Para empezar es un banco, de orígen holandés y con 28 años de historia, que sólo trabaja con y para proyectos que cumplan con los criterios de favorecer:
- Naturaleza y el medio ambiente.
- Sector social.
- Cultura.
- Que identifique sectores sostenibles en los que apoyar el desarrollo y la consolidación de empresas y proyectos innovadores, estableciendo criterios positivos de financiación.
- Que seleccione iniciativas concretas beneficiosas para la sociedad, en las que el valor añadido de tipo social, medioambiental y cultural sea tan importante como el financiero y comercial.
- Que se asegure de que cada proyecto, seleccionado desde una aproximación positiva, sea contrastado con los criterios de exclusión del banco.
- Que se trate de actividades, proyectos o activos claramente identificados dentro de cada organización.
Este fenómeno hace que el banco sea una mera hucha donde depositar dinero para que éste sea prestado bajo los criterios rigurosos y preestablecidos del banco, dando así la seguridad a sus clientes de que su dinero está sirviendo para financiar proyectos sostenibles. La banca de inversión no tiene cabida en esta entidad, evidentemente. Pero lo que realmente llama la atención es que ni siquiera tiene mucho que ver con la banca comercial.
En cuanto a operaciones hipotecarias, nos comentaron que hasta hace poco sólo relizaban créditos hipotecarios para la adquisición de inmuebles que hubieran sido construidos bajo determinados criterios ecológicos y de sostenibilidad. Posteriormente, esa práctica la han venido relajando en favor de cualquier inmueble para aquellos que ya fueran clientes de Triodos con anterioridad. Y exigiendo que una pequeña parte de esa financiación se utilice para la realización de un estudio que permita alguna mejora del inmueble. Dichas mejoras deben hacerlo más compatible con los criterios de sostenibilidad establecidos para la financiación inmobiliaria. Por supuesto, jamás se han excedido del 80% del valor de tasación, ni han incluído ningún otro tipo de financiación para gastos hipotecarios ni consumo.
En fin, que nos pareció una rara avis en el mundo de la banca. Algo así como la vuelta al orígen de la banca, simple, primitiva, sostenible, ...¿segura?