Son muchos los amigos y familiares que en los últimos meses aprovechando que me ven o que se van dando acontecimientos políticos me preguntan donde pueden llevar su dinero para poder dormir tranquilos por las noches y es que la cuestión, todos tienden a tener un perfil conservador pero no quieren los depósitos.
Siempre les hablo de 3 alternativas que pueden conformar una cartera de renta fija interesante y sirve para obtener rentabilidades modestas pero que sobre todo, les permita estar en tranquilidad. Por tanto, este es el primer artículo y luego vendrán otros dos.
Hoy trataremos la renta fija país o pública.
Terminamos el año y a falta de un último mes, parece que no se van a dar más subidas de tipos tanto en EEUU como en Europa.
La cuestión a tener en cuenta, o una de ellas, es que los responsables de estas instituciones a parte de no subir ahora los tipos tienen claro lo siguiente:
*hay que esperar la evolución de los datos, el famoso data a data, para ver cómo evoluciona la economía, la inflación y el paro.
Estos factores de cara al 2024 son los que se deben vigilar y que en función de cómo vayan, o se siguen manteniendo altos los tipos, o puede que de cara al segundo o tercer trimestre haya cierta bajada por parte de los bancos centrales de los tipos de interés.
Enmarcado la situación entremos en las siguientes cuestiones, la primera, la renta fija no es fija, y la crisis bancaria de los pequeños bancos americanos el año pasado fue clave para que el inversor particular lo entienda. Es fija porque a vencimiento se recibe en principio, si está todo bien, el capital aportado más la rentabilidad prometida.
¿Dónde está el problema?, que esa deuda, con independencia de producto que sea, desde su nacimiento con un precio, hasta su finalización, este precio puede variar y llegar a ser 0.
Esto lo vimos porque la renta fija perdió el año pasado por esta cuestión, un 17%. Ello se debió a la crisis de los bancos, por la fuerte subida de los tipos de interés.
Ahora entramos en el segundo riesgo, dependiendo del emisor, la probabilidad de que este no cumpla lo acordado importa mucho, por eso es importante entender que hay deuda país, y dependiendo del país hay menor o más riesgo de que no cumpla, o deuda corporativa con el mismo problema.
Por eso, el inversor conservador debe entender que toda inversión tiene riesgo, una más que otras, pero existe, y convertirse en comprador de deuda de otros tiene ese riesgo.
Pongamos a nuestro país de ejemplo, tenemos una deuda que está por el 112% del PIB, y como no consigue suficiente ingreso para pagar todo lo que desea el Gobierno, emite deuda. Este año muchos españoles hicieron cola para comprar letras a 3, 6 y 9 meses cuándo daban alrededor de un 3% o un poco más. Nuestro país no va a pagar su deuda, en principio sí, pero siempre y cuando no siga creciendo esta deuda y haya ciertos ajustes políticos. O por último que Europa nos obligue, porque pensar que el BCE va a seguir comprando nuestra deuda puede que deje de cumplirse. Una de estas cosas pasará, por tanto, el inversor tiene que estar atento pero no en pánico, sólo explico lo que pasa.
También en estas circunstancias podríamos hablar de Italia, con una deuda del 140% y con la advertencia de que su rating pase de triple BBB a una categoría peor. O vemos a la gran Alemania que está empezando a endeudarse para poder hacer frente a todas las cuestiones relacionadas con la falta de energía por culpa de las sanciones a Rusia.
Si eres consciente de esta situación, no es para que te alarmes, pero si para que te preocupes y sigas con detenimiento lo que pasa en el mundo.
Dentro de un perfil conservador se puede crear una cartera interesante en renta fija, yo no lo descarto por mucho que hablen que la próxima gran crisis será de deuda, pero eso sí, con criterio.
