El 14 de noviembre de 2009, en una conferencia denominada “Respuestas y Retos”, dio las dos cosas. Otra cosa es que nos gusten. Principalmente descriptivo es el titular de “El Economista”, que afirma: “Si estamos rezagados, es nuestro problema: El BCE subirá tipos”. Y hombre básicamente el resumen es apropiado. Se anuncia, (o por lo menos los periodistas así lo entendieron), que el BCE ya está empezando a subir tipos. La verdad es que sinceramente creo que estos personajes de los bancos centrales, hace tiempo que han olvidado cual es su lugar en todo este tinglado.
¿Cómo que será nuestro problema?. Vamos a ver si nos aclaramos un poco. Este señor no viene a ser otra cosa más que un servidor nuestro. Un señor de cierto nivel, pero al final un servidor y desde los bancos centrales se debe desde luego a solucionar los problemas de la sociedad. Ya sé que de un tiempo a esta parte, tenemos la sensación de que los señores de los bancos centrales son dioses y así nos tienen rezando con frecuencia a que no la líen, (perdonen que no rece para que realmente hagan algo por la sociedad, pero es que ya me conformo o sueño, con que no manden a todo el mundo a la ruina). Pero la triste realidad es que no son dioses, sino que son nuestros servidores. Y en este sentido, Sr. Páramo, la triste realidad es que si no le importan nuestros problemas, el problema es suyo. Al final responde con nosotros.
Ya sé que en toda esta demagogia, en todo el run-run y en el glamour de las conferencias, a veces se confunde independencia en la toma de decisiones, con independencia. Y por supuesto, se olvida de responder de las decisiones tomadas en base a la confianza que esa total independencia les generó. Pero la realidad es que se les ha dado independencia total, (otro día discutiremos si ha sido o no un error), y esa independencia para la toma de decisiones, lleva aparejada responsabilidad y tarde o temprano tendrá que responder.
Y va a tener que responder de lo siguiente:
He introducido las palabras González Páramo en el buscador de Google, y resulta que casi todas las entradas que aparecen están relacionadas con el mercado laboral, lo cual es un aspecto que me intriga de los bancos centrales; se pasan más tiempo intentando cambiar el mercado laboral que el sector financiero, sobre el que no han pedido una sola reforma. En fin, tras el segundo intento, he colocado las palabras González Páramo, al lado de Inflación. En este sentido me han aparecido varias noticias que no están relacionadas con el mercado de trabajo.
Y de la simple vista de las noticias, nos encontramos con algunas perlas.
En 2007, aparecen declaraciones suyas en una conferencia en Valencia, en la que además de los inmigrantes y las condiciones del empleo, nos suelta varias perlas:
“el hecho de estar cumpliendo el objetivo de inflación ahora (con el petróleo bajo) a no cumplirlo dentro de unos meses (con el petróleo alto) no hará cambiar la política de tipos de interés del Banco Central Europeo con subidas adicionales ya que, lo que ocurrirá, ya estaba previsto”. En fin, la verdad es que en 2007, el BCE afirma que tenía previsto la subida de petróleo, pero que eso no iba a afectar a la política de tipos. Lo que está claro es que la subida de tipos, no sólo no combate las subidas del petróleo sino que las provocaba, hinchando una burbuja de unos activos que en esos momentos funcionaba como una activo refugio.
En fin, lo curioso es que el plan era subir los tipos si subía la inflación, pero no en el caso de que esto fuese culpa del petróleo. El caso es que al final tuvimos las subidas de petróleo, tuvimos la subida de la inflación por culpa del petróleo y tuvimos las subidas de tipos en contra del plan que unos meses antes tenían.
Aunque claro, en el mismo artículo el Sr. Paramo, reconoce que el BCE no tenía demasiado elaborado el plan de actuación de las subidas de los tipos que habían iniciado un par de años antes. De esta forma, se puede leer: “hasta cuánto puede subir el euribor sin que los valencianos se vean ahogados por la hipoteca. González-Páramo, miembro del BCE, dijo que ni lo tienen calculado.”. Pues muy bien; todos confiando en que los gobiernos y las instituciones no iban a cargarse el país, y resulta que no tenían calculado lo que la sociedad podría pagar. ¡Acojonante!. Y lo peor es que se queda tan ancho. Claro que también es cierto que no había nada que calcular; teniendo como tenían el procedimiento de “Prueba y error”. Pues eso. Claro, luego resulta que los hipotecados calcularon mal. Y es cierto, aquel que en el 2001, se hipotecó, calculó fatal. Ni se le pasó por la cabeza que el Banco Central subiese los tipos hasta que una gran parte de la gente no pudiese pagar. Lo que no acabo de entender hoy, es que con banqueros centrales con esta capacidad, aún no estemos peor. Oiga, el plan ha sido subir los tipos, (y financiar la especulación en todos los commodities que nos han costado una pasta en supermercado, gasolineras, factura eléctrica y demás…), hasta que no aguantemos más. Da igual el número; la clave está que en ese punto la economía no aguantaría más. ¿Cómo se evita una debacle que se trata en subir todo hasta que se produzca?.
