Antes del crash de 1929, la frase preferida de Livermore fue: Dejad que el comprador se preocupe de defender su posición.
A partir del fatídico día, se creó el SEC y fue entonces cuando los manipuladores de mercado empezaron a desmoronarse como las fichas de domino cuando se empujan y empiezan a caer una tras otra.
Abatido y sin recursos, empezó a plantearse la posibilidad de trabajar sin cobrar comisiones y solo cobrar resultados.
Los Bucket-shops ya no eran suculentos platos de lujo para él, el SEC con su nueva normativa de mercados había aniquilado de un plumazo muchas irregularidades del pasado y Livermore perplejo vio como a su frase preferida le habían dado la vuelta y ahora rezaba el siguiente postulado: Dejad que el vendedor se preocupe de defender su posición.
Durante la depresión de los años 30, los mercados de renta variable sufrieron un parón de operaciones y la dinámica de gestión ya no atraía a ningún operador.
Si bien es cierto que la recuperación alcista se inicio a partir de 1933, los volúmenes de contratación bajaron mucho y Jesse tuvo que apartarse nuevamente del mercado y buscar financiación para poder sobrevivir a este nuevo mercado errático.
Desde la oscuridad, Jesse empezó a cuestionarse todo lo que había hecho, operaciones con niveles altísimos de riesgo, corto plazo como estandarte, operaciones al margen que al estar manipuladas salían bien pero con riesgos desorbitantes…..
Sincerándose con un periodista, llego a contar que durante media vida en los mercados, una única vez que compró y esperó fue cuando obtuvo grandes plusvalías.
Con muchos problemas financieros, operativos y familiares Livermore abatido se retiró a pensar y meditar sobre su situación.
La nueva normativa, la poca confianza de los grandes consorcios, la gran depresión de la economía en esos momentos y su falta de autoestima le llevó a quedarse al margen de los mercados durante un tiempo.
Años más tarde volvería…….
Saludos.