Los gestores de fondos 'estrella' resultados en el Ibex hasta abril
Desde que estalló la crisis financiera, los fondos de inversión han sido uno de los productos que más han sufrido el desinterés de los partícipes y han perdido la mitad de sus activos bajo gestión (de 238.000 millones euros a finales de 2007 han pasado a 127.000 millones de euros a cierre de 2011). En este periodo, solo los gestores que han realizado una gestión activa y han aportado valor añadido han logrado capear el temporal y obtener rentabilidades positivas, e incluso aumentar el patrimonio de sus fondos. En este selecto grupo se encuentran nombres tan conocidos como Francisco García Paramés, Gonzalo Lardiés, José Ramón Iturriaga, Carlos Cerezo… ¿Pero cómo les ha ido este cuatrimestre en el que la volatilidad ha dominado los mercados?
La respuesta no es homogénea y dependiendo de los activos en los que inviertan sus productos las cifras varían pero, en general, han logrado mantener sus carteras a flote.
Los productos que peor parados salen son los que invierten en bolsa española, ya que el Ibex cayó en ese periodo un 19,6%. En ese sentido, José Ramón Iturriaga, gestor de Okavango Delta, de Abante, asegura que lo importante en momentos como el actual es “ser consecuente con la visión de mercado que se tenga y no dejarse llevar por momentos de pánico”.
Okavango ha perdido un 13,9% en el primer cuatrimestre, según los datos de Inverco, pero Iturriaga asegura que hay que mirar a largo plazo. Su estrategia es jugar a la normalización de las primas de riesgo y al crecimiento de las principales economías. Considera que la clave está en el ‘stock picking’ de las compañías y que el miedo que tiene el mercado a todo lo español ha producido una dispersión en las valoraciones, que no se corresponden con la realidad. Una circunstancia que es aún más evidente en las pequeñas y medianas compañías, donde el fondo tiene invertido el 80% de los activos. "Quien sepa ver cuáles son las compañías que de verdad ofrecen valor pese al entorno, tendrá mucho ganado cuando las cosas se estabilicen".
Precisamente, la ponderación de la renta variable ha sido la clave de que BPA Fondo Ibérico Acciones, gestionado por Gonzalo Lardiés, haya perdido solo un 5,33% en el primer cuatrimestre, pese a que invierte en bolsa española. Según explica Lardiés, durante ese periodo ha estado bastante posicionado en liquidez “aunque en las últimas dos semanas la he reducido a la espera de que la situación financiera mejore en algún momento”.
En lo que respecta a las compañías, señala también que hay que ser selectivo y no generalizar, ya que “ni todas las empresas que tienen su negocio en España van mal -pone como ejemplo a Jazztel, que en el año acumula una subida del 18,8% y es una de las mejores compañías del mercado-, ni todas las que tienen su negocio diversificado van bien, ya que te puedes encontrar con imprevistos, como ha sucedido con Repsol”, afirma. No obstante, añade que procura evitar compañías que estén muy expuestas al ciclo interno, como la banca.
También García Paramés ha conseguido con Bestinver Bolsa caer bastante menos que el Ibex (un 3,6%), gracias a la combinación de acciones en su cartera, que a finales del primer trimestre estaba compuesta en un 52% por títulos españoles, siendo las mayores posiciones nacionales Ferrovial y Repsol, según consta en la CNMV.
Por su parte, Belgravia Épsilon, gestionado por Carlos Cerezo, también puede sacar pecho, ya que ha ganado un 2,32%. Desde la gestora, apuntan que están totalmente invertidos en renta variable, aunque no española, porque “tiene demasiados riesgos políticos y, además, no es nuestra especialidad”, comenta Cristina Solinís, relación con inversores de Belgravia. En su opinión, las buenas rentabilidades se deben a que solo invierten en compañías de elevada calidad, con un balance saneado, crecimiento estructural, un equipo directivo de calidad y, preferiblemente, de tamaño mediano o grande.
Mejores resultados han obtenido los gestores de fondos con mayor flexibilidad a la hora de gestionar o los que están vinculados a la renta fija. Es el caso de Renta 4 Pegasus, el fondo de retorno absoluto de Miguel Jiménez, que se ha revalorizado un 4,16%.
Jiménez señala que gran parte de sus beneficios se deben a las compras que realizaron a finales de 2011. “En noviembre, adquirimos bastante riesgo España, tanto en deuda pública, como en renta fija corporativa de entidades españolas, y cuando la situación se ha puesto peor, hemos vendido. Estas posiciones representaban el 70% del patrimonio, y ahora no tenemos nada de deuda soberana y solo un 35% en emisiones corporativas”, expone.
Además, invirtieron en dólares. “Pensamos que si la situación empeoraba, el euro caería, y era una forma de cubrirnos”. De cara a la segunda parte del año, Jiménez espera poder asumir algo más de riesgo en la cartera.