Inversionista o no inversionista, todos somos humanos y estamos sujetos a los mismos males de la humanidad. Uno de ellos es el suicidio. En este post analizaremos cómo salvar vidas, con base en las experiencias de aquellos a los que he logrado salvar.
La navidad y año nuevo son una pésima época para recibir malas noticias, y sin embargo es una de las peores épocas por su alto riesgo, para las personas que podrían ser candidatas a sufrir este mal.
Todos somos susceptibles
El suicidio no distingue clases sociales. Si recordamos al general y aviador James "Jimmy" Doolittle, cuya personalidad era extrovertida y alegre, tuvo un hijo que se suicidó.
Uno de los aviadores que volaron con él en el famoso "Doolittle Raid" en abril de 1942 para atacar Tokio y luego aterrizar en China en aterrizajes forzosos de emergencia en donde pudieran, terminó internado en las instalaciones para enfermos mentales porque decían que estaba loco por decir que fue parte de ese grupo. Cuando Doolittle logró encontrarle, dicen que sus gritos de ira resonaron en el centro donde tenían recluido al aviador. El aviador encerrado por decir que conocía a Doolittle solía sufrir depresiones porque nadie le creía y no tenía cómo salir ni volver para demostrarlo. La cura fue algo tan simple como reencontrarse de nuevo con sus compañeros de vuelo.
Todos somos susceptibles al suicidio bajo las condiciones correctas. Eso es lo que he aprendido al tratar con personas que han tenido intenciones suicidas y a las que he logrado salvar. Por eso es que todos deberíamos leer esto.
Redefiniendo la salud mental
Para empezar a comprender el problema del suicidio, necesitamos desaprender mucho de lo que hemos aprendido. Necesitamos redefinir nuestro concepto de salud. Por muchos años se ha entendido la salud bajo un concepto meramente biologista de "ausencia de enfermedad", que es un concepto meramente físico. Sin embargo la Organización Mundial de la Salud ya ha redefinido hace años el concepto de "salud" (nótese que no se hace distinción entre salud y salud mental):
La salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades
Resulta que todo lo que pensamos, sentimos y percibimos está condicionado por un órgano llamado cerebro. El cerebro usa una serie de reacciones bioquímicas que determina la manera en que captamos las cosas, y nuestras acciones son las reacciones ante aquello que vemos.
¿Cuántos de nosotros hemos tenido una indigestión? Yo diría que la mayoría alguna vez ha tenido dolor de panza en su vida. Esto se produce cuando algo altera las reacciones bioquímicas que se producen en el estómago, con lo cual el estado de enfermedad es el resultado de una alteración bioquímica causado por un mal uso, generalmente involuntario (nadie querría provocarse una indigestión en forma voluntaria).
Estando con dolor de panza no vas a querer reirte de un chiste o participar activamente en una actividad social, porque estás pensando en quitarte una molestia, y entonces decimos que de alguna manera el dolor de panza cambió tu conducta y tu manera de ver el mundo. Y el hecho de que hayas tenido una indigestión un día no significa que seas un enfermo crónico del estómago, y sería absurdo que te etiquetaran o rechazaran por ello.
Bueno, les tengo noticias. El cerebro es un órgano más, susceptible también a mal funcionamiento temporal, igual que el estómago. Como el cerebro determina tu percepción, sobre la cual se construye tu conducta, es posible que cuando tu cerebro funcione mal, cometas actos absurdos que normalmente no cometerías, como el suicidio.
Entonces entendemos lo siguiente:
- Que el suicidio es el resultado de un mal funcionamiento del cerebro cuyo origen es médico y puede ser tratado médicamente.
- Que el mal funcionamiento del cerebro es el resultado de reacciones bioquímicas alteradas que alteran nuestra percepción, y por ende nuestras reacciones y actos.
- Que cuando hablamos del cerebro hablamos de salud, y garantizar su buen funcionamiento mediante los cuidados apropiados es salud mental.
Así como es absurdo que te rechace la gente por un dolor de panza, estar enfermo del estómago, es absurdo que estando enfermo del cerebro lo que recibas sea rechazo o te etiqueten socialmente con adjetivos despectivos como "loco", "enfermo mental" (con connotaciones despectivas). Una persona que ha ayudado mucho a que se vea el problema mental como algo que las personas normales también sufren, ha sido Carrie Fisher, conocida por su papel como la princesa Leia en La Guerra de las Galaxias, pues ella sufría trastornos ocasionados por una serie de situaciones muy duras en su vida.
En tiempos medievales las personas a las que les funcionaba mal el cerebro se les acusaba de "posesión demoniaca" y se les hacía un exorcismo, y aquellos con problemas menores se les encerraba en instituciones mentales donde el trato era exactamente lo contrario de lo que ocupaban para curarse. Igual que la medicina trata un dolor de estómago, la medicina también puede tratar pacientes descompensados (que se desconectan de la realidad por razones bioquímicas), pero nuestros hábitos mentales pueden hacer mucho para mejorar o empeorar nuestro estado.
¿Cómo reconocer la salud mental?
Sabemos que la salud mental depende del cerebro, y que a veces el cerebro va a funcionar mal si lo usamos mal, o si ya viene dañado por alguna razón. Pero ¿cómo reconocemos la salud mental?
Una persona con salud mental es una persona verdaderamente feliz. Cabe distinguir "verdaderamente" de "aparentemente". Una persona feliz se alegra cuando otros están felices, y una persona feliz no le haría daño a nadie. Para que tengas una mejor idea de lo que significa, de una forma más reconocible en nuestro ámbito cotidiano, la sabiduría popular ya ha propagado esta idea de una manera no tan evidente en la Biblia en Marcos 12. Una persona feliz es lo que uno podría llamar "una persona que ama al prójimo".
