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El rival de Grifols denuncia el contrato de productos plasmáticos para surtir a España
Javier Ruiz-Tagle. Madrid 7:00 - 12/10/2024
CSL Behring recurre ante la justicia administrativa los pliegos valorados en 280 millones
El gigante australiano del plasma CSL Behring ha denunciado el contrato público promovido por el Ministerio Sanidad con el que se pretende surtir de productos hemoderivados a toda España por un valor de hasta 280 millones de euros. La farmacéutica, rival de Grifols (también de Takeda) en este procedimiento, envió un recurso ante el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales (TACRC) solicitando medidas cautelares contra el procedimiento al entender que incumple la Ley de Contratos Públicos española (LCSP).
El citado órgano judicial ha admitido la queja de CSL, si bien la decisión no afectará al reloj marcado por la administración para recibir las ofertas de los concurrentes. "Se resuelve la concesión de la medida cautelar consistente en suspender el procedimiento de contratación, sin que esta afecte al plazo de presentación de ofertas, de conformidad con lo establecido en los artículos 49 y 56 de la LCSP, de forma que según lo establecido en el artículo 57.3 del mismo cuerpo legal, será la resolución del recurso la que acuerde el levantamiento de la medida adoptada", explica el tribunal.
Este medio se ha puesto en contacto con la empresa australiana para conocer de primera mano las intenciones y motivos que tiene para tratar de detener el concurso. "CSL Behring ha recurrido el Concurso Nacional de Fraccionamiento de Plasma con el único objetivo de mejorar la competencia y el diseño del mismo, para que el concurso logre el objetivo de obtener el máximo rendimiento del plasma nacional para que un mayor volumen de productos esenciales, como los hemoderivados, lleguen a más pacientes en nuestro país. El recurso se enmarca en la normalidad de los procedimientos administrativos y la legislación vigente y se centra en mejorar un concurso que en si mismo es complejo pero creemos mejorable", dicen.
El contrato es de vital importancia tanto para España como para Grifols, quien se apuntaría el tanto a nivel económico, pero también a nivel estratégico. Hay que recordar que la Agencia Europea del Medicamento, así como su homóloga nacional, han considerado a los fármacos derivados del plasma como un bien estratégico y es por ello por lo que se debe alcanzar cierta independencia. En la actualidad, la realidad es bien distinta, ya que la mayoría del plasma que se utiliza en el Viejo Continente (y por tanto también en España) procede de exportaciones, sobre todo desde Estados Unidos.
El contrato es de vital importancia tanto para España como para Grifols, quien se apuntaría el tanto a nivel económico, pero también a nivel estratégico. Hay que recordar que la Agencia Europea del Medicamento, así como su homóloga nacional, han considerado a los fármacos derivados del plasma como un bien estratégico y es por ello por lo que se debe alcanzar cierta independencia. En la actualidad, la realidad es bien distinta, ya que la mayoría del plasma que se utiliza en el Viejo Continente (y por tanto también en España) procede de exportaciones, sobre todo desde Estados Unidos.
El contrato, cuyo plazo de presentación de ofertas se extendió hasta el día 11 a las 23:59 horas, aparece en un momento en el que el aspirante nacional, Grifols, está inmerso en un proceso de opa. Sin embargo, es posible que en esta operación el Gobierno de España tenga algo que decir. Cabe recordar que el Ejecutivo consideró a la firma de hemoderivados una empresa estratégica. La compañía ha llegado a alcanzar cuotas en su mercado principal que rondan el 18% y, precisamente, solo fue superado por Takeda (21% a través de Shire) y la demandante CSL (25%).
Grifols también tiene deberes a nivel europeo. La Alianza de Medicamentos Críticos seleccionó el pasado mes de abril a 17 empresas sanitarias españolas para que sean garantes del suministro de estos fármacos esenciales, entre las que se encuentra la empresa catalana. También están en esa lista firmas como Rovi, por las heparinas, o Galenicum, por el paracetamol.
