La actual empresa Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles, CAF, es el resultado de la evolución a lo largo de los años de la antigua Fabrica de Hierros San Martín fundada en 1860 en Beasaín y que adoptó su actual nombre en 1917. Su actividad es el diseño, fabricación, mantenimiento y suministro de equipos y componentes para sistemas ferroviarios. Su capacidad de producción incluye trenes de alta velocidad, locomotoras diesel y eléctricas, los trenes para la prestación de los servicios de media distancia, trenes del metro, tranvías y trenes ligeros, entre otros. Además, la compañía ofrece servicios de asistencia técnica, mantenimiento, gestión y financiación. Las instalaciones de la empresa comprenden ocho centros de producción ubicados en Beasain, Zaragoza, Irún, Elmira (EEUU), Linares, Castejón, Lérida y Suresnes (Francia), así como una red de plantas de mantenimiento establecido en España, Estados Unidos, México, Brasil, Argentina, Portugal y el Reino Unido.
En 1992 comenzó su expansión internacional, que poco a poco le ha permitido que el peso de su actividad exterior sea mayoritaria, de forma que en este primer semestre la exportación ha representado el 69 % del total facturado. Según cuenta la empresa, actualmente tiene una cartera de pedidos pendientes de ejecutar de 4.601 millones de euros, lo que representa una carga de trabajo equivalente a tres años.
Aproximadamente el 60 % de su capital está en manos de accionistas estables, pero entre ellos se encuentra la Caja de Ahorros de Guipuzcoa y San Sebastián que posee el 20 %. Bestinver tiene invertido en sus fondos de inversión algo más del 4,8 % de la empresa. Actualmente no tiene autocartera.
Desde el punto de vista del Balance hay que decir que en general se ajusta al patrón de las empresas contratistas, que con poco capital e inmovilizado material mueven un volumen importante de dinero. Llama la atención el peso que tiene en el mismo la suma de las existencias junto con los deudores comerciales, que casi suman el 50 % del total del mismo. Es algo que está resultando común en las empresas contratistas industriales y/o de infraestructuras, parece que se alargan los plazos de pago por parte de las propiedades. En concreto la partida de clientes representa el equivalente a la facturación de cinco meses, y lo más sorprendente es que según cuenta la empresa el 52 % de esta partida es obra ejecutada pendiente de certificar. También llama la atención la fortaleza de la tesorería y asimilados, pero no hay que llevarse a engaño, ya que la mayor parte corresponde a los anticipos a cuenta recibidos de los clientes. La solvencia es el 24,89 %, la liquidez normal y el endeudamiento si tenemos en cuenta los anticipos a cuenta llega al 97% de su patrimonio neto, por lo que es un poco elevada, lo que se acaba notando en la cuenta de pérdidas y ganancias como ya veremos más adelante. Su valor teórico contable es 111,17 euros.
En cuanto al flujo de efectivo de las actividades de explotación hay que decir que es positivo, pero está muy influenciado por los anticipos a cuenta que recibe, que la hacen presentar fuertes fluctuaciones en el capital circulante. Pero sin tener en cuenta esta circunstancia continua siendo positivo y suficiente para financiar las inversiones dejar flujo de caja libre para los accionistas.
Las ventas del primer semestre han sido superiores a las del primer semestre del año pasado y también que las del segundo semestre del mismo año, pero pese a tener a favor este semestre la variación de existencias, unos mayores costes de aprovisionamiento, de personal y otros gastos de explotación han hecho que el resultado de explotación, que llega a los 74,4 millones y es un 17, 4 % superior al del mismo semestre del año pasado, sea muy inferior a los 91,7 millones del segundo semestre del año pasado y que son resultado récord por ahora. Los gastos financieros (los intereses que paga por la deuda) restan un 22 % a este resultado de explotación y este semestre ha incrementado la deuda en aproximadamente 2,5 millones más, que aunque no es mucho va sumando más intereses y esto se notará cuando se reduzca la facturación por menores contrataciones.
Como paga pocos impuestos (este semestre no ha llegado al 10 %) el beneficio por acción obtenido en el semestre es de 16,98 euros y los analistas esperan que termine el año con un bpa de 40,39 euros, pero me da la impresión que no se van a alcanzar. Como inversión a largo plazo hay que quitar los resultados extraordinarios y considerar una tasa impositiva más acorde con lo normal, y así resulta que el bpa de este semestre se queda en 12,66 euros. Además hay que tener en cuenta que estos resultados son propios de una época favorable para la empresa en la que se han realizado muchas inversiones como consecuencia del estimulo fiscal que hemos vivido que la favorecen, por lo que parece razonable aplicar un coeficiente de seguridad del 20 % en previsión de futuros beneficios menores. Con todo esto queda que el bpa anual a considerar como adecuado para una inversión a largo plazo es 20,26 euros.
Así pues considerando este bpa de 20,26 euros que representa un margen de seguridad del 20 % sobre los resultados esperados para todo el año 2011, y aplicando un PER de 12,50 veces el bpa, o lo que es lo mismo una rentabilidad del 8 % sobre la inversión, se tienen que:
Precio máximo de compra: 253,25 euros/acción.
Lógicamente esto no es una recomendación de compra, simplemente es una interpretación personal de la información que la empresa comunica a la C.N.M.V. y nada impide que se pueda comprar más barata.
Teniendo en cuenta que actualmente cotiza a 360 euros parece difícil verla cotizar en el corto plazo al precio de compra propuesto, todo depende de que pueda mantener el ritmo de contratación y de beneficios de estos últimos años, lo que personalmente me parece complicado. Un vistazo a un gráfico a largo plazo invita a ser prudente, sobre todo por lo poco liquida que es la acción, y esperarla entorno a los 200 euros.
Saludos.
Nota: Para ver el indice de las empresas publicadas pinche aqui