La reforma fiscal del año 2015 pretende añadir una tasa de salida o “Exit TAX” para combatir el fraude tributario, pero ¿qué es realmente el "exit tax"? La tasa de salida se aplicará a los contribuyentes del IRPF que decidan trasladar su residencia fiscal a otro país. El nuevo cambio de la normativa se engloba en el artículo 95.bis del IRPF.
¿En qué consiste el "Exit Tax"?
La tasa de salida o "exit tax", es el impuesto que la hacienda pública impondrá a partir del 2015 a las plusvalías ficticias y futuras si la empresa traslada su sede fiscal fuera de España.
Cuando una persona pierda la condición de contribuyente por el cambio de residencia, a un país fuera de la UE, deberá integrar en la base del ahorro las ganancias patrimoniales consideradas por diferencia entre el valor de mercado de las acciones o participaciones y su adquisición. El contribuyente debe haber tenido las acciones o participaciones durante al menos 10 de los 15 periodos impositivos anteriores
¿A quién afecta el "Exit Tax"?
Este nuevo impuesto afectará a las personas físicas propietarias de más del 25% de una empresa que esté valorada en más de un millón de euros o el 5% si supera los cuatro millones de euros, y que haya sido residente en España durante al menos diez de los últimos quince años. Dicho en otras palabras, emprendedores y startups.