¿Quieres saber cómo crear una empresa en España? ¿Cuáles son los requisitos y trámites necesarios para abrirla? En este artículo te explicamos todos los pasos que debes dar para montar y registrar una empresa desde cero. Aunque es un proceso que se debe abordar de manera planificada e informada, es más fácil de lo que se piensa.
Para comprender cómo abrir y registrar una empresa en España, es necesario conocer las condiciones que se deben cumplir para ello y algunas recomendaciones que te ayudarán en el proceso.
Para comprender cómo abrir y registrar una empresa en España, es necesario conocer las condiciones que se deben cumplir para ello y algunas recomendaciones que te ayudarán en el proceso.
Requisitos para abrir una empresa en España
Los requisitos para crear una empresa en España varían en función de varios aspectos, principalmente el tamaño de la misma, su ubicación o domicilio fiscal y la actividad que se vaya a realizar.
Más allá de la burocracia y los pasos administrativos, que veremos más adelante, lo que se exige para registrar una empresa en España depende de la forma jurídica elegida. A continuación recopilamos los tipos de sociedad que puedes se pueden crear y el capital social mínimo que se requiere para su constitución.
- Autónomos: No necesitan capital mínimo y tienen responsabilidad ilimitada a la hora de constituirse como empresa.
- Emprendedores de responsabilidad limitada: Tienen responsabilidad limitada al capital aportado.
- Sociedad Limitada: Es de carácter mercantil y los socios responden personalmente de las deudas sociales con un capital igual o superior a 3.000 euros. Tras la entrada en vigor de la Ley de creación y crecimiento de empresas, para constituir una empresa bajo esta forma jurídica solo se necesita una aportación de 1 euro. Sus socios tienen responsabilidad limitada.
- Sociedad Limitada de Formación Sucesiva: Sigue el mismo régimen que la Sociedad Limitada, excepto en ciertas obligaciones que tienen como objeto garantizar la responsabilidad frente a terceros. Los socios tienen responsabilidad limitada, pero se requiere un capital de 3.000 euros para constituirla.
- Sociedad Limitada Laboral: La mayor parte de su capital social es propiedad de los propios trabajadores. Para su constitución se necesita un capital que supere los 3.000 euros. Su responsabilidad es limitada.
- Comunidad de bienes: En este tipo de organización, es necesario un contrato privado que especifique la actividad del negocio, las aportaciones (en dinero o en especie) y el porcentaje de participación de cada socio. No se requiere capital mínimo para abrir este tipo de empresa.
- Cooperativa: Ha de estar integrada por un mínimo de tres socios en régimen de libre adhesión, y debe tener una estructura democrática. El capital se determina en los estatutos, aunque algunas comunidades autónomas exigen aportar un capital igual o superior a 1.800 euros, de los cuales al menos el 25% deben desembolsarse en el momento de la constitución.
- Sociedad anónima: Su capital se divide en acciones y está formado por las aportaciones de los socios. Estos no responden personalmente de las deudas sociales que contraiga la empresa. Para constituir una empresa bajo la forma de sociedad anónima se necesita un capital mínimo de 60.000 euros.
Pasos para crear una empresa en España
Ahora que ya sabes los requisitos económicos que debes cumplir para montar una empresa en España, es el momento de exponer las gestiones y pasos necesarios para abrir tu empresa.
1. Elegir la forma jurídica para registrar la empresa
Para constituir una empresa en España se puede optar por varias modalidades a nivel jurídico. Tal y como se recoge en la web de la Administración del Estado, las más habituales son la sociedad anónima y la sociedad de responsabilidad limitada. Sin embargo, también es posible abrir una empresa como persona física dándote de alta como autónomo.
Tipos de empresas y requisitos para crearlas
Estas son las formas jurídicas más frecuentes a la hora de crear y registrar una empresa:
Este paso es fundamental porque la forma jurídica influye en muchos aspectos de la empresa, como por ejemplo los tipos de actividades que podrán desarrollarse y sectores en los que se puede operar, el número de socios y su responsabilidad, las necesidades económicas o las obligaciones fiscales.
Sociedad anónima
Debe tener al menos un socio y el capital mínimo para constituirla es de 60.000 euros, el cual debe ser aportado por los socios. Las siglas SA se deben incluir obligatoriamente en el nombre legal de la empresa. Además, las sociedades anónimas deben llevar y gestionar un libro de inventario, unas cuentas anuales y un libro de actas en el que se recogen los acuerdos formalizados en las juntas generales.
