¿Qué es la Beta?
El coeficiente beta mide la sensibilidad del valor liquidativo de un fondo de inversión a los movimientos registrados por su índice de referencia.
Así, la beta nos indica cómo variará la rentabilidad del fondo si lo comparamos con la evolución del índice de referencia. O dicho de otra manera, la beta nos dice la exposición al mercado que está asumiendo el gestor.
¿Cómo se calcula la Beta?
La Beta de un fondo es un coeficiente que mide la volatilidad relativa de ese fondo en relación al conjunto del mercado del que forma parte, teniendo siempre en cuenta que la Beta del índice de referencia es 1,00.
Donde:
Βi= Beta del fondo i
Covij= covarianza entre i (fondo) y j (índice)
σj2= varianza del índice
¿Qué valores puede presentar la Beta?
La Beta puede presentar distintos valores :
- Beta = 1 : Si la beta del fondo es igual a uno, su valor liquidativo se moverá igual que el índice de referencia. Si, por ejemplo, estamos invirtiendo en un fondo de renta variable española, cuyo índice de referencia es el Ibex 35 y cuya Beta es unitaria, si el Ibex 35 sube un 10%, el fondo de inversión también debería subir un 10%.
- Beta > 1 : Si la beta del fondo es mayor que uno, eso implica que el fondo de inversión es mas volátil que el índice de referencia y, por tanto, su riesgo es mayor en relación a los movimientos del mercado. El fondo de inversión subirá o bajará un porcentaje mayor de lo que lo haga el mercado. Si tuviéramos una beta de 1,5 y el índice bajara un 10%, el fondo bajaría un 15%.
- Beta < 1 : Si la beta del fondo es menor que uno, el fondo de inversión será menos volátil que el índice de referencia; es decir, su riesgo será menor. En este caso, el fondo debería subir o bajar un porcentaje menor de lo que lo haga el mercado. Si hemos invertido en un fondo con Beta 0,5 y el mercado cae un 10%, mi fondo registrará tan sólo una caída del 5% (la mitad).
Como la beta es un dato relativo, también podemos interpretarla en forma de porcentaje. Por ejemplo, una beta de 1,10 significa que el fondo es un 10% (1,10-1,00) más volátil que el índice. Y si tenemos una beta de 0,5 esto indica que el fondo es un 50% (0,5-1,00) menos volátil que el índice.
En función de lo anterior, podemos deducir que los fondos con betas más altas son más volátiles e implican una mayor posibilidad de obtener un mayor rendimiento, aunque también entrañan un mayor riesgo y podríamos registrar mayores pérdidas.
¿Por qué es importante la Beta?
El coeficiente Beta es importante porque nos da una referencia de cómo se ha comportado históricamente nuestro fondo en relación a la evolución del mercado, señalando el riesgo que asume el fondo en relación a su índice de referencia. Puesto que es una medida de riesgo relacionada con el índice de referencia, es incluso más importante ser consciente del nivel de volatilidad del índice de referencia, o mercado en el que invierte el fondo.
Para ilustrar lo anterior, podemos citar dos fondos que invierten en renta variable de la zona euro, pero aplicando diferentes estrategias de gestión:
- Santander Aggressive Europe: Tiene como objetivo mantener una exposición a riesgo Renta Variable Euro superior al 100%, con un máximo de exposición en el entorno del 180% (situándose el porcentaje medio de exposición en torno al 150%). Este porcentaje se conseguirá mediante inversiones de contado y derivados sobre valores/índices. ¿Cuál es su Beta? Un 1,47, implicando una exposición media al mercado de renta variable Euro del 147%.
- Credit Suisse IndexMatch (Lux) Euro Stoxx 50B: Por el contrario, este fondo intenta seguir lo más fielmente posible la trayectoria del índice Dow Jones Euro Stoxx 50, y cuenta con una beta histórica de 1,01, implicando una exposición del 101% al mercado de renta variable Euro.
¿En qué se traduce esta diferente forma de gestionar y esa diferencia de Beta? Básicamente, en que en períodos alcistas del mercado el Santander Aggressive Europe será capaz de ofrecernos unas rentabilidades más jugosas. Por ejemplo en 2006 este fondo obtuvo una rentabilidad del 24,9% frente a un 17,4% que consiguió el fondo indexado de Credit Suisse AM. Pero ¡cuidado!, ello a costa de asumir un mayor riesgo, de lo cual da buena muestra la volatilidad de ambos fondos, siendo la del fondo de Santander bastante superior a la del fondo de Credit Suisse AM.
Por último, recordamos que la beta de un determinado activo está basada en su comportamiento histórico por lo que da solamente una estimación de cuál puede ser su beta en el futuro.