¿Alguna vez te has preguntado qué significan las siglas TAE? Pues bien, en este artículo, además de explicarte qué es la TAE, te diremos qué se incluye para su cálculo y de qué forma puede influirnos a la hora de elegir cualquier producto bancario.
Aunque la TAE no solo está presente en depósitos o cuentas, sino que podemos observarla también en productos como préstamos personales e hipotecas, tiene un significado distinto para cada caso. Veamos con más detenimiento qué es la TAE y cómo podemos utilizarla al comparar.
¿Qué es la TAE?
El significado exacto de
TAE es Tasa Anual Equivalente o Tasa Anual Efectiva. Es un término financiero que se define como el resultado de una fórmula matemática que
incorpora el tipo de interés nominal, las comisiones bancarias y el plazo de la operación. El término
TAE aparece tanto en los productos de ahorro como en los
préstamos tanto hipotecarios como consumo.
¿Qué incluye la TAE?
- En productos ahorro: la TAE recoge las liquidaciones de pago. Concretamente, la TAE es la tasa que realmente produce el dinero en juego. Conoce los depósitos más destacados según su TAE de España en el momento y comprueba la rentabilidad que obtendrías: Aitor Beldarraín Begoña expone el siguiente ejemplo para explicarlo:
Si se invierte 1 millón de euros a un plazo de 1 año a un interés nominal del 4%, al final del año ese dinero ha producido un interés de 40.000 euros. Pero si en vez de cobrar esos 40.000 euros, al final el banco o caja ofrece la posibilidad de cobrar ese dinero en períodos trimestrales o semestrales, el poder disponer de ese dinero antes supone un interés, y eso es la TAE, la suma de los valores futuros de los flujos de interés.
- En préstamos: tanto en los préstamos de consumo o personales como en los hipotecarios, la TAE incluye dos conceptos, que son la comisión de apertura y la de cancelación anticipada. La variación está en el porcentaje que en préstamos al consumo es más alto porque son operaciones de mayor riesgo para los bancos y aplican comisiones más altas para protegerse
- Comisión de apertura: los gastos originados en las entidades financieras por la tramitación de un contrato crediticio. Habitualmente, la cuantía de esta comisión se cobra de una sola vez, cuando se firma el contrato; sin embargo, es posible pactar pagarla a lo largo de la vida del préstamo.
- Comisión de cancelación o amortización anticipada: Aunque no siempre es así, generalmente las entidades financieras reconocen a sus clientes el derecho a cancelar el préstamo total o parcialmente antes de que termine el plazo. Como los intereses están estimados para el total de la vida del préstamo, si esta se acorta, el beneficio del banco o caja es menor. Por ello, al cancelar el préstamo total o parcialmente (con entregas a cuenta) las entidades financieras cobran una comisión, resultado de aplicar un porcentaje sobre la cantidad cancelada o amortizada antes de tiempo. Aquí existe una limitación, y es que en los préstamos a interés variable la comisión por cancelación anticipada está limitada por ley al 1%.
¿Qué es la TAE de una hipoteca?
La TAE en la hipoteca tiene en cuenta los intereses que debemos pagar (comisiones y cualquier otro tipo de gasto) en relación con el préstamo hipotecario, pero excluyendo los de notaría.
En cambio, sí se incluyen los costes de los servicios asociados al contrato de préstamo hipotecario (por ejemplo, los seguros) cuando estos han condicionado la obtención del préstamo en determinadas condiciones.
Además, en España es obligatorio que la TAE figure en la publicidad y cualquier documentación de los productos financieros. En el caso de las hipotecas variables, la TAE se calcula partiendo de que el tipo de interés y el resto de gastos conservarán el mismo valor que en el momento del cálculo.
Así, la TAE de la hipoteca nos ayuda a comparar lo que nos cuesta una u otra, por lo que es de gran ayuda para tener una referencia del coste real de la hipoteca.
¿Es la TAE lo que se paga al banco con cada cuota de la hipoteca?
No. Esa cantidad refleja el importe del préstamo que devuelves mes a mes, más el interés de ese período (interés nominal o TIN).
Entonces, ¿para comparar una hipoteca solo hay que mirar la TAE?
No. Te servirá de ayuda para comparar, pero también debes tener en cuenta otros aspectos como son los plazos y las penalizaciones por amortización anticipada de capital. De igual modo, debes tener en cuenta los productos asociados a la hipoteca, puesto que contratar otros productos financieros (como los seguros) puede ayudar a reducir el diferencial del tipo de interés.
¿Cómo saber si una TAE es beneficiosa para tu hipoteca?
Al comparar diferentes ofertas comerciales de distintos bancos en base a
la TAE de la hipoteca, que cuanto más baja, mejor. Te puedes hacer una idea de si lo que te ofrecen te conviene o no comparándolas. Aun así, lo primero en lo que debes fijarte es si el préstamo es a tipo variable.
¿Por qué? Porque si este es el caso, no es posible conocer la evolución del tipo de interés en un futuro. Por tanto, la TAE se calcula suponiendo que el tipo de interés conserva el valor en el momento del cálculo. Y a esto es a lo que se denomina TAE variable, que tiene sólo efectos informativos, puesto que depende de las revisiones del tipo de interés.
La TAE de un depósito
La TAE aquí nos sirve, principalmente, como indicador para
comparar distintas ofertas. La TAE, a diferencia del TIN, tiene en cuenta el periodo de vencimiento del depósito y posibles comisiones que pueda la entidad cobrar, por ejemplo,
Raisin no cobra ningún tipo de comisión. La TAE tiene en cuenta, además, la
reinversión de esos intereses que se han generado en el plazo, mientras que el TIN no.
Mientras que
en un depósito buscamos que la TAE sea alta para ganar más, porque en este caso nos muestra la rentabilidad
, en un préstamo o hipoteca buscamos que el porcentaje sea lo más bajo posible, porque en ese caso nos muestra el precio de ese dinero que la entidad bancaria nos ha prestado.
Por otro lado, un producto que también puede
depender de la TAE es la cuenta remunerada, ¿crees que tiene mucho o poco que ver? Pues es un factor importante, ya que en función de eso tendrás tus beneficios monetarios en el plazo acordado y en función de la base anual que rija tu producto.
¿A cómo está la TAE?
La
TAE suele encontrarse unos puntos por debajo del tipo de interés en el caso de los productos de ahorro y unos puntos por encima en el caso de los préstamos. Ofrecer una cifra exacta es difícil porque son las entidades bancarias las que los estipulan. No obstante, el
Banco de España, dentro de su página web, ofrece unas tablas en las que se pueden consultar las rentabilidades de los productos que hemos mencionado anteriormente y que vemos en mayor detalle a continuación. En el caso del
depósito, también es importante diferenciar entre TIN y TAE, cuidado con la letra pequeña, porque te puede cambiar el resultado de tu inversión.
Entre los datos que nos da el Banco de España, vemos que los bancos ofrecen préstamos personales a Tasas Anuales Equivalentes de en torno al 7-8%, dependiendo del plazo. En cuanto a los préstamos hipotecarios, los bancos están ofreciendo hipotecas con una TAE que ronda el 2%.
Y en cuanto a la
TAE media que ofrecen los depósitos españoles, podemos observar que los bancos ofrecen una
TAE de media del 0,01% para los depósitos de plazo de hasta 1 año. Sin embargo, podemos encontrar gran variedad de depósitos que superan la media de España. Puedes comprobar la rentabilidad de gran variedad de
depósitos en nuestro simulador.