Sociedad de responsabilidad limitada.
Al igual que las SA, las SL pueden crearse con un único socio, pero a diferencia de las sociedades anónimas, solo se necesita un euro en capital social para constituir la empresa. El capital de una sociedad limitada, formado por las aportaciones de los socios, se divide en participaciones indivisibles y acumulables. También está obligada a mantener un libro de inventario y presentar cuentas anuales.
Emprendedor de responsabilidad limitada.
Como alternativa a la sociedad limitada, se puede abrir una empresa como emprendedor de responsabilidad limitada. Esta alternativa consiste en una persona física que lleva a cabo una actividad económica y cuya responsabilidad es ilimitada ante terceros, aunque determinados bienes como la vivienda están protegidos.
Empresario individual (autónomo).
Sin no se dispone del capital mínimo o las condiciones para abrir una empresa bajo las formas anteriores, también cabe la posibilidad de montar un negocio siendo autónomo.
Este paso es fundamental porque la forma jurídica influye en muchos aspectos de la empresa, como por ejemplo los tipos de actividades que podrán desarrollarse y sectores en los que se puede operar, el número de socios y su responsabilidad, las necesidades económicas o las obligaciones fiscales.
Por ejemplo, en la sociedad de responsabilidad limitada, la forma más habitual para los pequeños empresarios, la responsabilidad del empresario queda limitada al capital aportado, mientras que como autónomo la responsabilidad será ilimitada y se debe responder con el patrimonio personal de las deudas generadas en la actividad.
2. Obtención de certificado en el Registro Mercantil
Tras la elección de la forma jurídica, es necesario obtener una certificación negativa por parte del Registro Mercantil. Este documento sirve para acreditar que no existe ninguna otra sociedad con el mismo nombre que la que se pretende constituir. Este certificado es obligatorio para poder formalizar la escritura pública de constitución de la empresa.
Tal y como establece el artículo 413 del Reglamento del Registro Mercantil, "no podrá autorizarse escritura de constitución de sociedades y demás entidades inscribibles o de modificación de denominación, sin que se presente al Notario la certificación que acredite que no figura registrada la denominación elegida”.
Tal y como establece el artículo 413 del Reglamento del Registro Mercantil, "no podrá autorizarse escritura de constitución de sociedades y demás entidades inscribibles o de modificación de denominación, sin que se presente al Notario la certificación que acredite que no figura registrada la denominación elegida”.
Debes tener en cuenta...
Que el nombre queda reservado durante 6 meses desde que se expide la certificación. Una vez transcurrido este plazo, si no se ha inscrito la sociedad en el Registro Mercantil, puedes perderlo, ya que el nombre queda libre de nuevo a disposición de otras empresas de nueva constitución que quieran adoptarlo.
3. Abrir una cuenta bancaria
Tal y como establece la Cámara de Comercio, para constituir una empresa en España es necesario contar con una cuenta bancaria destinada única y exclusivamente a la empresa, en la cual se depositará el capital social. Para poder abrir la empresa se requerirá un certificado que verifique el depósito en el banco, así como los datos de los socios de la empresa y las aportaciones realizadas.
El capital social de una empresa es el total de lo aportado por los socios a la entidad y puede consistir en dinero, bienes o derechos patrimoniales.
Tener una buena cuenta de empresa es clave para poder crear una empresa con garantías, ya que de ello depende el poder llevar una contabilidad efectiva y una adecuada organización financiera.
Actualmente, los bancos ofrecen diversas opciones de cuentas orientadas a empresas o autónomos. Si es tu primera vez como emprendedor, lo ideal es que priorices la comodidad y la flexibilidad. Elige una cuenta fácil de abrir y gestionar, que no tenga muchas comisiones y en una entidad sólida.
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4. Redacción de los estatutos sociales
Los estatutos sociales son otro de los requisitos esenciales y pasos para crear una empresa en España. En ellos se debe incluir la denominación de la empresa, el capital con el que se inicia la actividad y el domicilio social de la compañía.
También es en los estatutos sociales donde se fijan los órganos administrativos encargados de gestionar la empresa, así como el reparto de dividendos y el proceso a seguir en caso de que la empresa se disuelva.
