El Contrarian Investing consiste en invertir cuando el pesimismo sobre una acción o el mercado en general hace que el precio baje de una manera excesiva, dejándolo tan bajo que exagera las posibilidades de escenarios negativos mientras minimiza las posibilidades de escenarios positivos. Identificar estos casos puede llevarnos a unos retornos considerables.
En otras palabras, el Contrarian Investing consiste en comprar cuando la masa vende, vender cuando la masa compra. Como diría Warren Buffett, “Be fearful when others are greedy, be greedy when others are fearful” (sé temeroso cuando el resto es avaricioso, se avaricioso cuando el resto es temeroso).
Se puede decir que el Contrarian Investing es una corriente dentro del Value Investing, ya que según mi punto de vista se basa en el mismo principio de comprar empresas infravaloradas por el mercado y vender cuando el precio supera su valor intrínseco. Podemos definir el Contrarian Investing como la corriente dentro del Value Investing que busca empresas que han sido castigadas en exceso por problemas puntuales que pueden afectar a sus resultados a corto plazo pero no afectan en exceso su rentabilidad a largo plazo.
Un conocido inversor que usaba el Contrarian Investing es Andre Kostolany. Podemos apreciar su filosofía de inversión en su libro, “El maravilloso mundo del dinero y de la bolsa”, uno de los primeros libro de bolsa que he leído, y que recomiendo a todo el mundo interesado en el mundo de la bolsa que quiera aprender y pasar un buen rato a la vez. Para decidir cuándo comprar o vender acciones, André le preguntaba a su chófer si le recomendaba invertir en bolsa, y si éste le respondía afirmativamente, era el momento en el que vendía sus acciones. Ese era el método que empleaba para conocer el momento en el que la bolsa pasaba a estar sobrevalorada, cuando hasta los chóferes compraban acciones llamados por las grandes rentabilidades conseguidas en los últimos años.
¿Cómo invertir utilizando el Contrarian Investing?
Para invertir mediante esta técnica de inversión, debemos aprovechar cuando exista un cúmulo de malas noticias que pueden afectar a la compañía a corto o medio plazo. Si todas estas noticas causas que el precio de la empresa caiga de una manera exagerada, estaremos posiblemente ante una buena oportunidad de compra. En este artículo de Toros, Osos y Borricos podemos encontrar un ejemplo de una situación de este tipo en la cotización de FCC. Debido a las previsiones de desaceleración económica y a la crisis inmobiliaria, el precio de las acciones de FCC bajó considerablemente convirtiéndola en una buena oportunidad de compra a largo plazo.
Otro ejemplo de una buena inversión contraria (en su momento) lo descubrí haciendo mi proyecto de “Time Series Econometrics” sobre la eficiencia en los retornos de una empresa. Esta empresa es Procter & Gamble, multinacional conocida por producir y distribuir marcas tan conocidas como Gillette, Pringles, Duracell, Ariel o Tampax entre muchas otras. El 7 de Marzo de 2000, la cotización cayó un 31% en un solo día a causa de una reducción en las estimaciones de crecimiento de la compañía y la mala situación que se vivía en general entre las empresas del sector como Coca-Cola. En este artículo se puede apreciar el pesimismo que se padecía en el sector en ese momento.
Como podéis observar en el gráfico, después del la gran caída en la cotización de Procter & Gamble, la cotización siguió subiendo de forma continuada hasta la actualidad. Los que supieron aprovechar la oportunidad y comprar tras la caída, fueron recompensados con una buena rentabilidad gracias a su revalorización que dura hasta ahora.
Recomendaciones
Si tenemos la suerte de encontrar una buena empresa que encaje dentro del ámbito de las inversiones contrarias, aparte de llevar a cabo un análisis exhaustivo de la compañía como es necesario en cualquier otro tipo de inversión, recomiendo tener en cuenta algunos puntos adicionales para este tipo de inversión.
La primera recomendación antes de realizar una inversión de este tipo, es invertir solamente en empresas que puedan recuperarse a medio-largo plazo de los problemas que tienen en la actualidad. Si los problemas que afronta la empresa pueden dañar sus ventajas competitivas, es posible que la empresa no se recupere en mucho tiempo, o que incluso quede condenada a pérdidas continuas indefinidamente o incluso a la bancarrota.
También es recomendable que las inversiones contrarias se lleven a cabo siempre como inversiones a largo plazo, debido a la irracionalidad del mercado a corto plazo y su imprevisibilidad. ¿Es posible que haya más caídas después de comprar y que el mercado exagere más las caídas en la cotización? Por supuesto, pero si hemos valorado la empresa correctamente y sus ventajas competitivas no están dañadas, esto no tiene por qué preocuparnos en absoluto. De hecho, pueden servirnos para aumentar nuestra posición en la empresa.
En próximos artículos tengo pensado complementar este artículo con ejemplos de lo que NO es Contraria Investing. Podremos ver que invertir en empresas como Jazztel, Terra o Astroc dista mucho de lo que serían buenas inversiones contrarias.