El otro día hablaba de las limitaciones de unas limitaciones de las estadísticas, referida a la dificultad de estimar valores extremos, en el que trataba de descartar que la mayoría de la explicación del PIB fuese debido a una manipulación de los datos. Es decir, falsear.
Sin embargo, lo que no se puede descartar y mucho menos en España es encontrarnos con distintas trampas que alteran el resultado, (sin falsearlo), provocando desde luego unos resultados funestos para la economía y para la verdad.
Para explicar esto, me gustaría poner un ejemplo de lo que puede ser una gran trampa en el uso de las estadísticas, pero en relación ahora a los precios y concretamente a los precios de un bien como las gasolinas que se ha convertido en una fuente de verdadero saqueo entre los españoles.
A lo largo de este mes, me he fijado que, por lo menos en mi zona, ocurre una cosa muy curiosa. Los lunes los precios se desploman. Tanto esta semana como la anterior, los precios en mi zona se han ido al entorno de 1,315 por litro, (hablo del gasoil); después de una bajada imponente para los lunes. El martes lo que nos encontramos es con una subida espectacular, (ayer estaba ya en torno al 1,35), subida que continua el miércoles, (hoy está en torno al 1,37).
Y de esta forma nos encontramos con la misma senda durante todas las semanas. Esto hace sospechar y como siempre que ocurre algo raro, toca buscar ciertas relaciones, lo cual a veces no es sencillo.
En el caso particular de las gasolinas, lo que he encontrado es que en la metodología de la Unión Europea, nos encontramos con que en cada país se recogen los precios de las gasolinas, (para el boletín petrolero de la Unión Europea) de una determinada forma y con una determinada metodología. En particular en España, los datos salen de las petroleras que envían información por web; ¿A que no saben que día?. Pues se recogen los precios de los lunes. (punto 1.9 en la página 15 del documento donde se específica la metodología).
La consecuencia es muy clara; resulta que en un entorno en el que el gasoil pega unos bajones impresionantes un día determinado a la semana, y resulta que existe un organismo que recoge los precios este día precisamente, lo que nos encontramos es que los precios de las gasolinas estimadas por el boletín petrolero de la UE minusvaloran los precios que pagamos por el petróleo, sobre todo cuando se acompañan de la explicación normalmente difundida: “esta semana los precios de las gasolinas han….”, que es directamente falsa.
Lo bueno es que allá por finales de noviembre nos encontraremos con el informe emitido por el ministerio de industria, que nos dará los datos diarios, (¿Por qué se envían sólo los datos de los lunes cuando tenemos los de todos los días?), y podremos comprender si este fenómeno que yo he observado para Galicia se repite para el conjunto de España.
Pero ya puestos a sospechar de que se estén manipulando comportamientos para ofrecer una estadística determinada, me queda una gran duda que es la de ¿tendrá algo que ver que este fenómeno esté siendo especialmente acusado en noviembre?. Y en este sentido es donde nos encontramos con algunas limitaciones de España, (aún con una ley de transparencia en la que se supone que debemos enterarnos de todo).
En este sentido, he tratado de buscar en el INE la información específica de cómo se calcula la evolución de los precios relativa al epígrafe de los hidrocarburos. Lamentablemente no he conseguido obtener la información, ya que las explicaciones sobre la recogida de precios no están al nivel de desagregación referida a este boletín.
Es bastante grave que esta información no esté accesible, y considero que dado que no se me da del todo mal encontrar información, en el caso de que esté disponible está bien escondida, hasta el punto de que creo, (y esto es una opinión), que se trata de un producto con variaciones continuas de precios lo asimilaría a bienes perecederos aplicando tres recopilaciones de precios en el mes hasta el 22 de cada mes. (esto es lo que hay en la metodología). Pero como es un producto de obtención centralizada probablemente se use todo el mes, (recomiendo leer el apartado 7 acerca de la recogida de precios de la metodología aunque sea para comprobar que no dice nada).
En todo caso no me extrañaría nada que se usasen los datos obtenidos para el boletín petrolero para el IPC, (de hecho sería lo normal, en un entorno en el que estamos midiendo exactamente lo mismo). La consecuencia, sería muy obvia. Este fenómeno afectaría al dato de los precios de los combustibles, que es uno de los puntos que tiene una gran importancia en el cálculo del IPC correspondiente al mes de noviembre.
Si los precios recogidos son siempre los menores, se está infravalorando el poder adquisitivo y el IPC, lo cual afectará todos y cada uno de los meses; pero sin embargo en noviembre nos encontramos otra casualidad que es el hecho de que precisamente este mes nos encontremos con un tema candente que es la revalorización de las pensiones, punto para el que es absolutamente clave el IPC de noviembre.
En definitiva, con precios que cuatro días al mes sean en torno a un 4% inferiores al del resto de los días en un bien clave, lo que tenemos es que tendremos un IPC sensiblemente inferior, lo cual afectará a las pensiones. Curioso, ¿no?.
Evidentemente hoy creo que he dejado claro que todo esto no es más que una suposición mía a partir de una experiencia muy particular; pero evidentemente algo está fallando cuando no podremos tener los datos de precios hasta el boletín, (la información diaria no se acumula y no he tenido la precaución de descargar los datos diarios), que muy poca gente mirará y que en todo caso llegará dentro de un tiempo, para que sea imposible contrastar si esto es lo que va al IPC.