El año 2015 no fue bueno para la bolsa española y 2016 tampoco lo está siendo. Sin embargo, es precisamente cuando los mercados pasan por periodos de caídas y volatilidad, cuando la gestión activa basada en el value investing puede encontrar oportunidades y generar valor para los partícipes.
Como seguramente sepa, en 2015 el Ibex 35 cayó algo más de un 7%. Sin embargo, en ese mismo periodo, Metavalor, nuestro fondo de renta variable española, se revalorizó un 17,1%. De igual forma, en lo que llevamos de 2016 el Ibex 35 ha caído un -13,6% y el IGBM un -13,9%, mientras que Metavalor lleva una rentabilidad del -3,4%.
No cabe duda, y siempre lo remarcamos, de que los resultados a corto plazo no son significativos. Sin embargo, la gestión de las diferentes situaciones de corto plazo influyen de manera importante en los resultados de largo plazo.
“ 2015 podría ser un punto de inflexión que inicie un periodo futuro de mayor volatilidad”
En su carta a los partícipes de enero de 2016, nuestros gestores explicaban que las subidas de los años anteriores en Bolsa, en parte alentadas por las políticas monetarias expansivas, podrían dar lugar a un incremento de la volatilidad en el futuro:
“El problema de esta subida continua y de escasa volatilidad ha sido triple. Por un lado, en términos generales, las valoraciones bursátiles de las economías que han implementado el QE se han situado en niveles relativamente altos […] (Por otra parte) una burbuja de comportamiento cortoplacista en la que los gestores de las compañías cotizadas están utilizando la financiación barata para aumentar los programas de retribución al accionista, mediante incrementos de dividendos y especialmente a través de programas de recompra de acciones propias […] Por último, posiblemente lo más preocupante, la comunidad inversora ha generado una dependencia absoluta y una fe ilimitada en la omnipresencia y control de la economía y mercados financieros por parte de los bancos centrales. Si cada corrección bursátil tiene una respuesta por parte de los bancos centrales, los inversores acaban por creer que, primero, los bancos centrales actuarán siempre así y, segundo, que los mercados no pueden tener fuertes correcciones”.
En aquellos momentos no éramos capaces de encontrar empresas cotizadas en España con un potencial de revalorización suficiente, por lo que decidimos ir vendiendo nuestras posiciones en las empresas que iban alcanzando su valor teórico y mantenernos a la espera. Por este motivo, el fondo Metavalor terminó el año 2015 con una liquidez del 12,8% y a principios de 2016 llegó a situarse cerca del 20%. Aunque desde Metagestión siempre hacemos hincapié en la imposibilidad de predecir los mercados, y de la irracionalidad de estos a corto plazo, en esta misma carta los gestores explicaban su visión de la siguiente forma:
“Sin embargo, 2015 podría ser un punto de inflexión que inicie un periodo futuro de mayor volatilidad”.
“La elevada volatilidad del mercado ha generado importantes oportunidades de inversión”
Durante el mes de febrero el miedo se apoderó de los mercados, y nuestro fondo cayó con ellos. A pesar de que la liquidez fuera elevada, el comportamiento de Metavalor en ese periodo fue similar al del selectivo español, debido en parte, a que el margen de seguridad de las empresas en cartera se había reducido. En cualquier caso, tener tanta liquidez disponible nos permitió aprovechar la volatilidad y las bajadas. En esos momentos muchas empresas de calidad caían a precios muy atractivos, lo que nos permitió encontrar inversiones interesantes con un alto potencial de revalorización. Tanto es así que, en determinados momentos, llegamos a situar la liquidez rozando el 1%, siendo este porcentaje el mínimo legal. En el comentario del primer trimestre de 2016, los gestores lo explicaban de esta forma:
“Esta liquidez ha oscilado de manera importante durante el trimestre, situándose incluso cerca del 1% en determinados momentos del periodo. La elevada volatilidad del mercado ha generado importantes oportunidades de inversión (y desinversión) que hemos ido aprovechando.”
En las últimas fechas, la incertidumbre se ha apoderado de los mercados de nuevo. Sin embargo, Metavalor ha sido capaz de hacerlo mucho mejor que el Ibex 35. La cartera, que en gran parte fue creada en las caídas de febrero de 2016, cuenta a día de hoy con un potencial de más del 65% a 3 años, comparado con el 52% de 31 de diciembre de 2015. De esta manera, incluso aunque la Bolsa caiga con fuerza, nos encontramos con que Metavalor ha sufrido correcciones mucho menos acusadas.
Por otra parte, al igual que hicimos en el mes de febrero, en estos momentos estamos aprovechando las fuertes caídas para aumentar nuestras posiciones en compañías que ya tenemos en cartera que, en nuestra opinión, cotizan con un gran descuento sobre su valor teórico.
Es precisamente en las caídas de los mercados cuando los gestores crean la base de lo que será la rentabilidad futura de los fondos. Su gestión de la liquidez y el trabajo previo de valoración de empresas les permite estar preparados para aprovechar las caídas, y generar valor a los partícipes a largo plazo. Esta creación de valor puede verse en el largo plazo, y en el caso de Metavalor, cuanto más amplio es el periodo estudiado, mayor es la diferencia de rentabilidad a favor del fondo con respecto al Ibex35 y al IGBM, tanto con dividendos, como sin ellos.
Si quiere más información sobre Metavalor, o cualquiera de nuestros fondos, no dude en contactar con nosotros.