Costa Rica vs Uruguay nos muestra lo que es capaz de hacer el juego limpio contra oponentes que empujaban el juego sucio.
Uruguay es un país muy respetable, su población, su presidente, su afición también, pero sus jugadores no jugaron a la altura de ese respeto. No me gusta decir esto, pero así fue. En la cancha jugaron sucio, al porrazo antideportivo, con un árbitro alemán Felix Byrch que en el primer tiempo pareció estar del lado de Uruguay y cometió actos de incompetencia absoluta que dejan muy mal parados a los alemanes, al perdonar ese juego sucio de porrazos. Y quizás esto es lo que causó el shock del mundial.
Un primer tiempo de juego sucio
La escuadra tricolor de Costa Rica entró con nerviosismo a la cancha (se les veía en la cara), esperando dar lo mejor, hacer un buen juego, pero con la inseguridad de ser la carne del cañón del grupo D, el grupo de la muerte. Tenían en contra el hecho de que la afición costarricense era minoría en el estadio.
Empiezan los uruguayos a ver a una Costa Rica que controlaba el balón, que jugó técnicamente aceptable, y con con esa arrogancia de que por ser centroamericanos debían ser los indios venidos a menos de América, empezaron el juego a punta de grosería en la cual el árbitro se hacía el de la vista gorda, se hacía el tonto frente a las faltas uruguayas. Los uruguayos llevaron la actitud antideportiva al usar una mano para evitar un gol, algo que habría sido penal contra Uruguay, pero Byrch mostró su incompetencia y su falta de amor por la disciplina alemana. Y luego lo harían de nuevo al agarrar a un jugador costarricence y luego empujarle un jugador y el portero para que no anotara, algo que habría sido un clarísimo penal. Y la fruta sobre el pastel se coloca cuando Byrch pita un penal contra Costa Rica. Era claro para la afición costarricense que el árbitro alemán, o era incompetente, o estaba vendido. Es extraño que, viniendo de un arbitro alemán, se mire semejante estupidez arbitral.
El síndrome Denver
Recordamos cuando vinieron los juegos de las eliminatorias, y Panamá se perfilaba para ir al mundial y dejar atrás a México. Pero se inclinó la balanza hacia México que tiene más población. Las teorías de conspiración dicen que la FIFA empujaba con el arbitraje los resultados de los partidos, para hacer ganar a los países con más población, porque podrían representar más ventas para la FIFA. Es decir, la teoría conspirativa decía que la FIFA, y no la incompetencia de los árbitros era la que causaba todo el desarreglo. El caso de la jugada sucia contra Costa Rica en Denver, donde hubo irregularidades que impidieron la cancelación del partido entre Costa Rica y EUA, que resulta en la derrota de Costa Rica. ¿Sería corrupción en la FIFA?
Al final, el tema era que al inclinar la balanza y hacer las cosas difíciles para un equipo, hasta humillarlo, se le podría desmoralizar lo suficiente. Humillaron a Costa Rica en Denver, y eso trajo un trago amargo para Costa Rica. Habían indignado a los costarricenses, y en el siguiente juego de Costa Rica contra los EUA se jugaron la revancha y le ganaron a Costa Rica en un juego clave. El sindrome Denver puede describirse como el sentimiento de indignación que viene tras la humillación. El juego de Denver despertó un sentimiento abiertamente antiestadounidense, no de connotaciones políticas, sino futbolísticas. Era de todos modos un sentimiento antiestadounidense que no se veía desde 1856 cuando los costarricenses expulsaron de Costa Rica a los estadounidenses que venían desde Nicaragua a conquistar el país.
Viene entonces la rifa de la FIFA, donde otra vez las teorías de conspiración entran a trabajar para indicar que la FIFA es un ente corrupto que manipula los resultados. Costa Rica queda en el "grupo de la muerte" contra Italia, Inglaterra y Uruguay. Uruguay que está sétimo en el ranking de FIFA, y ese sería el juego fácil, porque los otros dos juegos serían como jugar dos finales adelantadas. No se le puede poner las cosas más cuesta arriba a un equipo, que en las eliminatorias tuvo tanto trabajo.
