El forward es un instrumento financiero que se utiliza en el mercado de divisas para fijar el precio de una transacción a plazo. Se trata de un acuerdo entre dos partes para comprar o vender una cantidad determinada de una divisa a un precio acordado en el momento del contrato, pero con la entrega y el pago posteriores a una fecha acordada en el futuro.
El forward es una herramienta muy útil para las empresas y los inversores que necesitan protegerse contra el riesgo de cambio, ya que les permite asegurar un tipo de cambio en el futuro para sus operaciones en moneda extranjera. También puede ser utilizado por inversores que buscan beneficiarse de las fluctuaciones del tipo de cambio, ya que pueden utilizar el forward para especular sobre la dirección futura del mercado de divisas.
Es importante tener en cuenta que el forward es un contrato privado, lo que significa que no se cotiza en una bolsa y no es un instrumento tan líquido como otros instrumentos financieros como las acciones o los bonos. Esto puede hacer que sea más difícil encontrar contrapartes dispuestas a negociar un forward y puede aumentar el costo de transacción.
Para entender cómo funciona el forward, es importante tener en cuenta que el tipo de cambio es el precio de una moneda en términos de otra. Por ejemplo, si el tipo de cambio entre el dólar estadounidense y el euro es de 1,20 dólares por euro, significa que se necesitan 1,20 dólares para comprar un euro. El tipo de cambio puede fluctuar debido a factores como la inflación, la tasa de interés, el crecimiento económico y el comercio internacional.
Ejemplos de utilización del forward
Aquí hay algunos ejemplos prácticos de cómo se puede utilizar el forward en la inversión:
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Protección contra el riesgo de cambio: Si una empresa estadounidense tiene un contrato para importar bienes de Europa en tres meses y está preocupada por el riesgo de que el tipo de cambio del euro se devalúe en ese momento, puede utilizar el forward para fijar el tipo de cambio en el momento del contrato y evitar el riesgo de pérdida.
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Especulación sobre el tipo de cambio: Si un inversor cree que el tipo de cambio del dólar estadounidense se apreciará en el futuro, puede utilizar el forward para comprar dólares a un precio acordado hoy y venderlos a un precio más alto en el futuro.
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Cobertura de inversiones en moneda extranjera: Si un inversor tiene una cartera de acciones en euros y está preocupado por el riesgo de que el tipo de cambio del euro se devalúe en el futuro, puede utilizar el forward para cubrirse contra el riesgo de cambio. El inversor puede hacer un contrato forward para vender euros a un tipo de cambio acordado en el momento del contrato y, a cambio, recibir dólares en la fecha de vencimiento. De esta manera, el inversor estaría protegido contra la pérdida de valor de su cartera de acciones debido a una depreciación del euro.
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Gestión de tesorería: Si una empresa necesita pagar una deuda en otra moneda en el futuro, puede utilizar el forward para asegurar un tipo de cambio en el momento del contrato y evitar el riesgo de que el tipo de cambio se mueva en su contra antes de tener que hacer el pago.
Es importante tener en cuenta que el forward es un contrato a plazo y no se puede liquidar antes de la fecha de vencimiento acordada. Esto significa que las dos partes están comprometidas a completar la transacción en la fecha de vencimiento, independientemente de cómo haya cambiado el tipo de cambio en el
mercado spot entre el momento del contrato y la fecha de vencimiento. Además, el forward puede ser un instrumento complejo y puede implicar ciertos riesgos, por lo que es importante comprender bien cómo funciona y tener en cuenta los factores que pueden afectar al precio del forward antes de utilizarlo como parte de su estrategia de inversión.
