experimentaba una caída similar desde hace casi 50 años. No obstante, el Banco de España y el Gobierno, están escondiendo la cabeza bajo tierra como las avestruces.
El problema de la deflación es que a pesar de que los tipos fijados por el Banco Central Europeo sean muy bajos, siguen siendo una tasa de interés real extremadamente elevada para España, debido a su IPC e IPM negativo.
España no es el único país que se enfrenta a la deflación. El problema también lo tiene toda la periferia europea. Irlanda, por ejemplo está cayendo a ritmo del -5.9%, muy por encima del resto de países del mundo (sólo Thailandia se aproxima con un -4.4%).
Creemos que lo que le sucede a Irlanda será lo que le espera a España en los próximos meses en los que la economía se ajuste lentamente a la realidad. Casi todos los bancos de Irlanda han sido sostenidos por el Estado irlandés, que está intentando deshacerse de los activos tóxicos como puede. Creemos que el caso de España se aproximará a Irlanda mucho más que el resto de sus vecinos europeos.
A pesar de que la inflación es negativa y el paro alto, las negociaciones sindicatos-Gobierno aún están aumentando las condiciones salariales. La mayoría de los acuerdos salariales en España se alcanzan mediante negociaciones y regateos con el sector industrial. De hecho los aumentos salariales se están produciendo por encima del objetivo de inflación del BCE del 2%.
Viendo hasta dónde están llegando los aumentos salariales y el coste productivo y la realidad deflacionaria en España, creemos que el paro se puede ir a cotas del 25%. Con un desempleo del 25% y una deuda deflacionaria dinámica, ¿cómo creen los bancos que les van a poder pagar? ¿Quién va a ganar suficiente dinero para hacer frente a su hipoteca, cómo van a poder comprarse una casa cuando sus salarios hayan sufrido las consecuencias de la inflación? Pensar que lo peor ha pasado ya en España es no tener sentido común.
Pensamos que los políticos españoles y los inversores internacionales han evaluado de forma muy benévola la situación de España, pero los acontecimientos les obligarán a cambiar de opinión. Mirando hacia atrás, España es como las subprimes, donde todos los resultados de la banca eran buenos, hasta que dejaron de serlo. Esto es típico de las burbujas, y España esta vez no será diferente.
Dives sum, si non reddo eis quibus debeo.
Soy rico, si no pago a quienes debo.
Titus Maccius Plautus (c. 254-184 BCE), "Curculio"