España afronta vencimientos de deuda de 400.000 millones y se acerca a la insolvencia, según Freemarket
Cerrará el año con un déficit del 8,3% y el Gobierno tendrá que asumir parte de la deuda de las CC.AA. para evitar su bancarrota
MADRID, 15 Nov. (EUROPA PRESS) -
España tendrá que hacer frente a vencimientos de deuda pública y privada de unos 400.000 millones de euros en 2012 inmersa en una recesión económica desde los primeros compases de la nueva legislatura, lo que le aproximará a una posible insolvencia, si es que el euro no estalla antes, según el último estudio de situación y perspectivas económicas de Freemarket, titulado 'España en tiempo de descuento'.
Conjurar estos pronósticos y lograr refinanciar estas cifras exigirá al Gobierno resultante de las elecciones del 20N combatir unas cifras macroeconómicas "explosivas" y ganarse la confianza de los mercados.
Según las previsiones de Freemarket, el PIB crecerá un 0,5% en 2011, casi un punto por debajo de la previsión del Gobierno, pero que no lo volverá a hacer hasta el final de la legislatura, tras entrar en recesión en 2012, con un descenso de entre el 0,8% y el 1,5% en el conjunto del año.
La tasa de paro se situará en torno al 22% en 2011 y no disminuirá a corto plazo, mientras que el déficit de las administraciones, lastrado por los saldos negativos de las administraciones públicas, alcanzará el 8,3% al término de este año, superando en más de dos puntos el nivel exigido por Bruselas (6%).
En este punto, el informe recalca que hay deuda de las comunidades en forma de avales a terceros, operaciones de leasing o en financiación de empresas públicas que no se contabiliza en las cuentas oficiales, pero que antes o después deberá ser incluida en la Contabilidad Nacional.
Más aún, señala que la deuda de estas administraciones es tan insostenible que el gabinete entrante "se verá forzado a asumir una parte sustancial de la deuda autonómica para evitar su bancarrota".
Este contexto estará además sometido a un 'stress' adicional, la recapitalización de la banca antes del 30 de junio de 2012, que previsiblemente conducirá a una mayor restricción del crédito. Además, las necesidades de financiación exterior podrían llevar al Gobierno a "recurrir a los organismos internacionales" (aunque no habla de rescate) y a "nacionalizar de manera temporal un número significativo de instituciones crediticias".
Así pues, "España no está fuera de la zona de peligro del euro, sino inmersa en ella" y la situación no admite "gradualismos", según el informe, que apuesta por aplicar "una terapia de choque para generar credibilidad".
AUSTERIDAD Y REFORMA LABORAL.
En primer lugar, el informe recomienda un programa de austeridad fiscal que reduzca el déficit de las administraciones y una reducción de los costes internos, fundamentalmente los laborales, para aumentar la competitividad, así como un paquete de reformas estructurales para elevar el potencial de crecimiento y la productividad de la economía.
En este marco, considera "esencial" poner freno al gasto en sanidad con la introducción del copago, junto a la reducción de la cartera de servicios sanitarios y la introducción de mayor competencia en el modelo de salud pública.
Además, apuesta por reducir el gasto en personal en la administración y recortar la inversión de pública en infraestructuras, además de "reformar" el sistema de protección por desempleo, manteniendo la cuantía de la prestación, pero reduciendo a la mitad su duración.
Para reducir el déficit, Freemarket también llama a imponer "límites muy rígidos" a la capacidad de las autonomías y ayuntamientos de endeudarse.
Este recetario también habla de una posible reforma laboral asentada en la desvinculación de salarios e inflación, la preferencia de los convenios colectivos de empresa, reducción del coste del despido y la reducción de las cuotas empresariales.
A modo de epílogo, el informe señala que estas previsiones "se vendrían abajo si el euro estalla", una posibilidad que no descarta en tanto que la quita del 50% de la deuda griega "no resolverá el problema de sus sostenibilidad", pues situaría la ratio de deuda/PIB en el 120% a finales de 2020, y el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF) "carece de capacidad operativa real".
A ello, se sumarán las "repercusiones alarmantes" que podrían tener sobre la circulación del crédito a nivel europeo las exigencias de recapitalización planteadas para la banca. En esta situación, Freemarket encomienda la salida de la crisis a que el BCE adopte una política monetaria más flexible.