Elegir un forward
Aquí hay algunos factores a considerar al elegir el mejor forward para su inversión:
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Plazo: El plazo es el tiempo que transcurre desde el momento en que se hace el contrato hasta la fecha de vencimiento acordada. Es importante elegir un plazo adecuado para sus necesidades de inversión. Si necesitas protegerte contra el riesgo de cambio a corto plazo, es posible que utilices un forward a corto plazo. Si, por el contrario, estás buscando especular sobre el tipo de cambio a largo plazo, es posible que desees utilizar un forward a largo plazo.
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Tipo de cambio acordado: El tipo de cambio acordado es el precio de una moneda en términos de otra acordado en el contrato forward. Es importante elegir un tipo de cambio acordado que refleje tu expectativa sobre la dirección futura del tipo de cambio. Si crees que el tipo de cambio se apreciará, deberías elegir un tipo de cambio acordado más alto. Si, por el contrario, crees que el tipo de cambio se devaluará, deberías elegir un tipo de cambio acordado más bajo.
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Cantidad de la transacción: La cantidad de la transacción es la cantidad de divisa que se intercambiará en el momento del contrato. Es importante elegir una cantidad adecuada para tus necesidades de inversión. Si estás protegiendo una inversión en moneda extranjera, deberías elegir una cantidad que cubra esa inversión. Si, por el contrario, estás buscando especular sobre el tipo de cambio, deberías elegir una cantidad que refleje tu nivel de riesgo y tu capacidad de inversión.
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Contraparte: La contraparte es la otra parte del contrato forward. Es importante elegir una contraparte de confianza y solvente para minimizar el riesgo de impago.
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Comisiones y costes: Los costes y comisiones pueden afectar significativamente el precio del forward. Es importante comparar diferentes ofertas y elegir la que tenga los costes y comisiones más bajos.
Riesgos asociados al uso de forward
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Riesgo de cambio: Aunque el forward puede proporcionar protección contra el riesgo de cambio, también puede exponer a los inversores al riesgo de que el tipo de cambio se mueva en su contra entre el momento del contrato y la fecha de vencimiento.
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Riesgo de impago: El forward es un contrato privado entre dos partes y existe el riesgo de que una de las partes no cumpla con sus obligaciones financieras. Es importante elegir una contraparte de confianza y solvente para minimizar este riesgo.
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Riesgo de liquidez: El forward es un instrumento menos líquido que otros instrumentos financieros como las acciones o los bonos, lo que puede hacer que sea más difícil encontrar contrapartes dispuestas a negociar un forward y puede aumentar el coste de transacción.
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Riesgo de tipo de interés: El precio del forward está ajustado por el diferencial entre las tasas de interés de las dos monedas involucradas. Si el diferencial cambia entre el momento del contrato y la fecha de vencimiento, puede afectar el precio del forward
Cómo se calcula el precio de un forward
El precio de un forward se calcula utilizando el tipo de cambio actual y ajustándolo por el diferencial entre las tasas de interés de las dos monedas involucradas. A continuación se describen los pasos para calcular el precio de un forward:
- Determina el tipo de cambio spot: El tipo de cambio spot es el precio de una moneda en términos de otra en el mercado al contado. Se utiliza como base para calcular el precio del forward.
- Calcula el diferencial de tasas de interés: El diferencial de tasas de interés es la diferencia entre las tasas de interés de las dos monedas involucradas en el contrato forward. Por ejemplo, si la tasa de interés en dólares es del 2% y la tasa de interés en euros es del 1%, el diferencial de tasas de interés sería del 1%.
- Calcula el precio del forward: Una vez que se conoce el tipo de cambio spot y el diferencial de tasas de interés, se puede utilizar la siguiente fórmula para calcular el precio del forward:
Precio del forward = Tipo de cambio spot x (1 + Diferencial de tasas de interés x Plazo en años)
Por ejemplo, si el tipo de cambio spot entre el dólar y el euro es de 1,20 dólares por euro y el diferencial de tasas de interés es del 1%, el precio del forward para un plazo de un año sería de 1,20 dólares por euro x (1 + 1% x 1 año) = 1,2120 dólares por euro.