Al emprender una idea de negocio es frecuente no tener los conocimientos necesarios en el ámbito legal, lo que le suma importancia a contar con un buen profesional en el tema, dentro o fuera del equipo, que sepa manejar los casos particulares a los que se enfrenta nuestra empresa.
Los errores más frecuentes ocurren cuando hay que conseguir financiación, cuando hay que dejar claro quién es quién en la empresa, con el funcionamiento del registro de la marca, con el uso de los datos de los usuarios, con la tributación de las ventas internacionales y con los contratos con agentes externos y clientes.
Una vez se ha estudiado la idea de negocio y se decide llevar a cabo, hay que ir tomando decisiones importantes que afectarán a la empresa y a sus socios antes o después.
1. Errores de los emprendedores en la financiación:
Lo primero que necesitamos para llevar una idea a cabo, es dinero. No es frecuente contar al principio con la totalidad del dinero necesario para empezar, por lo que hay que obtener más capital de otras fuentes para financiarse. Se suele pedir ayuda a la familia y/o amigos más cercanos, pero si necesitamos cantidades mayores, podemos recurrir a ayudas y subvencines o a los bancos. Lo engorroso de estas últimas opciones es que no lo ponen fácil, y en además en el caso de los bancos ya no estás tan tranquilo por los plazos de devoluciones y los intereses del préstamo.
Otra posibilidad, más adecuada y menos conocida, es que las personas que estén en paro y cumplan determinados requisitos, pueden optar por la opción de capitalizar el desempleo cuando vayan a pedir financiación a alguna entidad bancaria. Esta operación consiste en cobrar de golpe todo o parte (existen varias modalidades) del importe pendiente de recibir del paro, para ayudarnos a emprender nuestro propio negocio.
2. Errores de los emprendedores en las relaciones con los socios:
Para emprender un negocio hay que ponerle muchas ganas, tiempo y trabajo. Requiere de mucho esfuerzo y paciencia, pues empezar no es fácil, y surgirán obstáculos a medida que avancemos. Es habitual que nuestros compañeros de proyecto sean (o acaben siendo) familiares o amigos en los que depositamos nuestra confianza.
Tener buenas relaciones es importante, pero también lo es dejar claro desde el principio el papel de cada persona en la empresa, y no solamente acordado de palabra, porque con el tiempo surgen los problemas y las discrepancias de opinión y de planes futuros. Si no está escrito bien detallado y firmado el funcionamiento de la empresa, su propiedad, valores, jerarquía,... a largo plazo pueden llegar a haber problemas muy serios debido a las confrontaciones entre los socios por sus intereses individuales.
3. Errores de los emprendedores con las marcas:
En muchas ocasiones, se quiere empezar a hacer todo de golpe y se cometen bastantes errores. A cada cosa hay que dedicarle su tiempo y debemos ir paso a paso sin saltarnos escalones. Primero hay que arreglar bien todo el papeleo para que la actividad y todos sus puntos estén en orden.
Al principio, evidentemente le damos mucha importancia a dar a conocer la marca y en que la gente sepa a qué se dedica. Pues bien, antes de lanzarnos a invertir en la imagen de la empresa y la publicidad, con los gastos que eso conlleva, ¡no podemos olvidarnos de registrar la marca! Es una gestión que se puede pasar por alto y que luego puede suponernos problemas legales, bien sea porque le estemos copiando a otra empresa, o porque más adelante se copien de nosotros y judicialmente no tengamos la razón por no habernos registrado cuando tocaba. Además del gasto y trabajo inútil que hemos invertido en publicitarnos.
4. Errores de los emprendedores con el uso de datos:
Conforme se incrementa el número de clientes o usuarios de nuestro negocio, ampliamos una base de datos cada vez más valiosa. Esa información es muy útil para las empresas, y podemos estar tentados de utilizarlos de manera incorrecta, lo que nos puede llevar a afrontar grandes sanciones. Por tanto, tanto si estamos emprendiendo un negocio como si ya llevamos un tiempo, debemos conocer bien la normativa al respecto: la Ley Orgánica de Protección de Datos de Carácter Personal (LOPD).
5. Errores de los emprendedores con la fiscalidad internacional:
Los negocios que emprendemos pueden llegar a operar en el extranjero al desarrollarse en el futuro, o pueden hacerlo desde el principio. Antes de iniciarse en la aventura, hay que conocer el régimen fiscal a aplicar en cada lugar en el que operamos, los convenios que existen con nuestro país, que impuestos debemos pagar y dónde, que modelos hay que presentar, qué documentos hay que formalizar, que está y que no está permitido, qué pautas se siguen para operar, si sale o no rentable, dónde es mejor situar el domicilio fiscal de la empresa,...
No tenerlo claro puede llevar a confusiones, líos, y posiblemente sanciones por no cumplir plazos, requisitos y obligaciones.
6. Errores de los emprendedores con los contratos con proveedores y clientes:
Cuando los emprendedores inician su negocio, se centran mucho en el trabajo inicial y en el día a día para arrancar. Es algo totalmente necesario, pero no por ello hay que olvidarse de que para funcionar, no sólamente se trata de nuestra empresa, si no también del entorno que le rodea en el que incluímos los agentes externos.
Los proveedores y clientes puede parecer que en un principio vayan a estar ahí siempre, pero lo cierto es que con el tiempo buscan otras opciones, hacen más presión pagar menos o cobrar más, pueden ganar poder de negociación según qué casos y exigir mejores condiciones para ellos,... Por lo que debemos dejar bien atado desde el principio la relación que habrá, detallando las obligaciones y los derechos de cada parte, y la duración del contrato para no encontrarnos con sustos más adelante.
Si tú también eres emprendedor y tienes más dudas al empezar con tu negocio, puedes dejar tus dudas en el Foro de Empresas de Rankia o puede visitar nuestra web www.ciroconsulting.es en el servicio de asesoria para emprendedores
