Con esta entrada empiezo una serie de artículos, que de forma discontinua publicaré en mi blog para denunciar las manipulaciones del mercado. En el de hoy, hablaré de la tasa oficial de paro norteamericana: la más manipulada. Se trata de un índice fundamental; porque al calor de sus números las bolsas suben, el oro baja o el dólar se fortalece. Por no hablar, de su influencia en el consumo y en las acciones de la FED en cuestiones de política monetaria.
Cuando llegan las recesiones, los políticos mienten como lunáticos
Si en tiempos normales los políticos mienten como bellacos… cuando llegan las recesiones y las cosas se ponen chungas, mienten como lunáticos. Dicen que para meterse en política se necesita mucho “estómago”. Puede ser. Aunque yo creo que lo que se necesita es una gran capacidad de autoengaño. Porque si no la tienes, jamás encontrarás la aprobación de tus correligionarios. En España tenemos muy buenos ejemplos de esto. Durante el reinado de Zapatero, Solbes nos informaba de una “leve desaceleración económica” y de “ajustes en el sector inmobiliario”; Elena Salgado veía “brotes verdes” en todas partes y el propio Zapatero quitaba hierro al asunto de Caja Castilla La Mancha, porque nuestra banca era la mejor del mundo gracias a la encomiable labor del Banco de España.
Desde que empezó la crisis, muy pocos gobernantes han renovado sus mandatos. Y en Estados Unidos, los ciudadanos votaron por primera vez a un presidente negro. La perseverancia de la recesión está dejando a muchos en evidencia… y ya veremos si los brotes verdes de Rajoy sobreviven al duro invierno. Sin embargo, con el paso del tiempo, los políticos se han vuelto más adaptativos. Mediante la ayuda del “Trío Calaveras” –formado por los bancos centrales, la banca y la gran prensa económica-, han elaborado un discurso finalista que anticipa todos los días el fin de la recesión. Por supuesto, algún día acertarán… pero de momento tenemos a un montón de índices y de estadísticas manipuladas para avalar la tesis oficial. Huelen a chamusquina: el US Dollar Index, el VIX, el índice de confianza del consumidor de la Universidad de Michigan, el Comex, el índice Case-Shiller (aunque menos); y por supuesto, el modo en que las autoridades calculan el PIB. Respecto a este último, es como hacer una ensalada. Ya que en función de las variables que contemples, ésta te saldrá salada, dulce o tropical. Recientemente la administración Obama ha introducido nuevas variables para deducir su cálculo. Como por ejemplo, el aumento del tráfico en la mensajería instantánea (SMS, Whatsapp, etc.). La verdad es que esta metodología es bastante sorprendente… y no puedo dejar de preguntarme si no seria mejor para el PIB, acudir al Bernabeu y pegar cuatro gritos.
En general, el mercado acepta el discurso oficial. Seguramente porque está anestesiado por los QE y porque no abundan opiniones “contrarian” como la de la agencia Egan Jones; que por poner en duda la sostenibilidad de la deuda estadounidense, no podrá emitir comunicados desfavorables sobre la misma durante, al menos, dos años.
La tasa de paro oficial de Estados Unidos: la más manipulada
Comúnmente conocida como U3, está muy manipulada porque en su cómputo se dejan fuera algunas variables cuya consideración podría elevar el porcentaje de parados. Entre otras cosas, no tiene en cuenta:
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El paro agrícola.
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A los parados de larga duración; a los llamados “desanimados”, que tras un año de no buscar trabajo, salen de las listas.
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A todos aquellos que trabajan a media jornada, pero preferirían hacerlo a jornada completa.
Actualmente, la U3 muestra un desempleo del 7’4%. Y es la referencia que toman los mercados para sacudirse hacia arriba o hacia abajo. Lo cuál es muy extraño, porque si para calcular algo necesitas tener en cuenta las variables A, B, C Y D y sólo tienes en cuenta la A; en cierto modo, te estás haciendo trampas al solitario… Pero para las autoridades y para los hedge funds, siempre alcistas –especialmente desde que la FED destruyó todos los cortos con sus políticas de expansión cuantitativa-, esto es una minucia sin importancia. No hay que comerse el coco… la caída de la U3 mejora las expectativas de consumo y ya está.
Los que quieran saber cómo quedaría el paro si se computaran todos los aspectos, tienen que acudir al Departamento de Trabajo de Estados Unidos; que periódicamente publica la llamada tasa real de desempleo o U6, que hoy alcanza al 14’4% de la población activa.
El paro estimado por la U3 es casi la mitad que el de la U6
De modo que el paro estimado por la U3, es casi la mitad que el de la U6 y un tercio del publicado por la agencia independiente Shadowstats, que lo sitúa en el 23’4%. Lo de Shadowstats tiene miga, porque para calcular el desempleo utilizan las mismas técnicas que usaba la administración norteamericana antes de la presidencia de Bill Clinton.
Así que ya veis, la U3 no cuenta toda la verdad. Ni siquiera su caída tiene por qué favorecer al consumo… porque no contempla la pérdida de capacidad adquisitiva de todas las personas que han visto reducida su jornada laboral, como se observa en el siguiente gráfico:
En rojo, la caída del trabajo a tiempo completo
En 2012, Estados Unidos generó 953.000 puestos de trabajo. De los cuáles, 731.000 lo fueron a tiempo parcial. Esto significa que la creación de empleo neto ha sido muy modesta y que el paro estadounidense se reduce muy lentamente. Siguiendo con esta tendencia, si nos vamos a junio de 2013, observamos que el país ha generado 360.000 puestos de trabajo a tiempo parcial y destruido 240.000 contratos “full time”; reduciéndose el monto total de horas laborales en un 0’1%. O sea, que se destruye empleo… Si nos fiamos de la U3 parece que todo marcha; cuando en realidad, la situación es muy delicada.
Desgraciadamente, la mayoría del mercado se traga todo lo que se publica. Los inversores están entusiasmados con las inyecciones monetarias de la FED y se hacen muy pocas preguntas. Es triste decirlo, pero van a acabar como los perros de Pavlov: babeando y sin comida. Se mueven por noticias, por estímulos. Es la mentalidad de la manada. Pero cuando esto se dé la vuelta, habrá una masacre.
Porcentaje de parados y población activa
Pero sigamos hablando de la tasa de paro… Otro de los condicionantes que determina el porcentaje de parados, es la evolución de la población activa; es decir, de las personas que están en edad de trabajar. Como dije anteriormente, la U3 no computa a los parados de larga duración. Todos los individuos que llevan más de 1 año sin buscar empleo, salen de las listas y se convierten en un “enigma estadístico”. Que pasa con ellos?: los han abducido los extraterrestres?, se han pegado un tiro?, están dando la vuelta al mundo? A nadie parece importarle demasiado. Pero como inversor, me tomaría muy en serio el siguiente cuadro de Goldman Sachs:
La caída del desempleo corre paralela al declive de la Fuerza Laboral
Si contabilizas la generación de trabajo temporal y sacas a un montón de gente de las listas, la tasa de paro sólo puede mejorar. Sin embargo, a los republicanos todo esto no les gusta ni un pelo. Durante la última campaña electoral denunciaron el maquillaje de las estadísticas promocionado por la administración demócrata. Y muy recientemente, el Congreso ha pedido información sobre el método utilizado para confeccionar el ratio del empleo. Todas estas circunstancias han obligado a algunos miembros de la FED, como a Yellen y al mismo Bernanke, a reconocer que han subestimado el número de parados… cuyo porcentaje sitúan cerca del 9% -que es precisamente lo que afirma Goldman Sachs-.
Pero donde están los “desanimados”? Muchos analistas relacionan la disminución de la fuerza laboral con la demografía; concretamente, con el envejecimiento de la población. Al fin y al cabo los viejecillos se jubilan. Sin embargo, los números barajados por el Departamento de Trabajo parecen desaconsejar esta hipótesis; porque el colectivo con mayor éxito profesional, es el que comprende la franja de edad que va de los 55 a los 69 años, que ha aumentado mucho desde el comienzo de la crisis.
Así que habrá que buscarlos en otro lado… El aumento exponencial de los programas de ayuda social para los más desfavorecidos, como el Medicare o la asistencia alimenticia, sugiere que la gran mayoría sigue dentro del país. Sin embargo, en los últimos tiempos ha ocurrido un hecho excepcional: por primera vez en varias décadas, el flujo migratorio entre Estados Unidos y México se ha invertido; o dicho de otro modo, llegan a México más compatriotas de los que emigran hacia el norte. Este cambio de tendencia, supone el estancamiento de la oleada migratoria más importante en la historia reciente de Estados Unidos.
La inversión del saldo migratorio
La inversión del saldo migratorio explica, en parte, la caída de la población activa estadounidense.
Sea por la crisis inmobiliaria, por la dureza de las políticas inmigratorias practicadas en los estados del sur o porque en México ahora se vive mejor que hace unos años… una parte de los 12 millones de mexicanos radicados en Estados Unidos, está volviendo a su país. El informe Pew revela un dato sorprendente: entre 2007 y 2011, el número de mexicanos indocumentados pasó de 7’1 a 6’1 millones. Probablemente, porque muchos están abandonando el sueño americano.
En España, la inversión del saldo migratorio ya ha comenzado. Aunque lo ha hecho recientemente, tras varios años de recesión y con un paro elevadísimo. En Estados Unidos sucede lo mismo con un paro del 7’4%. Y francamente, eso NO es posible. Tiene que ser muy superior… La tasa oficial de desempleo norteamericana es una milonga. Que cada cuál piense lo que quiera, pero para mi los QE están fallando en su objetivo fundamental de crear empleo. Y en caso de que se produzca, cada puesto de trabajo recibe una subvención de varios centenares de miles de dólares por cortesía de la impresora de la FED.
Un saludo a todos/as. Feliz verano!