Hace unos días, leía con asombro en el foro de Rankia, ciertos comentarios respecto de los “supuestos” estafados de S-trade.
Como se ve, a pesar que tal empresa (esto es trasladable a cualquier chiringuito) ha desaparecido del mapa, no da respuesta del paradero del dinero y ni siquiera coge el teléfono a sus clientes, se transmiten de forma anónima unos mensajes de tranquilidad, cuando la común experiencia, dice que lo lógico es que cualquier persona, como poco, se preocupe.
Curiosamente esto mismo pasó con los "inversores" de Lucra-Lucra y Es-Dinero. y de momento, los responsables de estas entidades, se encuentran en prisión provisional...
Además, en la misma, se tergiversa de forma flagrante la realidad, pues en la vía civil, como bien se señala, en estos casos es inútil, habida cuenta de que la empresa no tiene bienes para responder de sus obligaciones (motivos por los que nadie aconsejaría interponer una demanda civil), extremo que hace aconsejable, para con estos casos, acudir a la vía penal, toda vez que nada impide a sus clientes promover la acción punitiva contra los responsables del chiringuito.
En esta misma línea, tal y como certeramente señalan varios intervinientes en la conversación, el tiempo de admisión de tales asuntos en los Juzgados, suele oscilar entre las 3 semanas o los 4 meses por término medio...
Considerando que en la práctica Agosto es inhábil, en el mejor de los casos el asunto empezaría a sustanciarse a partir de principios de octubre o finales de noviembre.
Acotado lo anterior, conviene destacar que internet, por regla general, es anónimo y nadie sabe quien es la persona que se encuentra detrás de cada ordenador...
En todo caso, desde mi experiencia, no puedo más que recomendar a los afectados que se organicen cuanto antes, dado que cada día que pasa, las posibilidades de recuperar algo de dinero, descienden exponencialmente....
Finalmente, abordando lo referente a los problemas de los bancos, desde mi experiencia, puedo asegurar que es un tema recurrente en todos los chiringuitos financieros cuando desaparecen y que de hecho, con dichas excusas (esperanzas de devolver el dinero en unos meses) consiguen que muchos inversores se retracten, de sus denuncias (extremo que complica mucho la causa) y desistan de sus acciones.
Como se puede ver en el caso de este otro chiringuito (alzicapital), para mi asombro, el asunto se va enrareciendo cada vez más, con supuestos secuestros, retractaciones inesperadas, críticas a la labor de los investigadores, etcétera, eso sí, el dinero sigue sin aparecer.
Quizá agitar el miedo humano sea aceptable, pero es una práctica despreciable cuando se hace con los que previamente se ha timado.
De allí el título de este post, el Síndrome de Estocolmo.