Las incógnitas en los mercados emergentes continúan siendo el principal dolor de cabeza de los inversores y hoy el Banco Central de la República de Turquía (BCRT) ha convocado una reunión de emergencia, en la cual hay muchas posibilidades de que determinen elevar considerablemente los tipos de interés para frenar la caída de la lira turca. Independientemente de los problemas sociopolíticos de países como Argentina, Brasil o Turquía, la bajada de expectativas de crecimiento en China y la reducción del plan de estímulos monetarios por parte de la Reserva Federal Americana están golpeando con fuerza a las economías emergentes y han incrementado la aversión al riesgo.
El Aussie (AUD)
En este sentido, el
dólar australiano, que
está muy ligado a las commodities (sobre todo al oro) y a las
exportaciones con China, ha perdido bastante fuelle con la mayoría de divisas de los
países del G-10. En las últimas semanas se ha depreciado bastante en relación a divisas como el
euro, la
libra o el
dólar. Todo parece indicar un
cambio de tendencia y más si atendemos a que el
oro parece que
no tiene fuerzas suficientes para romper ninguna resistencia relevante y su inercia es también a la baja.
China es uno de los
principales socios comerciales de Australia, con lo que el
dólar australiano va muy ligado a los datos macroeconómicos del gigante asiático, además no hemos de olvidar que
Australia es uno de los principales
exportadores del mundo de oro, y que las
materias primas representan el 60% de sus exportaciones. Por otro lado sabemos que
China está acumulando cada vez más
oro físico y que, por lo que parece no tiene intenció de dejar de hacerlo. Así que los traders interesados en la
divisa australiana han de tener en cuenta la
evolución de la economía china y la del rey de los metales,
el oro.