La regla número en temas de dinero debería ser: nunca comprar productos que no entendemos. No importa qué tan amable sea la chica del banco, ese youtuber joven que te habla de CFDs o tu asesor financiero al venderte fondos y certificados.
Los derivados financieros o instrumentos derivados comprenden varios de esos productos que deberíamos entender antes de comprar. En realidad su funcionamiento es mucho más sencillo de lo que se cree.
Su nombre ya nos da un indicio: se trata de productos financieros cuyo valor "deriva" del precio de otro activo (denominado activo subyacente). Por ejemplo, un futuro del oro depende, obviamente, del precio del oro. Prácticamente pueden crearse instrumentos derivados para cualquier tipo de activo subyacente. Los hay para índices bursátiles, acciones, materias primas, tipos de interés, etc.
Con un ejemplo será más fácil entender cómo funcionan y cuáles son sus posibles usos. Espero les guste este video, hecho con mucho esfuerzo, de mi canal Bolsa para Principiantes: