Jordan R. Belfort nació en la ciudad de Nueva York el 9 de julio de 1962. Fue bróker y actualmente se dedica a dar conferencias.
Belfort se hizo millonario vendiendo
acciones de bajo precio por teléfono. Sin embargo, fue posteriormente acusado de fraude y violación de leyes bursátiles, lo que le llevó a pasar 22 meses en prisión.
Después de ser atrapado e ir a la cárcel, escribió el afamado libro autobiográfico El lobo de Wall Street, que fue adaptado cinematográficamente en 2013 por Martin Scorsese y se convirtió en un gran éxito en taquilla.
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Nombre: Jordan Ross Belfort.
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Nacimiento: 9 de julio de 1962. Lugar: Nueva York, EE.UU.
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Conocido por: ser El Lobo de Wall Street.
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Obras destacadas: El Lobo de Wall Street, Atrapando al lobo de Wall Street.
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Esposas: Denise Lombardo (1985-1991), Nadine Caridi (1991-2005), Anne Koppe (2008-2020), Cristina Invernizzi (2021-presente).
Biografía de Jordan R. Belfort
De familia judía, Jordan Belfort es hijo de Leah y Max Belfort, quienes fueron contables, aunque más tarde su madre se convirtió en abogada.
Belfort fue criado en el barrio de Queens, en la ciudad de Nueva York. Durante su infancia Jordan y su amigo íntimo de la infancia, Elliot Loewenstern, se dedicaron a la venta de helados italianos en la playa, y los transportaban en neveras portátiles. Este negocio les permitió ganar 20.000 dólares.
Belfort planeaba estudiar odontología, por lo que se matriculó en el Baltimore College of Dental Surgery. Sin embargo, su estancia en esa institución no duró mucho. El decano le dijo: La edad de oro de la odontología ha terminado. Si usted está aquí simplemente para intentar hacerse rico, está en el lugar equivocado. Y bueno, podemos sospechar por qué Belfort abandonó esa carrera.
Finalmente, nuestro protagonista estudió Biología en la American University, carrera alejada todavía de las finanzas, pero ya llegaremos a eso.
Sus primeros trabajos estuvieron centrados en las ventas, empezó vendiendo aspiradoras de puerta en puerta. Posteriormente Belfort inició un negocio de venta a domicilio de carnes y mariscos en Long Island, Nueva York. Al principio, tuvo éxito, según el propio Belfort, vendiendo 2.250 kilogramos de carne y pescado a la semana. Pero luego la actividad entró en declive y el joven empresario, se declaró en bancarrota.
Y aquí es donde comenzó su carrera como corredor de bolsa en LF Rothschild, una firma de brokeraje y banca de inversión. Esta empresa fue fundada en 1899 y no tiene vínculos familiares con la dinastía Rothschild original. La firma fue fundada en la década de 1970 y no tiene vínculos familiares con la dinastía Rothschild original. La empresa colapsó como resultado del crash del mercado de valores de 1987 y Belfort fue despedido como resultado del
lunes negro de 1987.
En 1990, a los veintidós años, fundó su propia empresa, Stratton Oakmont.
Stratton Oakmont y los fraudes de Belfort
Durante
la década de 1990, fundó, junto a Danny Porush, la firma de corretaje Stratton Oakmont. Esta empresa funcionaba muy bien
y
se dedicaba a
vender penny stocks, es decir, acciones de bajo valor, usualmente de menos de 5 dólares.
Belfort recurría al pump and dump, es decir, inflaba el precio de las acciones que vendía difundiendo noticias y rumores que eran falsos. El objetivo era empujar al alza la cotización para que en ese momento los propietarios de la empresa vendan y se beneficien. Sin embargo, luego de esas ventas, el precio se desplomaba, y quienes mantenían esos activos perdían dinero.
Las acciones vendidas con este método fraudulento ni siquiera tenían expectativa de recuperarse, pues el incremento en su valor solo se sostenía en información falsa.
Durante los años en que fue presidente de la empresa, Jordan Belfort llevó un estilo de vida muy convulso, con continuas fiestas y una fuerte adicción a drogas como la metacualona, tal como se puede ver en la película El lobo de Wall Street, protagonizada por Leonardo DiCaprio.
Esta empresa llegó a tener en su plantilla más de 1.000 corredores de bolsa y participó en la emisión de nuevas acciones por valor de más de 1.000 millones de dólares de unas 35 empresas, incluyendo una
oferta pública de venta (OPV) de la empresa de calzado Steve Madden Ltd. que resultó ser fraudulenta.
Para acabar con las continuas estafas, el regulador financiero, Joseph Borg, formó un grupo de trabajo multi-estatal que llevó al procesamiento de la empresa Stratton.
Jordan Belfort fue acusado en el año 1998 de fraude de valores, lavado de dinero y manipulación del mercado de valores. Tras colaborar con el FBI, fue encarcelado en una prisión federal durante 22 meses, condenado por pump and dump.
Esto se tradujo en una pérdida de 200 millones de dólares para los inversores. Belfort debía indemnizar, según la justicia, con más de 100 millones a sus antiguos clientes.
Fue en la prisión donde Jordan Belfort conoció a Tommy Chong, quien lo animó a escribir sus historias y publicarlas.
¿Belfort indemnizó a sus víctimas?
Belfort ha venido pagando indemnizaciones, pero sus obligaciones por este asunto no están saldadas.
Tras su salida de prisión, el acuerdo fue pagar el 50% de sus ingresos a sus clientes defraudados. Sin embargo, en 2013 el Departamento de Justicia de EE.UU. presentó una denuncia alegando que esto no se había cumplido durante los cuatro años previos (desde el 2009).
BusinessWeek informó que Belfort había reportado ingresos por 1,2 millones de dólares por la venta de los derechos para la película El Lobo de Wall Street. Sin embargo, solo habría pagado 21.000 dólares para la restitución de sus víctimas.
Belfort aseguró que fue el Gobierno el que habría denegado que se utilizara el 100% de las rentas por sus libros para las indemnizaciones a sus víctimas.
Programa formativo "The Straight Line System"
Al final de la película de El lobo de Wall Street, Jordan Belfort aparece dando una formación en ventas en la que le pide a sus alumnos que le vendan un bolígrafo:
Esta escena muestra el programa de entrenamiento para ventas desarrollado por Jordan Belfort "The Straight Line System". Este sistema se basa en las técnicas de persuasión que Belfort utilizó durante su carrera en la industria financiera y que le permitieron alcanzar un gran éxito en la venta de valores.
El concepto central del "The Straight Line System" es establecer una conexión emocional con el cliente y guiarlo a través de un proceso de ventas lineal. Belfort enfatiza la importancia de establecer una relación de confianza con el cliente, entender sus necesidades y objetivos, y presentar una propuesta de valor convincente.
El sistema se basa en una serie de pasos clave que el vendedor debe seguir para cerrar la venta de manera efectiva. Estos pasos incluyen:
1) Abrir: Captar la atención del cliente y establecer una conexión emocional desde el principio.
2) Presentar: Comunicar de manera clara y persuasiva los beneficios y características del producto o servicio ofrecido.
3) Revelar: Identificar y abordar las objeciones o preocupaciones del cliente de manera honesta y convincente.
4) Resolver: Proporcionar soluciones a los problemas planteados por el cliente y superar las barreras que impiden el cierre de la venta.
5) Cerrar: Pedir directamente la venta y guiar al cliente a tomar una decisión afirmativa.
El sistema también hace hincapié en la importancia de la tonalidad de voz, el lenguaje corporal y la comunicación efectiva para generar confianza y persuadir al cliente. Belfort ha enseñado este sistema a través de seminarios y cursos de capacitación, donde comparte sus estrategias y técnicas con profesionales de ventas en diversas industrias.
Curiosidades de la vida de Belfort
Un dato curioso de la vida de la vida de Belfort es que adquirió un yate lujoso llamado Nadinne, que en principio fue construido para la famosa Coco Chanel. Este sufrió un naufragio frente a Cerdeña en junio de 1996. Todos los tripulantes sobrevivieron, pero el barco se hundió.
El naufragio de Nadinne sucedió por la insistencia en salir al mar, cuando el capitán aconsejaba lo contrario por las condiciones climáticas. Y las advertencias eran ciertas, pues una ola rompió la escotilla del yate y así ocurrió el accidente.
Otro dato interesante es que Belfort invierte en
criptomonedas, pese a que al principio era escéptico respecto a ellas.
Actualmente, Belfort se dedica a dictar charlas y seminarios. Su discurso es acerca de la importancia de la ética en los negocios y el aprendizaje a partir de los errores. Aunque, suena paradójico que, según diversas fuentes, ha afirmado durante sus ponencias que el 95% de su negocio era legítimo.
No sabemos si Belfort está o no arrepentido de sus actos. Solo el tiempo lo dirá, pero lo cierto es que la historia de este personaje, tan llamativa y peculiar, nos puede hacer reflexionar sobre cómo el mercado financiero no solo permite generar riqueza, sino también estafar y a lo grande.
*Artículo editado y complementado por
@guillermowestreicher.
Entrevista a Jordan Belfort