Yo creo que es buena señal, que el abogado haya aceptado ir a juicio y no te afecta la nueva legislación, por lo que pleitear no es temerario y el juez, así lo verá.
Los tribunales y jueces en lo laboral están para eso, para proteger a la parte más débil que es el trabajador y en este caso, la improcedencia no es un regalo, sino la realidad.
Cuidado en los acuerdos, porque la justicia no está necesariamente en el punto medio. Salomón demostró que al niño, no se le podía partir a la mitad.
Por eso, aunque sea duro y se pase mal, es necesario acudir al juicio, no por el dinero, sino por la dignidad, que vale más.
"Es mejor que te pongan una vez la cara roja, que te la pongan siempre amarilla".
Esto por supuesto, son opiniones personales, que no pueden sustituir tu decisión, que también puede estar bien fundamentada en la decisión de no acudir, pero lo que está claro es que no te puedes sentir culpable de nada, en este caso, ni ir al juicio con complejo de inferioridad.
Un saludo