Y luego el colmo, viene Uruguay con juego sucio, un juego grosero y un árbitro que miraba hacia otro lado, mientras los uruguayos se burlaban del alemán Byrch enfrente de él y le veían la cara de subnormal. Cometieron un error. Humillar a los costarricenses es indignarles, es desatar el sindrome Denver, y el segundo tiempo los costarricenses salieron a la cancha muy enojados, indignados. Habían desatado de nuevo el síndrome Denver.
Los indignados contraatacan
El segundo tiempo fue un despliegue de exquisito de futbol de primera, de los descendientes de españoles del norte que vinieron hace 200 años a colonizar una tierra, no para buscar oro y subyugar indios, sino para cultivar y ganarse el pan con su sudor y esfuerzo. Eran unos descendientes que expulsaron a los estadounidenses en 1856 y que al enojarse de nuevo les derrotaron en el siguiente partido, después del infame juego de Denver donde la actitud antideportiva vino a marcar la cancha. Esta victoria sobre los EUA ha de haber venido a causar indignación entre racistas en los EUA que pensando que jugar sucio no pudieron derrotar a los latinos inferiores. Y probablemente su revancha fue hacerle la vida difícil a los costarricenses.
La prensa uruguaya llamó "Costa Pobre" a Costa Rica luego del juego contra Japón. Era una seña del desprecio que se tornó en competición antideportiva en el primer tiempo. Pero habían molestado lo suficiente a los ticos, y lanzaron la gota que derrama el vaso. Y el segundo tiempo se juega con una furia llena de cabeza fría, sin violencia, pero con mucha contundencia. A Byrch probablemente le habrán tocado el orgullo alemán y no ha querido verse como el incompetente del primer tiempo, con las burlas uruguayas hacia su arbitraje, y en el segundo tiempo empezó finalmente a hacer su trabajo. Y el resultado se refleja en un festín de goles que hicieron enloquecer a Costa Rica. Es una cosa buena que el juego tuviera lugar un sábado, porque el país se habría paralizado por la fiesta. Los indignados contraatacaron y ganaron de nuevo, y demostraron de nuevo el dulce sabor que trae una victoria con juego limpio contra un oponente que juega abiertamente sucio.
Las cosas buenas de esta victoria
Lo bueno de esta victoria de Costa Rica no es tanto haber ganado un partido, sino que hay otras cosas que son magníficas al observar este partido:
- Ganar con juego limpio sobre los que juegan sucio trae un sabor muy bueno.
- Demuestra lo que unos indignados pueden hacer con juego limpio.
- Duarte, uno de los que anotaron del lado de Costa Rica, es nicaragüense, y viene a darle una lección a los que en Costa Rica aún creen en la xenofobia. Si bien hay diferencias políticas con Nicaragua, eso no debe trasladarse a los ciudadanos de ese país. Los políticos de Nicaragua no son los ciudadanos, de la misma manera en que el rey de España o Rajoy no son como todos los españoles, ni viven como la mayoría, ni tienen las preocupaciones de la mayoría. De esta manera un negro (Campbell) y un nica, han sido los grandes heroes del mundial en un país racista y xenófobo.
- Es bueno ver la felicidad en las calles, una felicidad que no se vivía desde Italia 90. Es que en Costa Rica a partir de los 1990 los polìticos en Costa Rica quisieron cruzar la lìnea y volverse abiertamente corruptos, pensando que los costarricenses eran tontos, que seguirían votándoles en las elecciones, pero eso no fue así. Es algo así como lo que los políticos de España han pensado desde 2008. Luego de esa corrupción, nunca más se volvió a ver la fiesta electoral, la gente alegre con colores políticos en la calle.
Costa Rica, ¿la futura España?
Costa Rica es en muchos aspectos reveladora de lo que podría ser el futuro de España. Costa Rica sufrió la traición de sus políticos, que escupieron la dignidad de los ciudadanos. En 1995 quisieron robarse las pensiones, y en medio de la recesión con el desempleo al alza lanzaban anuncios de "cada día estamos mejor" en la prensa. Luego de 1998 quisieron robarse dineros públicos y sembraron la semilla de lo que luego sería un escándalo que empujaría el desprecio del público sobre los hijos de los caudillos Rafael Angel Calderón Guardia y José "don Pepe" Figueres. El partido de Calderón, el PUSC se volvió partido minoritario, y la agonía del PLN (el partido de Figueres) empujó un desprecio durante el gobierno de Chinchilla y finalmente la derrota en las elecciones de 2014, poniendo fin a la elección alternada de los partidos PUSC y PLN en el gobierno que venía desde 1948. Esta victoria nos enseña que los hijos de españoles, cuando están indignados, pero con la cabeza fría, pueden hacer cosas muy buenas. Lo indignados costarricenses le patearon el trasero al PLN y al PUSC.
