Cataratas Victoria
Una imagen vale más que mil palabras y a pesar de la extraordinaria belleza de ésta, bien puede servir para utilizarla en la metáfora de hoy. Cada gota de agua que inexorablemente cae hacia el precipicio, es un inversor o ahorrador, buscando rentabilidades a su patrimonio. La mayoría están contra las cuerdas, sólo tenemos que ver el patrimonio en depósitos bancarios pese a sus rentabilidades. El desconocimiento y riesgo percibido les inhabilita para buscar alternativas viables con las que hacer crecer sus ahorros.
Mi opinión respecto al escenario macro en general la sigo sosteniendo. Debemos acostumbrarnos en el mejor de los casos a un crecimiento previsiblemente bajo y sostenido en tiempo, con tipos de interés en la misma medida. Ahora puede que no tenga mucho mérito, pero si llevas transmitiendo la misma opinión alrededor de seis años, la cosa cambia ligeramente.
Según datos publicados por Morningstar, el mayor fondo comercializado en la bolsa española con 340.000 participes es ING Direct Fondo Naranja Ibex 35, indexado o de gestión pasiva. El retorno anualizado a diez años es del 1,62% y está en la media de rentabilidad dentro de su categoría.
Sigo perplejo viendo como la mediocridad obtiene recompensa tan alegremente en este dichoso país y ya no hablamos de los fondos con retornos negativos, eso ya es de " Aurora Boreal ", un mal día lo tenemos todos. Muchos malos días, transmiten incompetencia.
Entiendo perfectamente que un ahorrador pueda sentir miedo a perder parte de su patrimonio si invierte en renta variable, pero no queda otra. Una inflación baja, no estimula el crecimiento y por lo tanto la economía se mantiene en un crecimiento bajo, pensando en el mejor de los casos o contrae ante cualquier elemento que transmita inestibilidad y eso hace muy difícil que los tipos suban. Una solución que he propuesto muy a menudo, es elaborar nuestro " fondo casero " con estrategias compradoras en valores y vender índice como cobertura constante, un spread. Así eliminamos parte de la volatilidad implícita del mercado y reducimos riesgo. Como el papel sostiene todo, vayamos con un ejemplo real:
Las características de la cartera " Mortadelo y Filemón " las pueden ver si así lo desean en mi blog personal. La rentabilidad es más elevada ya que esta basada en el modelo " gestión activa " y se eliminarían coberturas sobre el índice en determinados niveles. Como no he querido ser ventajista, ahí tienen la rentabilidad acumulada a nueve meses manteniendo la composición inicial. Es indistinto, siempre prevalece la " idea ". Para tener una ligera noción, la pérdida máxima desde su composición inicial fue de un 0,65 % y una rentabilidad máxima del 16 % ambas de memoria. Unos ratios, como poco, curiosos.
Además obtendríamos algunas ventajas frente a los fondos:
- Ahorro del 2% de media por comisiones de suscripción y gestión. Por cada 10.000 euros invertidos en un fondo pagaríamos 200 euros. Si compramos valores por el mismo importe ya estaríamos ganando dinero.
- Ahorro de la comisión de éxito, si la tiene.
- Plan fiscal a medida. Puesto que podemos diferir minusvalías o plusvalías en función de las necesidades fiscales del ahorrador.
- Si somos los administradores del patrimonio o por lo menos de una parte, siempre estaremos alineados con nuestros intereses, sin depender de una industria que pocas veces vende un buen producto a sus clientes, con honrosas excepciones, por su puesto.
Según el perfil del ahorrador que uno pueda tener, la arquitectura de nuestra cartera la podemos administrar con acciones de crecimiento, dividendos, valor, fuerza relativa, etc... al gusto. Como cada año, pronto expondré alguna cartera para su seguimiento en tiempo real.
Un saludo y buen mercado
Sólo sé que no sé nada