Planes de salvamento que de momento no parece que hayan solucionado nada, creando una deuda pública que a ver como se coloca y más con estos tipos y rentabilidades. Aunque mal tienen que estar las cosas para que la gente acepte hasta perder dinero.
Igual es que llegar a deflacionar no es ya una teoría loca. En noviembre se desplomaron los precios por segundo mes consecutivo. Causas: el precio del petróleo que cayó de forma siginificativo pero no sólo él, sino el bajón del consumo que lleva a ofertas sin igual para los consumidores.
Pero es que pasa como en Europa, da igual que los tipos estén al 0 al 2 o al 4. Si alguien va hoy a un banco en España y pide un crédito, primero está que se lo den, y después a qué tipo. Fijo que del 8-9% no baja. Los tipos de los bancos centrales han perdido consonancia con los tipos reales, no tienen nada que ver.
Mientras, el helicóptero se ha podido llenar de gasolina con la bajada del petróleo. Comprad acciones de papeleras, está a punto de arrancar y pronto empezarán a volar billetitos. Veremos a dónde va el dólar, y veremos si esto sirve para algo.
La verdad es que uno ya no sabe para donde va esto, si el dólar bajará (lo lógico) o no, si esto (inundar de papel) causará inflación o hiperinflación o no, si el crédito volverá o no, si la crisis se superará o no.
¡Esto es de locos! El manual de teorías prácticas económicas se puede quemar porque todo reacciona como le da la gana....
P.D.: mmmmm ¿estarán los americanos empezando a aprender japonés?
Jaime