En el futbol no han permitido actuar a los que han intentado implementar la desmoralización y el miedo como mecanismo de dominación, y lo han hecho jugando limpio.
En Costa Rica, hoy al presidente no más empezando le apodaron "culantrito". Resulta que a muchos educadores no les pagaron, y el presidente (al que si le pagan y cuyos hijos comen 3 veces al día), 'está bueno el culantro pero no tanto' al referirse a que ya estaba bien de huelga (Con culantro en mano, educadores protestaron por San José). ¿Por qué no decretó emergencia nacional y pagó a los que debía pagar? Teniendo él y sus hijos 3 comidas al día, es muy fácil decir "ya basta de huelga".
En España, los políticos parecen jugar abiertamente sucio, pues acuden a las malas prácticas contables para disimular una mala economía, faltando así el respeto e insultando la dignidad española.
El Instituto Nacional de Estadística de España (INE) ha presentado su estimación de cómo será Producto Interior Bruto nominal con un nuevo cálculo que incluye prostitución y drogas. - España aumenta su PIB en 45.000 millones de euros tras incluir prostitución y drogas
Nuria Ubreva, una joven española de 23 años, auxiliar de enfermería quien actualmente trabaja en Alemania, se ha convertido en los últimos días en una estrella de Internet. Invitó a Mariano Rajoy, presidente del Gobierno de España, a emigrar. - Una joven a Rajoy: "Has empobrecido España, ¿cómo puedes dormir por las noches?"
Con esta contabilidad, surgen algunas preguntas:
- Si contabilizan los ingresos de los narcos como PIB, ¿descuentan los gastos en salud de los adictos? Recordemos que los adictos tienen más problemas de salud que los no adictos.
- Si contabilizan la prostitución como PIB, ¿contabilizan los costos de salud por contagio de enfermedades de transmisión sexual? ¿Miden la dignidad de las españolas o simplemente España crece si tiene más mujeres en la miseria que deben prostituirse? ¿Ayudarán las madres de los políticos españoles, al prostituirse ellas mismas para ayudar a hacer crecer el PIB de España? ¿O es que el atropello de la diginidad de la mujer española hace crecer a España?
Con estas preguntas, y mirando que el destino de las españolas se parece más al de la Argentina donde los niños pobres se morían por desnutrición como en África, es posible que España se parezca tal vez un poco más a Venezuela y su chavismo, y no tanto a Costa Rica. Al final el tiempo será el juez.
El futuro del síndrome Denver
Por supuesto el síndrome Denver aún no se acaba, porque la FIFA puso a Costa Rica en el grupo D, el grupo de la muerte, y eso sigue causando molestia. Quizás no ganen, y quizás ni siquiera empaten, porque eso sí que es muy difícil, porque Italia e Inglaterra tienen mucha experiencia. Pero lo que no podrán hacer, ni los EUA, ni la FIFA, ni los equipos europeos, es golear la dignidad del equipo.
Si la teoría de conspiración es cierta (que puede o no serlo), los árbitros tratarán de jugar del lado de Italia e Inglaterra, y posiblemente habrá quienes podrían expresar su racismo también. Para muchos es el equivalente de aplastar, pero sería un error, porque despertarían el síndrome Denver. ¿Lo harán de nuevo?
Claro, también es de alabar el trabajo de Jorge Luis Pinto, el técnico de Costa Rica, quien siendo colombiano ha sido un excelente gerente para Costa Rica, pues en Costa Rica el gerente propmedio no suele apreciar el talento, y menos aún aprovecharlo, algo que Pinto sí hace. Para los europeos y anglosajones nadie es indispensable, y eso hace que en tiempos de recortes se menosprecie el talento, y es bueno que se mire que el talento ya la motivación hacen una gran diferencia en los resultados.
Esta no es una victoria para Costa Rica, sino una victoria de los indignados, que le demuestra a los indignados de España, que el juego limpio no lleva a la derrota, y que la victoria con juego limpio trae una doble satisfacción, el de haber ganado, y el de haber ganado con juego limpio frente al juego sucio. Jugando limpio se puede ganar sobre el que juega sucio.