También es en los estatutos sociales donde se fijan los órganos administrativos encargados de gestionar la empresa, así como el reparto de dividendos y el proceso a seguir en caso de que la empresa se disuelva.
5. Escritura de la empresa ante el notario
Una vez tenemos el certificado bancario y también una certificación negativa del Registro Mercantil, en la que se indica que la denominación de la empresa es única y no está previamente registrada, deberemos acudir al notario, aportando los estatutos sociales y los documentos de identidad de los socios de la empresa. Estos documentos son necesarios para realizar la escritura de la empresa ante el notario.
Una vez solicitada la certificación negativa, debes crear la escritura pública. Este documento ha de estar firmado por todos los socios que conforman la sociedad, y se realiza obligatoriamente ante notario.
Una vez solicitada la certificación negativa, debes crear la escritura pública. Este documento ha de estar firmado por todos los socios que conforman la sociedad, y se realiza obligatoriamente ante notario.
El notario también puede ayudarte a redactar la escritura de constitución de la sociedad, en la que tendrás que detallar todos los aspectos fundamentales de su funcionamiento, desde su objeto hasta cómo se tomarán los acuerdos o la manera en que se transmitirán las participaciones. Así evitarás cualquier conflicto de intereses entre los socios en el futuro.
6. Obtener el NIF provisional
El siguiente paso en el proceso de registro o constitución de una empresa es obtener un NIF provisional, el cual funciona como identificación fiscal de la empresa y es necesario para registrar la empresa ante el Registro Mercantil.
El NIF es estrictamente necesario para poder realizar actividades mercantiles, ya que sin él no puedes emitir ni recibir facturas.
Este NIF se obtiene dando de alta la empresa en Hacienda. Para ello, hay que registrarla el Impuesto de Actividades Económicas, a través del modelo 036.
Más en concreto, una vez obtenida la escritura de constitución, esta debe presentarse ante la Agencia Tributaria junto a una copia de los estatutos sociales y del modelo 036 debidamente cumplimentado.
El NIF es estrictamente necesario para poder realizar actividades mercantiles, ya que sin él no puedes emitir ni recibir facturas.
Este NIF se obtiene dando de alta la empresa en Hacienda. Para ello, hay que registrarla el Impuesto de Actividades Económicas, a través del modelo 036.
Más en concreto, una vez obtenida la escritura de constitución, esta debe presentarse ante la Agencia Tributaria junto a una copia de los estatutos sociales y del modelo 036 debidamente cumplimentado.
Este trámite debe realizarse durante el mes siguiente a la fecha de constitución de la empresa.
7. Constituir la empresa en el Registro Mercantil
Con el NIF provisional en regla, es el momento de registrar la empresa en el Registro Mercantil para conseguir competencia jurídica plena. Este procedimiento se realiza en el registro de la provincia en la que la nueva empresa tenga su domicilio social.
Este trámite debe realizarse en el transcurso de un mes desde la obtención de la escritura pública. Para garantizar la protección de la marca de tu empresa, también se deberá dar de alta ante el registro de patentes y marcas.
Este trámite debe realizarse en el transcurso de un mes desde la obtención de la escritura pública. Para garantizar la protección de la marca de tu empresa, también se deberá dar de alta ante el registro de patentes y marcas.
La solicitud de inscripción en el Registro Mercantil debe contener los siguientes documentos adjuntos:
- El NIF.
- La escritura pública.
- El modelo 600, que sirve para tramitar la liquidación del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales.
- El certificado de sociedad laboral, en caso de que la sociedad se haya inscrito como tal.
Los socios son quienes deben actuar como firmantes en la tramitación de la inscripción ante el Registro Mercantil.
Por su parte, los emprendedores de responsabilidad limitada deben presentar la certificación notarial o una solicitud firmada con la firma electrónica reconocida del empresario, el registro en el censo de empresarios y profesionales, así como el Modelo de Liquidación del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales.
8. Conseguir el NIF definitivo
Por último, cuando se hayan realizado todos estos pasos, es el momento de solicitar el NIF definitivo a la Agencia Tributaria. Para ello, será necesario presentar el modelo 036, con la casilla 120 marcada. Además, se deberá remitir una copia de la escritura pública, el certificado de inscripción en el Registro Mercantil y una fotocopia del NIF de la persona que firme la declaración censal.
