Rumorología en estado puro y unos mercados agradecidos son dos factores recientemente encargados de maniobrar las ganancias de los mercados estos días. Simultáneamente, la ansiedad de los inversores también se mueve al alza en vista de lo complicado que se presenta poner un cortafuegos a la crisis europea, agravado con la disparidad de opiniones entre Francia y Alemania.
¿Por qué surgen disparidades? La banca francesa, de las más grandes del mundo, tiene una elevada exposición a Grecia y el resto de PIIG y la presumible aplicación de una pronta quita de deuda griega, más el efecto contagio, provocaría el rescate a algunos bancos franceses por parte del estado. Las agencias de calificación de riesgo han advertido de una posible rebaja en su deuda soberana que presumiblemente se podría producir en caso de intervenir en el sistema bancario.
El fondo de rescate europeo, EFSF, debe ser dotado por países con máxima calificación -triple A- y si Francia la pierde daría al traste con la posibilidad de gestionar la crisis ordenadamente. Actualmente el 54% del EFSF proviene de países AAA (Alemania, Luxemburgo, Finlandia, Holanda y Francia).
Si Francia pierde la máxima calificación, el EFSF quedaría dotado por países triple A sólo en un 34.5% y entonces, los otros cuatro países triple A deberían ampliar sus dotaciones para que el fondo de Rescate conservara también su máxima calificación. Escenario inverosímil.
Alemania queda entonces como principal responsable e implicado de primer orden en solucionar la crisis y quizá gracias a este reconocimiento se ha desechado sin mayor problema la propuesta de Sarkozy de crear un banco a partir del EFSF y ha prevalecido la idea alemana de otorgar el EFSF el papel principal de garante de emisiones.
Las deudas de los PIIGS suman cerca de $4 trillion (alrededor de €3 billones) y cualquier programa de quita o plan de ajuste financiero real debe ser anunciado con los parapetos y muros de contención apropiados; de no ser así el inevitable efecto contagio provocaría una debacle. La dificultad de los países miembros del la EU para asumir hercúleos compromisos es directamente proporcional al tiempo que están tardando las autoridades en alcanzar un acuerdo.
Círculo vicioso difícil de romper y con otros condicionantes que complican la situación adicionalmente, dos grandes países europeos como España e Italia deben aportar al EFSF el 12% y 18% respectivamente. Resulta que el fondo fue en parte creado ante la posibilidad de que precisamente estos necesitaran ser ayudados, más que pensando en su capacidad de aportar fondos.
Las últimas noticias desde Alemania vienen en la dirección de aplicar fórmulas de apalancamiento al EFSF hasta cerca de € 1.2 billones. Noticia que puede aliviar a los inversores, incluso considerando que esta cifra queda muy por debajo de los € 2 a 3 billones rumoreados la pasada semana.
Realmente, la trama es similar a un esquema Ponzi -Madoff- en el que no hay dinero suficiente y se inventan fórmulas para procurar aparente músculo financiero y supuestamente reducir incertidumbre. En este particular la fórmula consiste en dotar al EFSF de apalancamiento.
El pasado fin de semana la Troika ha publicado un nuevo informe evaluando la situación actualizada de Grecia.
Las conclusiones son pesimistas, un 33% peores de lo anteriormente estimado. El ratio de deuda – PIB lo proyectaban hasta un 149% para 2.013 pero la actualización apunta a un estimado de 186% para 2013, con posibilidad de alcanzar el 208% bajo determinadas circunstancias adversas.
Ante estas circunstancias es imprevisible que Grecia pueda acceder a los mercados de capitales hasta 2.027, por lo que las necesidades financieras adicionales (incluyendo refinanciaciones de deuda actual) podrían alcanzar $450.000 millones. No obstante, esta cifra se podría reducir en $109.000 millones si se practica una quita (PSI) del 60%.
Resulta que bajo el peor escenario objetivado por la Troika, Grecia podría absorber prácticamente toda la capacidad actual del EFSF.
Al otro lado del Atlántico también está subiendo la tensión. El próximo día 23 de noviembre se reunirá en el congreso el denominado Super Comité, participado por los dos principales partidos, para discutir el esperado programa de austeridad con el que aspiran a recortar el déficit en $1.2 trillion.
En caso de no conseguir un acuerdo, se introducirá un plan automático de recorte drástico de gastos que dará comienzo en 2.013. Por el contrario, si consiguen avanzar se analizarán los detalles para saber si afectará negativamente a la capacidad de crecimiento de la economía. y las agencias de calificación castigarían la deuda USA, rebajando la calificación.
Recordemos que el pasado mes de agosto, Standard $ Poor´s rebajó un nivel la calificación y la pasó a perspectiva negativa. Una rebaja efectiva adicional y / o rebajas de Fitch y Moody´s serían confirmación de una tendencia preocupante y podrían revolucionar los mercados.
La opinión de Ethan Harris, economista de Merrill Lynch, es clara anticipando una próxima rebaja de calificación de deuda USA: "Hence, we expect at least one credit downgrade in late November or early December when the super committee crashes".
Los antecedentes apoyan esta opinión, tras las infructuosas negociaciones entre Demócratas y Republicanos para elevar el techo de deuda en agosto. No culminaron en acuerdo y este desencuentro propició la rebaja de valoración.
Se rumorea de nuevo que la FED puede estar evaluando la idoneidad y fechas para implantar un nuevo programa de expansión cuantitativo QE3.
Mañana y el próximo día 23 de noviembre son citas para la posteridad, de gran relevancia para el futuro económico y para la marcha de los mercados financieros. La posibilidad de decepcionar al mercado es demasiado elevada y puede traducirse en una oleada de ventas durísima, ahora que el sentimiento y confianza del mercado han mejorado y que los índices cotizan en zonas de resistencia mayor.
En el gráfico siguiente muestro algunos detalles técnicos que permiten observar diversos factores resistencia confluyendo en la zona de los 12.000 puntos de Dow Jones.
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Antonio Iruzubieta,
CEFA