La regla número 1 de todo inversor es saber el valor de aquello en lo que inviertes, para así no perder dinero. Todos los días oímos opiniones de “gurús” sobre si el mercado va a subir o bajar. Estas opiniones están sesgadas, casi exclusivamente, por el último titular de noticias que se acabe de publicar. En este post te demuestro por qué el S&P 500 se podría ir perfectamente al nivel de los 4.000 puntos, es decir, subir un 30% desde estos niveles.
El Reino Unido no consigue ponerse de acuerdo para aprobar el acuerdo sobre el Brexit y se convocan a nuevas elecciones. La negociación comercial entre EE.UU y China sigue sufriendo múltiple altibajos. Elecciones con resultados populistas en España y Argentina. Crisis en Chile. La OCDE avisa de que la elevada deuda limita la acción de los Gobiernos. Alemania esquiva la recesión con un pírrico crecimiento del 0,1%. Decisiones de tipos del ECB y la FED. La Fed rebaja por tercera vez consecutiva los tipos de interés. Problemas de liquidez en el mercado repo de EE.UU. El crecimiento en EE. UU. se modera al 1,9%. La inflación se mantiene en el 0,1% y sigue en mínimos.
Estos son sólo algunos de los titulares que durante el último trimestre te podrían haber llevado a tomar decisiones drásticas sobre tu cartera de inversión. Sin la ayuda de un Programa de Inversión, probablemente habrás sobre reaccionado y realizado movimientos en tu cartera propiciados por noticias a corto plazo. Todos necesitamos reducir el ruido de los mercados y esa tendencia natural a actuar ante situaciones de miedo.
Cada día está más claro que el mercado se está moviendo por una variable clave, los tipos de interés de la FED. Hace un año, por estas fechas, la rentabilidad del bono americano a 10 años rompía la barrera del 3%, amenazaba con irse al 3,5% y empezaba a convertirse en una alternativa de inversión frente a otro tipo de activos. Como resultado, en diciembre de 2018 el S&P 500 cayó un 17% hasta los 2300 puntos. Hay que ver como hemos cambiado en doce meses. La FED ha bajado 3 veces los tipos de interés, la rentabilidad del bono americano a 10 años ha vuelto a mínimos históricos y el S&P 500 se encuentra en máximos históricos por encima de los 3100 puntos.
Pero ¿por qué ha pasado todo esto? Y lo que es más importante ¿dónde nos encontramos y qué nos depara el futuro?
La mejor explicación para todo ello es utilizar un método objetivo que nos permita saber en todo momento cómo se encuentra la valoración de los mercados.
Empecemos por el principio. Al final del día, la valoración de cualquier activo consiste en tomar el flujo actual de caja que genera y aplicarle un múltiplo de valoración correcto. Este múltiplo dependerá de 2 variables. Por una parte, debemos considerar la tasa de crecimiento esperada del flujo de caja del activo y, por otro el coste de oportunidad o tasa con la que descontar esos flujos de caja al momento actual. Como puedes observar no se trata de un modelo complejo, pero sí altamente eficaz, en el que la clave como siempre está en la calidad de los datos.
Bajo estas premisas he decidido aplicar este principio al S&P 500 con el objetivo de determinar su valor justo. Dado que no disponemos de información perfecta y no sabemos cómo se van a mover las variables, he decidido crear una matriz de sensibilidad con el objetivo de tener una idea de donde estamos. No buscamos la precisión, sólo saber dónde nos encontramos.
Para que nos hagamos una idea de la sensibilidad de los mercados a los resultados empresariales y a los tipos de interés he creado la siguiente matriz, que para un nivel esperado de beneficios por acción del S&P 500 obtiene una valoración del S&P 500 mediante un modelo de DDM para distintos niveles de rentabilidad del bono americano. Los más puristas reconocerán el modelo DDM como el modelo de Gordon-Shapiro, aunque en mi opinión simplemente se apropiaron de las ideas de John Burr Williams.
La siguiente tabla muestra los resultados de mi análisis:
Como puedes observar, y teniendo en cuenta que el consenso de los analistas para el beneficio por acción del S&P 500 en 2020 se sitúa en torno a $175, no sería descabellado pensar que el S&P 500 superase el nivel de los 3500 puntos durante los próximos 12 meses.
De hecho, para el nivel actual, tanto de expectativas de beneficios empresariales como de tipo del bono a 10 años, el valor justo del S&P 500 estaría en torno a los 4.000 puntos o un 30% por encima del nivel actual.
Hay que resaltar que para que el S&P 500 se fuese por debajo de los 3.000 puntos debería de darse una caída en las expectativas actuales de beneficios por acción y, que la rentabilidad del bono americano se fuese por encima del 2,25%. Así que por el momento podemos dormir tranquilos.
Esta es sólo una de las múltiples variables que compone el indicador de nuestro Programa de Inversión y por lo tanto os tendremos avisados a todos los suscriptores si se producen cambios relevantes en el mismo. Si no conoces la metodología de nuestros Programa de Inversión puedes obtener una explicación completa aquí (https://www.rankia.com/blog/inversor-disciplinado/4108997-programa-inversion-cuanto-debo-invertir-bolsa)
Como siempre, me despido deseándote mucho éxito en tus inversiones
