Hola.
Yo no estoy de acuerdo con bdl333, aunque tiene razón en los datos que ofrece su valoración no coincide con la mía.
En relación a Alemania, y esot ya no es en relación al post de bdl333, estas últimas semanas, según el gobierno español va fracasando en su estrategia económica (si es que la tiene) los medios de comunicación conservadores han pasado de alabar a Alemania a repartir críticas a diestro y siniestro. Recuerdo haber oido en radio y tv a los comentaristas conservadores poco menos que agradeciendo a Alemania que pusiera orden en España porque Zapatero y sus olíticas nos llevaban al desastre (así fue, por cierto). Para esos comentaristas y políticos conservadores Alemania, al no prestarnos dinero, era el único contrapeso posible a un gobierno socialista manirroto en lo económico y blando en sus concesiones a los nacionalistas diversos. Alemania nos iba a obligar a acabar con los derroches y a poner en vereda el estado autonómico que destruye España y malgasta su dinero.
Bueno, pues ya tenemos a Rajoy y lo tenemos hace meses. Aunque Rajoy sabía perfectamente que el déficit estaba disparado, aunque sabía que los presupuestos no podían esperar a ver si Arenas ganaba las elecciones andaluzas y a pesar de que Rajoy sabía hacía más de un año lo que iba a encontrar, aún y así nos dijo que todo esto le había pillado de sorpresa, que donde dijo digo decía Diego y que arriba los impuestos como buen socialista. ¿Y esas comunidades arruinadas que Alemania nos iba a obligar a intervenir? Ay, amigos, eso pasó a la historia. Valencia, donde la situación es desesperada, ni se toca, Cataluña mucho menos...y Madrid...bueno, de Madrid salieron facturas de los cajones en tal cantidad que el déficit del estado pegó un estirón. Pero, ¿no había que intervenir en ese estado autonómico que disgregaba España y disparaba el déficit? ¿No era Zapatero el blando que necesitaba el empujón alemán para poner orden en este país? ¿No había que despedir miles de funcionarios, cerrar todas las empresas públicas, privatizar todo y dada la poca seriedad de los socialistas sería Merkel quien, simplemente no prestandonos dinero, forzaría a estos sociatas a poner orden? Bueno, ya no está Zapatero, es Rajoy en señor de la mayoría absoluta. Por no necesitar, no necesita ni a Merkel porque tiene mayoría absoluta. Pero ese programa ultraliberal que los comentaristas y políticos conservadores soñaban que Merkel nos impondría ha desaparecido y lo ha hecho justo cuando Rajoy tiene en sus manos la posibilidad de llevarlo adelante. Ahora resulta que Alemania, antes seria ahora es inflexible, antes austera ahora nos va a hundir con su tacañería, antes estricta con la contabilidad ahora ridícula con su exigencia de que Esperanza Aguirre deje de esconder facturas en los cajones, etc, etc, etc. Y junto a la desparación del suelo ultraliberal aparecen las acusaciones a Alemania. Hasta ayer, es decir, hasta que ganó Rajoy, la idea preferida de los conservadores era que las deudas se pagan y si te has endeudado más de lo debido es tu problema, de perdonar nada porque se incurría en un alto riesgo moral de que otros tampoco se hagan responsables de sus deudas. Pero los medios de comunicación conservadores han reorientado el tiro: ahora hablan como los gobiernos sudamericanos tipo Argentina que no hicieron frente a su deuda: la culpa es de los acreedores, que prestaron para su beneficio y lo que nos prestaron al fin y al cabo se lo llevaron, que no se quejen. Eso son excusas de mal pagador, o lo eran hasta que Rajoy ganó las elecciones. Para mi lo siguen siendo y me sorprende mucho ver cómo personas inteligentes han reorientado su discurso sobre Alemania en consonancia con las directrices ideológicas que desde los medios afines al gobierno se intentan propagar, es justo lo contrario de lo que decían hasta ayer. Nada ha cambiado realmente: España sigue derrochando dinero, las autonomías de todo signo político y muchos ayuntamientos gastan lo que no tienen, los impuestos ahogan a la clase media y el crédito no fluye. Y Alemania sigue diciendo, a Rajoy como a Zapatero, que no hay más dinero alemán para derrochar. Lo que pasa es que Rajoy ha descubiero que una cosa es predicar y otra dar trigo. Ni una sola comunidad ha sido intervenida, ni una sola empresa pública grande ha sido liquidada, apenas nada del programa liberal del PP ha sido aplicado así que seguimos gastando mucho más de lo que ingresamos, los alemanes saben que España no es viable en esas condiciones y nos lo dicen igual que antes a Zapatero. España no es Uganda, cierto, así que si las empresas españolas o los múltiles gobiernos que padecemos pidieron dinero a Alemania para construir AVEs, aeropuertos o lo que sea, habrá que devolver el dinero y no empezar a culpar a Alemania de mirar por sus intereses y empezar a mirar por los nuestros. ¿Ahora resulta que Rubalcaba tiene razón y nos hace falta gastar aún más para impulsar el crecimiento? ¿Pero no era ese el plan E de Zapataro que gastó miles de millones en abrir y cerrar zanjas en las aceras? Yo pienso lo mismo que pensaba antes: Alemania es un acreedor al que encima tenemos que pedirle más dinero y veo a mi gobierno actuando como los demagogos sudamericanos, sacando pecho, acusando al que nos presta el dinero de usurero y haciendo lo que alguno calificaría de chantaje. A mí se me ocurre una idea mejor: no gastar lo que no tenemos, no pedir nada a nadie y pagar nuestras deudas. Filosofar sobre lo que los acreedores ganas cuando nos prestan es perder el tiempo o de ir preparando alguna quita, los acreedores prestan para ganar, como hago yo cuando le presto a mi banco o invierto. Solo me falta escuchar que España es presa de los especuladores, que ya empiezo a oir en las radios y tv de los conservadores lo mismo que leía en Público: hay una conspiración contra el euro. Vaya sorpresa, ¿es que antes no tenía el euro enemigos? En definitiva, que Alemania por supuesto presta para ganar, auer, hoy y mañana (como hace España) y que por tanto el mejor camino es no deber nada a nadie y vivir con lo que se tiene y eso hay que decirlo en la oposición pero hay que hacerlo en el gobierno, que es justo lo que no se está haciendo.