¿Qué es el Sharpe Ratio?
El Sharpe Ratio o Índice de Sharpe se define como la relación existente entre el beneficio adicional de un fondo de inversión, medido como la diferencia entre la rentabilidad del fondo y la rentabilidad de un activo sin riesgo, y su volatilidad, medida como su desviación típica. Generalmente se toma como activo sin riesgo la rentabilidad de la deuda pública a corto plazo del área geográfica que más se asimile a los activos en los que invierte el fondo. Por ejemplo, para fondos europeos, sería el Euribor a 3 meses.
El ratio Sharpe expresa la prima de rentabilidad obtenida por cada unidad de riesgo soportado por el fondo.
¿Cómo se calcula el ratio de Sharpe?
El Sharpe Ratio fue desarrollado por el Premio Nobel William Forsyth Sharpe, de la Universidad de Stanford.
Como hemos visto, mide numéricamente la relación Rentabilidad / Volatilidad Histórica (desviación estándar) de un fondo de inversión.
¿Qué lecturas podemos extraer del valor numérico del sharpe? Estas son algunas de ellas:
- Cuanto mayor es el Sharpe Ratio, mejor es la rentabilidad del fondo en relación a la cantidad de riesgo que se ha tomado en la inversión.
- Si el ratio de Sharpe es negativo, indica un rendimiento inferior al de la rentabilidad sin riesgo.
- Todo ratio de Sharpe inferior a 1 supone que el rendimiento del activo es inferior al riesgo que estamos asumiendo al invertir en el mismo.
- Cuando la volatilidad del fondo es grande, asumimos más riesgo; mayor es el denominador de la ecuación y menor es el Sharpe Ratio, a no ser que el rendimiento del fondo consiga compensar esa mayor volatilidad.
¿Por qué es importante el ratio de Sharpe?
El Sharpe Ratio es una herramienta muy útil para el inversor, que le puede servir para:
1) Analizar si es adecuada la relación rentabilidad/riesgo de una inversión.
Podemos utilizar este ratio para mostrar hasta qué punto el retorno de una inversión compensa al inversor por la asunción de riesgo. Normalmente, los inversores suelen medir la calidad de un fondo simplemente mirando los datos de rentabilidad, pero casi nunca se tiene en cuenta el factor riesgo, que es tanto o más importante que la rentabilidad. Nos suele llamar la atención una rentabilidad elevada, pero rara vez nos paramos a pensar cuánto riesgo se asume para conseguirla.
Un fondo que invierte en mercados emergentes no es mejor que un fondo que invierte en renta variable europea sólo por el hecho de haber conseguido una rentabilidad superior en un periodo de tiempo determinado. Para juzgar la calidad de un fondo, además de la rentabilidad tendríamos que tener en cuenta el factor riesgo; obviamente, un fondo que invierte en mercados emergentes tiene más volatilidad, lo que en la práctica se traduce en la posibilidad de obtener mayores rentabilidades. Pero no deberíamos olvidar que, al ser su riesgo muy superior, también tenemos que asumir la probabilidad de sufrir mayores pérdidas.
Y precisamente esto es lo que mide el ratio de Sharpe: la relación entre ambos factores, rentabilidad y riesgo.
2) Comparar distintos fondos dentro de una misma categoría.
Si estamos dudando a la hora de invertir entre dos fondos de inversión, uno de los factores que podemos tener en cuenta es cuál de ellos presenta un mayor Sharpe Ratio. El fondo con Sharpe más alto será aquel que nos proporciona un mayor retorno para un mismo nivel de riesgo.
El Sharpe ratio, junto con otros como el Ratio de Treynor y la Alfa de Jensen, se utilizan con frecuencia para valorar el comportamiento de los activos de una cartera o para comparar la eficacia de distintos gestores de fondos de inversión.
Pongamos ahora un ejemplo para ilustrar este concepto, Tenemos dos fondos de inversión de renta variable europea, y vamos a analizar su Ratio de Sharpe para saber cuál de los dos nos conviene más.
El fondo A tiene una rentabilidad menor a la del fondo B, pero sin embargo tiene un mayor Sharpe Ratio. El motivo está claro: su volatilidad ha sido menor, es decir ha oscilado menos, ha tenido menos altibajos.
Aunque la rentabilidad final ha sido menor, podemos ver que mientras en el peor momento el Fondo B perdía un 15%, el Fondo A tan solo lo hacía en un 5%.
El Sharpe ratio nos sirve para comparar entre sí dos fondos o un grupo de fondos. Saber que un fondo tiene un Sharpe Ratio de 0,83 de poco nos sirve si no lo comparamos a la vez con otro fondo.
Así, el ratio de Sharpe es una variable que sirve para valorar la calidad de un fondo de inversión, comparándolo con los fondos de su mismo tipo. Teóricamente, no se deben comparar ratios Sharpe de fondos de distintas categorías aunque considerando que el nivel de volatilidad del fondo está comprendido en el ratio Sharpe, esta premisa es hasta cierto punto discutible.
Por último, indicar que aunque el Sharpe es un estadístico muy a tener en cuenta, es aconsejable complementarlo con otros antes de tomar una decisión de inversión.