Reguladores que no regularon; supervisores que no controlaron; bancos que abandonaron su tradicional conservadurismo y se embarcaron en peligrosas aventuras; especuladores que no encontraron ningún freno a su desmesurado apetito por el riesgo y, sobre todo, Gobiernos que permitieron que todo eso pasara hipnotizados por las ventajas de la autorregulación financiera y las bondades del mercado libre. El presidente estadounidense Barack Obama dejó ayer claro que la mayor reforma financiera desde la Gran Depresión persigue que todo eso -que salió a la superficie hace casi dos años, en agosto de 2007, con el estallido de la crisis de las hipotecas basura- no vuelva a repetirse.Fuente: Objetivo, una banca más aburrida El Pais
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Este artículo aparecido en el diario El País nos hace recordar que incluso bancos tan aburridos como el B.Popular de los hermanos Valls ha sucumbido a los tiempos modernos y a la codicia. Con ellos, la gestión tan discutible llevada a cabo en los últimos tiempos no hubiera tenido lugar.
Se dan prestamos ninja, se dan préstamos a promotores que prometen convertir secarrales en oasis, se colocan tarjetas para que el gasto supere los ingresos, se cambian fondos de inversión a depósitos cuando la bolsa está baja y viceversa, se venden más seguros que vidas tiene un gato, se cobran comisiones por mantener cuentas y saldos que sirven para hacer su negocio, se refinancian operaciones a tipos elevados difíciles de devolver ,se venden coberturas de tipos de interés cuando estos están altos ,se compran empresas en bolsa en máximo de ciclo comprometiendo los recursos propios… etc y ¿esto cómo y por qué?
Por la codicia y las miras cortas de los altos consejeros y directivos que piensan más en sí mismo que en los clientes a los que hay que estrujar, metiéndoles miedo en el cuerpo y sacándoles todo el partido posible antes que ayudarles a vivir mejor. Sus altos bonus y sus numerosas dietas , dependen curiosamente de lo que extraigan de ellos. Por parte de los clientes , por no trabajarse sus decisiones y no buscar asesoramiento independiente. Los intereses de la empresa y de sus clientes son comunes. El que no lo entienda tiene las de perder. Bendita sea la banca aburrida cuyos resultados se hacen día a día y cliente a cliente.
En el Reino Unido el 70% del producto financiero es distribuido por independientes, en Francia un 8% y en España un 4%. O cambian las entidades financieras o serán cambiadas por los clientes. El que se de cuente y lo haga primero ganará.