Una cartera podría de renta fija diversificada podría ser:
*fondo monetario a 1 año, liquidez en cualquier instante
*fondo en renta fija país solventes a 1 año
*fondo en renta fija país solventes a 2 año
Y si queda algo de dinero para buscar un poco más de rentabilidad, pero con mucho menos dinero invertido que en el apartado anterior:
*fondo de renta fija corporativo Investment grade
*y si se quiere mayor riesgo y a modo optativo, en Hig Yield
Siempre les hablo de 3 alternativas que pueden conformar una cartera de renta fija interesante y sirve para obtener rentabilidades modestas pero que sobre todo, les permita estar en tranquilidad. Por tanto, este es el primer artículo y luego vendrán otros dos.
Hoy trataremos la renta fija país o pública.
Terminamos el año y a falta de un último mes, parece que no se van a dar más subidas de tipos tanto en EEUU como en Europa.
La cuestión a tener en cuenta, o una de ellas, es que los responsables de estas instituciones a parte de no subir ahora los tipos tienen claro lo siguiente:
*hay que esperar la evolución de los datos, el famoso data a data, para ver cómo evoluciona la economía, la inflación y el paro.
Estos factores de cara al 2024 son los que se deben vigilar y que en función de cómo vayan, o se siguen manteniendo altos los tipos, o puede que de cara al segundo o tercer trimestre haya cierta bajada por parte de los bancos centrales de los tipos de interés.
Enmarcado la situación entremos en las siguientes cuestiones, la primera, la renta fija no es fija, y la crisis bancaria de los pequeños bancos americanos el año pasado fue clave para que el inversor particular lo entienda. Es fija porque a vencimiento se recibe en principio, si está todo bien, el capital aportado más la rentabilidad prometida.
¿Dónde está el problema?, que esa deuda, con independencia de producto que sea, desde su nacimiento con un precio, hasta su finalización, este precio puede variar y llegar a ser 0.
Esto lo vimos porque la renta fija perdió el año pasado por esta cuestión, un 17%. Ello se debió a la crisis de los bancos, por la fuerte subida de los tipos de interés.
Ahora entramos en el segundo riesgo, dependiendo del emisor, la probabilidad de que este no cumpla lo acordado importa mucho, por eso es importante entender que hay deuda país, y dependiendo del país hay menor o más riesgo de que no cumpla, o deuda corporativa con el mismo problema.
Por eso, el inversor conservador debe entender que toda inversión tiene riesgo, una más que otras, pero existe, y convertirse en comprador de deuda de otros tiene ese riesgo.
Pongamos a nuestro país de ejemplo, tenemos una deuda que está por el 112% del PIB, y como no consigue suficiente ingreso para pagar todo lo que desea el Gobierno, emite deuda. Este año muchos españoles hicieron cola para comprar letras a 3, 6 y 9 meses cuándo daban alrededor de un 3% o un poco más. Nuestro país no va a pagar su deuda, en principio sí, pero siempre y cuando no siga creciendo esta deuda y haya ciertos ajustes políticos. O por último que Europa nos obligue, porque pensar que el BCE va a seguir comprando nuestra deuda puede que deje de cumplirse. Una de estas cosas pasará, por tanto, el inversor tiene que estar atento pero no en pánico, sólo explico lo que pasa.
También en estas circunstancias podríamos hablar de Italia, con una deuda del 140% y con la advertencia de que su rating pase de triple BBB a una categoría peor. O vemos a la gran Alemania que está empezando a endeudarse para poder hacer frente a todas las cuestiones relacionadas con la falta de energía por culpa de las sanciones a Rusia.
Si eres consciente de esta situación, no es para que te alarmes, pero si para que te preocupes y sigas con detenimiento lo que pasa en el mundo.
Dentro de un perfil conservador se puede crear una cartera interesante en renta fija, yo no lo descarto por mucho que hablen que la próxima gran crisis será de deuda, pero eso sí, con criterio.
Una cartera podría de renta fija diversificada podría ser:
*fondo monetario a 1 año, liquidez en cualquier instante
*fondo en renta fija país solventes a 1 año
*fondo en renta fija país solventes a 2 año
Y si queda algo de dinero para buscar un poco más de rentabilidad, pero con mucho menos dinero invertido que en el apartado anterior:
*fondo de renta fija corporativo Investment grade
*y si se quiere mayor riesgo y a modo optativo, en Hig Yield