PEQUEÑO NICOLÁS: !Eres mi Héroe!

Pero cómo va a ser un fenómeno el lastre que han soltado las cloacas del Estado. Si no lo quieren los que trabajan con la porquería, quién lo puede querer.

Francisco Nicolás habría actuado bajo una trama organizada a nivel estatal y autonómico
La Policía sospecha de que hay más personas implicadas en las estafas

El juez prorroga un mes más el secreto de sumario
Asuntos Interno se ha hecho cargo de la operación

La Policía de Asuntos Internos, sección del cuerpo que está investigando la presunta estafa corrupta de Francisco Nicolás, está convencida de que el joven trabajó en el marco de una organización que operaba a nivel estatal y autonómico, por lo que el misterioso adolescente no actuaba solo.
El juez instructor de la causa, que se hizo pública después de que el pequeño Nicolás fuera detenido el pasado 14 de octubre, también comparte esta teoría, por lo que ha ordenado una prórroga de un mes más del secreto de sumario, según ha informado este jueves El Confidencial.

Esta trama habría puesto en contacto a Francisco Nicolás con empresarios que buscaban ayuda de la Administración. El joven, con falsas promesas, les pedía una elevada cantidad de dinero por llevar a cabo las gestiones ante sus conocidos en el Ayuntamiento de Madrid o dentro de la burocracia de la Comunidad Autónoma.
Pero estas intervenciones nunca llegaba a buen puerto, hecho que no implicaba que ni Francisco Nicolás ni sus supuestos compañeros en la trama estafadora devolvieran las cantidades adelantadas por los empresarios, que llegaron a pagar hasta un total de 65.000, según han confirmado los investigadores.

Ahora, la Policía está tratando de identificar a todas las personas que participaron es estos chantajes y estafas, que pudieron alcanzar los 200.000 euros. Este es el caso de un empresario de la capital, que fue estafado después de llegar a reunirse con el secretario de Estado de Comercio, Jaime García Legaz, en un encuentro en el que Francisco Nicolás estuvo presente.
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El 'Pequeño Nicolás', la fuente de Marhuenda en el 'caso Pujol'

El joven pasaba información al director de 'La Razón' sobre el ex president de la Generalitat

El rotativo colocó en portada una información que Francisco Nicolás les hizo llegar

Un saludo

Hummm, seguramente por su juventud no conocía el truco que utilizaba aquel bedel de universidad que vendía aprobados a cambio de una comisión.

Psicopatología del pequeño Nicolas.

Alberto Soler Montagud | Médico y escritor

Como profesional de la salud, podría aventurarme y hacer un diagnostico clínico del pequeño Fran, pero no lo haré por carecer de datos suficientes para emitir un juicio. No obstante sí que aprecio en nuestro hombre una serie de rasgos compatibles con lo que Charles W. Dithrich Describió como “pseudologia fantástica”, un síndrome que describe a ciertos mentirosos patológicos que, a partir de situaciones reales, las transforman tergiversando lo que los demás llegan a percibir. Es algo frecuente en quienes crean falsos perfiles en las redes sociales para ofrecer opiniones que son incapaces de asumir desde su verdadera identidad. No obstante, en el caso del pequeño Nicolás, además de crear falsas identidades, nos encontramos también con una presunta megalomanía asociada a un narcisismo y un complejo de inferioridad.

Según Dithrich, las mentiras siempre son intencionales aunque también pueden manifestarse como respuestas automáticas, compulsivas e involuntarias que llegan a creer quienes las profieren. Así, quien sufre una pseudología fantástica investiría de realidad sus fantasías dramatizando y magnificando unos pequeños retazos de verdad que hinchan y hacen creíbles.

Un excelente caldo de cultivo para explicar lo sucedido con el fenómeno Nicolás (y otros tantos nicolases como deben pulular por los mentideros sociopolíticos financieros y empresariales) es lo habitual que se vuelto la mentira en nuestro entramado social, una práctica que, junto a la corrupción, se ejerce con más impunidad cuanto mayor es el poder que se detenta y promueve reacciones de rechazo por parte de una ciudadanía que, por lo general las espera y hasta las perdona siempre que ellos puedan también mentir y defraudar, eso sí, a pequeña escala y con garantías de que no serán pillados en sus ridículos delitos.

Pero, volviendo al tema de este artículo, no quisiera concluirlo sin afirmar que nunca pondría la mano en el fuego afirmando que Francisco Nicolás Gómez Iglesias sufre una pseudología fantástica asociada a una megalomanía con rasgos de personalidad narcisista, entre otras cosas porque mi capacidad de asombro no conoce límites y porque, hoy por hoy, soy incapaz de negar que Le Petit Nicolás tutee y llame “jose” al expresidentes Aznar, haya asesorado a Soraya Sáez de Santamaría en el asiento de atrás de su coche oficial o sea un espía charlie del CNI por mas que los expertos digan que el término “charlie” no existe en el argot de los servicios de inteligencia.

Un saludo

Me parece que los expertos no se enteran de nada. El mensaje es muy sencillo (aunque también pueda ser una fabulación): si él es Charlie, nos falta conocer a sus ángeles.