Por supuesto, por si confiábamos en la subida de los sueldos, la verdad es que en ese punto este señor se ha dedicado a fondo. El 10 de julio de 2008, con el petróleo en máximos y el Euribor en máximos, el señor Paramo, hace unas declaraciones, en las que avisa de que el traslado de la inflación a los salarios sería desastroso. En fin. La verdad es que yo no sé si este señor analizó como afecta a unas cuentas de cualquier familia el hecho de que se dupliquen los gastos en un par de años, a la vez que se pida que se le congelen los ingresos. Pero piense si es una empresa: ¿sobreviviría?. Pues resulta que no sobrevivió.
Pero en fin. Volvamos a su capacidad de análisis. Entiendo que es de capital importancia, pensar que en función de los diagnósticos, se tomarán decisiones, de tal forma que un diagnóstico erróneo, las decisiones serían desastrosas.
El 12 de mayo de 2008, el Sr. Páramo hace unas declaraciones, en las que ve una inflación prolongada durante mucho tiempo, cuando la realidad es que apenas tres meses después el ipc iniciaría la caída libre; habla de las inyecciones de liquidez que habían estabilizado los mercados, (esos en los que por la época no había especulación cuando realmente estaba financiada en gran parte por nosotros mismos, a través de usted). Y respecto a los mercados financieros que estaban a punto de derrumbarse, el señor Páramo afirma: “sólo veo problemas aislados de liquidez”. Menuda vista. Normal que votase la subida de tipos. La pregunta es si su vista estaba bien, o no. Así de claro.
En fin, entendemos que en el 2007 se haya equivocado, que en el 2008 no se haya enterado de nada, y miremos que pasa en el 2009. En julio de 2009, el señor Páramo vuelve a la prensa afirmando, que quedan unos cuantos trimestres de crecimiento negativo, (vaya, en el trimestre que ha salido positivo), y que la bajada de tipos no había terminado. O sea que hace cuatro meses, el preclaro señor, afirmaba que a la eurozona le queda bastante de una crisis que no vio llegar, tal y como se desprende en sus declaraciones del 21 de octubre de 2008, (en medio del precipicio), en las que manifestaba: “Nuestro diagnóstico es que tendremos una moderación del crecimiento en la zona del euro, porque la persistencia de las tensiones en los mercados financieros está teniendo una incidencia sobre la economía real más negativa de lo previsto”.
Ahora el señor vuelve a hacer previsiones, diagnósticos y recomendaciones y la verdad es que yo comienzo a creer que el reto de nuestra sociedad es como sobrevivir a entregarle tanto poder a personas con esta capacidad probada.
Yo en particular, con todas estas declaraciones, (y muchas más que no he puesto, porque he sacado sólo de las primeras páginas de google y desde luego las más llamativas), ni se me plantearía seguir en el puesto. Simplemente dimitiría. Pero lo más triste es que nadie los ha despedido, cuando en realidad a cualquier trabajador le hubiesen aplicado las recetas de despido que tanto propugna. Pero desde luego, no es que hayan sido despedidos o no, el caso es que nadie ha puesto en duda su condición de deidad.
Porque lo que ya es de cachondeo es que no hayan acertado ni una, que no hayan visto venir una crisis financiera, (en la que tanto tendrán que decir), y que Vds. hayan sido parte más que activa en la generación y explosión del problema como para ahora salirse del cuadro y decir que el problema que se ha montado no va con ustedes.
Porque seamos claros, ustedes han usado y seguir usando las burbujas como política monetaria, instigándolas y financiándolas con el dinero de todos ((tal y como he expuesto en este post)
Lo peor de todo es que estas declaraciones de ahora son parte de la burbuja, encuadradas en aquello de nos estamos recuperando y de todas las tonterías que están soltando para salvar el sistema financiero. Lo suyo es completamente patético, porque usted sabe muy bien la diferencia entre Euribor y eonia, así como lo que esto muestra, y por cierto, sabe usted muy bien que por mucho que se empeñen en negarlo no vamos a etapas inflacionarias, sino que estamos en una época de deflación, lo cual explica porque los bancos contratan como si fuesen a bajar los tipos, a pesar de que hablen como si fuesen a subir. Esto es burbujas.
Es usted un impresentable completo. Y no encuentro motivo alguno para que yo le pague a usted. Salvo el hecho de que me lo quitan. Y ya está bien de que esto de la economía se aprende en dos tardes. En la tercera nos dicen que no todo es decir: “todo va bien”. y después viene una carrera en la que se aprenden varias cosas.
La esperanza que me queda es que una vez destrozado el sistema financiero, ya no tienen ustedes mucho poder para destrozar más. También que no es que sus declaraciones sirvan para mucho. ¡no he encontrado ningún acierto!. Téngalo en cuenta a la hora de soltar aquella ironía que tanto le gusta acerca de lo de la credibilidad.