El grupo industrial Tubacex, dedicado a la fabricación y venta de tubos sin soldadura de acero inoxidable, comunicó ayer a la CNMV, que había firmado acuerdos con doce entidades financieras por importe de 160 millones de euros. Estos acuerdos consisten en la ampliación de los vencimientos de las líneas de créditos de 12 a 36 meses por importe de 80 millones, y la refinanciación de los préstamos para inversiones a 5 años, con 2 de carencia, por un importe de 50 millones de euros. Dice la empresa que con esta operación incrementa la estabilidad financiera de la compañía y muestra la confianza de los bancos en ella.
A pesar de la situación actual del mercado, la empresa prevé para este año mejorar los resultados del ejercicio anterior gracias a la incorporación de nuevos productos, la recuperación del mercado de exportación en los tradicionales y a una mejora de los precios, pero así y todo no es capaz de amortizar parte de la deuda y por eso se limita a aplazar el pago, lo que seguro que no le saldrá gratis y veremos como se incrementan sus gastos financieros.
Viendo los resultados del primer semestre de la empresa, como ya comenté en un post anterior, tiene un endeudamiento del 108% de su patrimonio neto y seguramente acabará el año con una relación Deuda Neta/EBITDA de alrededor de 5,11 veces. Por lo tanto, quizás no sea tan buena noticia como parece o intentan que lo sea.
Como he comentado en otras ocasiones, desde el punto de vista financiero, Minsky clasifica a las empresas en tres grupos:
Empresas cubiertas: Son la empresas cuyo flujo de caja es suficiente para atender las necesidades propias del negocio, pagar los intereses de la deuda que tienen contraída, amortizar el principal de dicha deuda y retribuir al accionista.
Empresas especulativas: Son las empresas cuyo flujo de caja permite pagar los intereses de la deuda contraída pero no son capaces de amortizar el principal de la deuda, por lo que están constantemente refinanciándola.
Empresas Ponzi: Son las empresas cuyo flujo de caja no es ni siquiera suficiente para pagar los intereses de la deuda contraída. Estas son las empresas de las que hay que huir como de la peste, porque más pronto que tarde acaban viviendo su “momento Minsky” y quebrando.
Está claro a que apartado pertenece actualmente Tubacex. Minsky la clasificaría como una empresa especulativa y como sabemos, en tiempos de crisis, este tipo de empresas tienen mucho riesgo de terminar siendo empresas Ponzi, de las que hay que huir.
Saludos.
Nota: Para ver el indice de las empresas publicadas pinche aqui
