En la contabilidad de costes existen fundamentalmente 2 tipos de costes:
1) Costes del producto (o coste de la mercancía vendida -CMV-): son aquellos costes que se reconocen como directamente imputables al producto fabricado. Son por tanto los costes variables (CV) de la empresa, y según el criterio elegido para efectuar la imputación de costes, pueden ser también algunos costes fijos (CF).
2) Costes del periodo: son aquellos costes que se identifican como fijos (CF) y que por tanto no son imputables a priori al producto fabricado. Por descarte, son el resto de costes que no han podido ser clasificados dentro de los "costes del producto".
En primer lugar hay que ver qué tipo de empresa estamos analizando:
1) Empresa comercial: es aquella que compra, almacena y revende mercancías, no las transforma. El coste de la mercancía vendida (CMV) en este caso se calculará según el criterio de valoración de existencias del almacén (FIFO ó PMP).
2) Empresa industrial: es aquella que compra materias primas, las transforma y les añade valor, fabricando productos terminados. El coste de la mercancía vendida (CMV) se calcula como la suma de todos los costes directamente imputables al producto. Hay 2 criterios:
a) Direct Costing (ó Coste Directo):
Considera que los CMV están compuestos solo por costes directos y variables. Es decir, el coste de la materia prima (MP), de la mano de obra directa (MOD) de los trabajadores que intervienen directamente en la elaboración del producto y de la parte de costes indirectos de fabricación (CIF) que se puede considerar variable. Es decir, CMV = CV = MP + MOD + CIF Variables. El resto de costes de estructura son los "costes del periodo".
b) Full Costing (o Coste Completo):
Considera que los "costes del producto" (o CMV) están compuestos por la totalidad de costes soportados en el periodo. Es decir, CMV = CV + CF = MP + MOD + CIF (fijos y variables).
En resumen:
1) Costes del producto (o coste de la mercancía vendida -CMV-): son aquellos costes que se reconocen como directamente imputables al producto fabricado. Son por tanto los costes variables (CV) de la empresa, y según el criterio elegido para efectuar la imputación de costes, pueden ser también algunos costes fijos (CF).
2) Costes del periodo: son aquellos costes que se identifican como fijos (CF) y que por tanto no son imputables a priori al producto fabricado. Por descarte, son el resto de costes que no han podido ser clasificados dentro de los "costes del producto".
En primer lugar hay que ver qué tipo de empresa estamos analizando:
1) Empresa comercial: es aquella que compra, almacena y revende mercancías, no las transforma. El coste de la mercancía vendida (CMV) en este caso se calculará según el criterio de valoración de existencias del almacén (FIFO ó PMP).
2) Empresa industrial: es aquella que compra materias primas, las transforma y les añade valor, fabricando productos terminados. El coste de la mercancía vendida (CMV) se calcula como la suma de todos los costes directamente imputables al producto. Hay 2 criterios:
a) Direct Costing (ó Coste Directo):
Considera que los CMV están compuestos solo por costes directos y variables. Es decir, el coste de la materia prima (MP), de la mano de obra directa (MOD) de los trabajadores que intervienen directamente en la elaboración del producto y de la parte de costes indirectos de fabricación (CIF) que se puede considerar variable. Es decir, CMV = CV = MP + MOD + CIF Variables. El resto de costes de estructura son los "costes del periodo".
b) Full Costing (o Coste Completo):
Considera que los "costes del producto" (o CMV) están compuestos por la totalidad de costes soportados en el periodo. Es decir, CMV = CV + CF = MP + MOD + CIF (fijos y variables).
En resumen: