En mi comentario anterior, ya advertía que, en bastante puntos estoy de acuerdo con usted, en absoluto.
Son ciertas y están presentes en las sociedades actuales algunos obstáculos que nosotros mismos nos auto imponemos. Si, es cierto.
Como bien dice usted, comunicar, rasgando el papel con tinta (hoy hoy lo hagamos con el click de una tecla), no es sencillo... ¡No señor!¡Nada fácil! Usted, sin embargo comunica bien, lo que ocurre es que resulta inviable resumir... y, eso usted, también lo hace bien... dicho esto e, intentando ser breve le daré mi opinión, personal, que, queda abierta a toda crítica que, será aceptada.
En mi opinión nos hallamos inmersos en una revolución, hace ya más de treinta años, sin percatarnos de ello por falta de perspectiva y, si me lo permite usaré un símil simplón, para aclarar mi idea; supongamos una Plaza Mayor de cualquier ciudad de España y un gentío que abarrota la plaza... dos personas se agreden y forman un pequeño tumulto... de las veinte mil personas que hay en la plaza, se han enterado tan solo, las cuarenta o cincuenta que han estado próximas al suceso; en consecuencia la inmensa mayoría lo negarán convencidos...¡Pero...! Un señor, desde el balcón de su vivienda ve toda la plaza y naturalmente, ve la reyerta, con claridad meridiana... Ocurre que unos días después este señor se encuentra con un amigo que si estuvo en el "sarao" que niega los hechos y, ambos discuten ¡Si ni siquiera has estado allí! ¡¿Me lo vas a decir a mí... que, estuve en la Plaza Mayor?!
Esa es la cuestión, el modelo social existente no concuerda con las demandas de los ciudadanos ¡Cierto! El modelo económico no está en consonancia con lo esperado por los ciudadanos...¡Más cierto! ¿Existe caos tecnológico? ¡Si! ¿Son suficientes los recursos para los habitantes del globo? ¡Sí! Y así llegaríamos en nuestro particular rincón de pensar a cien mil más esquizofrénicas contrariedades... La sociedad, tiene que rebajar sus exigencias... no le quepa ninguna duda y quizás, halla que releer (no digo implantar, si, buscar en ello algo de inspiración), la ley de vagos y maleantes del régimen de autarquía de Franco que, indeseable sí; pero no equivocado en su totalidad, solo en la mayoría. Habría que poner a trabajar a todo aquel que porque tiene dinero no lo necesita y, también a todo aquel que quiere vivir del sueño filosófico del "dolce far niente".
¿Es de justicia que si los trabajadores (los de cuello blanco y los de mono azul) han de cotizar 35 años, para obtener una pensión de jubilación y, además han de cumplir unos requisitos... los que sean, para cobrar una pensión... ¿Se puede a quien ha elegido el mundo de las drogas, conceder una pensión contributiva del 80% del minímo del gilipollas que ha estado manteniendo el país 35 años? No opino que, cada cual obtenga sus conclusiones.
Lamento haberme extendido tanto, sin haber finalizado esta particular consideración de la sociedad actual cuyo camino hacia "el remedio", no pasa por los extremos (ni el sobrevendido de la izquierda ni, tampoco, el sobrecomprado de la derecha) y, aclaro... ¡No milito en ningún partido...! Soy el único dueño de mi voto... mi voto es mío...
Don Claudio Vargas, le pido con toda sinceridad, mis más sinceras disculpas, por el tiempo que le haya hecho perder y crece en mí un cierto arrepentimiento de lo escrito en este momento; pero... ¡A lo echo, solo queda poner pecho y oído... escuchar es de vital importancia! Hoy, nadie escucha... todo el mundo interpreta libremente lo que el interlocutor dice sin preguntar y aún más grave es que cuando hace unos quince años, acudía a mi banco y les explicaba como tenían que hacer para poner una orden de venta o de compra, en mis ingenuos primeros pasos lleno de conocimiento teórico... al intentar explicarme... la respuesta era siempre la misma ¡Ni lo sé... ni tengo interés alguno en saberlo... esto es lo que hace la empresa...! Desde entonces nada ha cambiado a mejor ¡No! Todo lo contrario. Y es ahí donde está el meollo de la cuestión que, con los medios tecnológicos con los que contamos en una compañía de seguros, dos personas son incapaces de emitir 150 pólizas en un día, siendo todas estándar; en 1991 y dispongo de datos ya la empresa informatizada, aunque se pactaban clausulas concretas y según el número y las coberturas los precios eran diferentes, las garantías eran distintas. Hoy con pólizas iguales, le agradecería me indicase a quien tuviere la información si son capaces de tal hazaña. Esa es la falta de productividad... la auténtica ruina del sistema, porque la revolución tecnológica no ha hecho más que empezar y todavía ha de cambiar los usos sociales para implantarse.
Una saludo a todos... me llaman... buenas noches... felices sueños y el mayor de los respetos junto, con la mayor ya afectuosa de mis consideraciones a todos los miembros de este foro.