Una vez constituida la sociedad y cuando de disponga del NIF definitivo, estarás preparado a legalmente para iniciar tu actividad, siempre y cuando cumplas con el resto de requisitos administrativos.
Recomendaciones para registrar una empresa
¿Cómo abrir una empresa en España de forma efectiva y con garantías? Hay ciertas prácticas o medidas que puedes tomar para facilitar, agilizar y mejorar el proceso de creación de tu empresa. Algunas de ellas son las siguientes:
Obtén un Certificado Electrónico
A la hora de realizar todos los trámites, te recomendamos que obtengas un certificado electrónico para que puedas firmar todos tus documentos telemáticamente.
El certificado digital es esencial para realizar muchos trámites de forma online, como inscripciones, declaraciones fiscales y gestiones con la administración. Además, permite evitar desplazamientos físicos y agiliza procesos, y ofrece mayor seguridad jurídica al garantizar la autenticidad y seguridad de las transacciones electrónicas.
El certificado digital es esencial para realizar muchos trámites de forma online, como inscripciones, declaraciones fiscales y gestiones con la administración. Además, permite evitar desplazamientos físicos y agiliza procesos, y ofrece mayor seguridad jurídica al garantizar la autenticidad y seguridad de las transacciones electrónicas.
Asegúrate de tener una cuenta bancaria profesional
Abre una cuenta diseñada específicamente para empresas, ya que esto ayuda a mantener claras las finanzas y llevar una contabilidad más profesional. De hecho, como hemos visto, algunas formas jurídicas requieren un depósito de capital social en una cuenta bancaria.
Debes asegurarte de contar con una cuenta bancaria de empresa que se ajuste a las necesidades y obligaciones que conlleva tu actividad.
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Debes asegurarte de contar con una cuenta bancaria de empresa que se ajuste a las necesidades y obligaciones que conlleva tu actividad.
Cuenta Business Revolut
- Tarjetas corporativas inteligentes
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- Realiza y acepta pagos, todo en un mismo sitio
Contrata un asesor fiscal o legal
Un asesor o una consultoría puede ayudarte a elegir la mejor forma jurídica para tu empresa, como autónomo, sociedad limitada, cooperativa, etc. Además, te permitirá cumplir la normativa al detalle, ya que estos profesionales conocen en profundidad la legislación relativa a la constitución y administración de empresas.
De esta manera, puedes asegurarte de que los estatutos, contratos y declaraciones estén correctamente redactados y cumplan las leyes vigentes.
De esta manera, puedes asegurarte de que los estatutos, contratos y declaraciones estén correctamente redactados y cumplan las leyes vigentes.
Registra la empresa en un domicilio adecuado
Es esencial elegir un domicilio fiscal y social válido donde puedas recibir las notificaciones oficiales de la administración. Si no tienes un local propio, puedes optar por un espacio de coworking o un domicilio virtual reconocido. Además, la localización de tu empresa es una decisión estratégica que puede influir en el negocio.
Adopta la tecnología necesaria
Además del certificado digital, puedes necesitar un sistema de firma electrónica avanzada para ciertos trámites específicos. Las herramientas y softwares de gestión son imprescindibles hoy en día para llevar a cabo las tareas administrativas de facturación, declaración tributaria y gestión laboral, entre otras funciones. La tecnología es clave para gestionar documentos y procesos de forma segura y organizada.
Consulta los incentivos y ayudas
Infórmate sobre ayudas y subvenciones de ámbito local, nacional o internacional para nuevas empresas, lo cual puede impulsar tu negocio en los primeros momentos de actividad. Además, algunas formas jurídicas y actividades empresariales tienen derechos a ciertos incentivos o beneficios fiscales.
Planifica el cumplimiento continuo
Asegúrate de que tu empresa cumpla con declaraciones de impuestos periódicas (IVA, IRPF, etc.). Las renovaciones de permisos también son importantes, ya que algunas licencias o registros tienen plazos de vigencia.
Estas acciones no solo facilitan el registro inicial de tu empresa, sino que también garantizan que esté preparada para operar sin contratiempos legales o administrativos. Si te preguntas cómo montar una empresa en España, esperamos haberte ayudado a resolver algunas de las dudas más frecuentes.