12:28 Acercándose uno de los escribas, que los había oído disputar, y sabía que les había respondido bien, le preguntó:¿Cuál es el primer mandamiento de todos?
12:29 Jesús le respondió: El primer mandamiento de todos es: Oye, Israel; el Señor nuestro Dios, el Señor uno es.
12:30 Y amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente y con todas tus fuerzas. Este es el principal mandamiento.
12:31 Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. No hay otro mandamiento mayor que éstos.
De esta manera, un criminal sádico no es verdaderamente feliz, sino que vive en una nube de infelicidad, tratando de compensar desequilibrios internos, aunque aparente ser feliz.
Lo interesante de nuestra sociedad es que hemos aceptado la enfermedad mental como un hecho. De esta manera cuando una persona ama al prójimo hay quienes quieren sacar provecho, vemos que cuando alguien anda sonriente siempre hay alguien pensando "Hmm, está sonriendo, ¿qué estará tramando?", y vemos en muchos ambientes laborales que siempre hay alguien que fastidia al que se siente feliz, de modo que el estado promedio de la gente es un estado de depresión leve, un estado de cierta amargura leve, y ataques abiertos hacia las personas que tratan de obtener salud mental.
Entendemos también que aceptar la criminalidad en los diarios, las mentiras, el darwinismo competitivo, el individualismo egoísta, la injusticia social, la pobreza, como algo natural, en lugar de considerar los ambientes protectores y solidarios pero desafiantes como lo normal, van creando un ambiente bastante negativo. Aceptamos la agresión doméstica, el maltrato a los niños, las violaciones a derechos humanos como algo normal, más en el ámbito político que humano. A eso se suma el hecho de que nunca nos educaron para comprender lo que era la salud mental, nos venden un concepto de felicidad imposible, y encima cargamos con nuestros propios problemas. ¿No es acaso natural pensar que el suicidio sea un subproducto natural también?
Pues no, el suicidio y los ambientes psicológicamente tóxicos son tan naturales como lo sería aceptar vivir y trabajar en una cloaca, donde los olores nauseabundos siempre rondan el ambiente. Si recordamos bien, no fue sino hasta el siglo XIX que en Londres se decide separar las aguas para beber y las aguas negras, porque eran antihigiénicas y empujan a la gente a la enfermedad.
De la misma manera necesitamos disociar las cloacas mentales en los sitios que frecuentamos, y rechazar tajantemente las conductas mentalmente enfermas y promover las sanas, como quien evita infectarse y se cubre de salud.
Entendiendo la propagación de las enfermedades mentales
Si estás feliz el día de hoy, y te grito y te insulto, te vas a sentir mal. Si el sentimiento te dura lo suficiente, puedes terminar haciendo lo mismo a otra persona que se sentirá mal también. Si yo hago cosas para que te sientas amenazado, vas a reaccionar defensivamente y vas a pasar el tiempo con actitud paranoica esperando un ataque de mi parte, una maniobra a traición y por la espalda y va a portarte de manera hostil tu también. Si tienes esposa e hijos seguramente le transmitirás tus sentimientos a ellos. En una situación así yo me habría convertido en un foco de infección mental, y tu habrías sido también un vector de la enfermedad que propaga la enfermedad a otros. Lo peor de todo es que la exposición contínua a esos juegos psicóticos también causa enfermedades al cuerpo, debido al estrés o al depresión. A nivel colectivo también sucede. En los partidos de futbol la locura se contagia, así como en las guerras.
Puedes imaginar entonces que si te trato mal, o si hago algo que te haga sentir mal, en realidad te estoy extendiendo una invitación a sentirte mal, a jugar un juego de cuya existencia no soy consciente. ¿La aceptarías? Si eres emocionalmente inteligente lo que pensarás es "nunca pelees con un idiota, porque te rebajará a su nivel y te derrotará con toda su experiencia" y rechazarás mi invitación a pelear o a sentirte mal y entrar en juegos mentales psicóticos.
En esos juegos psicóticos que jugamos a diario existe un patrón, se trata de un juego de roles llamado el Triángulo del drama (puedes leer sobre este tema en The Drama Triangle). En este juego de roles enfermo tienes a una víctima, a un perseguidor y un rescatista, donde todos se persiguen y hostigan por diferentes razones, y donde las personas pueden intercambiar lugares de vez en cuando, en un juego que garantiza que todos se van a sentir mal y se van a llevar de lo peor. ¿La solución a este juego? La solución es no jugar. Si lees sobre el triángulo del drama lo comprenderás.
La mayoría de los problemas de malas relaciones en ámbitos humanos con pocas personas se dan en función de un triángulo del drama. Este triángulo generalizado en la convivencia humana crea una cultura de enfermedad que es apreciable en muchos ámbitos. El machismo y la agresión doméstica es un ejemplo de relaciones donde la mujer es "víctima" y el hombre es "perseguidor", y se atacan mutuamente, y se llevan tan mal y son tan infelices que suele terminar en homicidio, con niños traumatizados por el asesinato que encima aprendieron que lo natural es jugar ese juego emocionalmente tóxico.
En la misma manera en que tu no aceptarías tener las aguas para beber y las cloacas funcionando como un sólo sistema como en Londres en el siglo XIX, así tampoco debemos aceptar como naturales las cloacas mentales en el siglo XXI.
Los enfermos mentales del siglo XXI
Así, cuando vemos a los suicidas que cometen atentados, vemos que vienen de sitios con gran pobreza, donde la muerte es vista como una salida, en un estado de enfermedad mental que es explotada por otros enfermos mentales de la política que buscan muchas cosas excepto hacer a otros felices, porque creen que la venganza les aliviará su dolor, cuando en realidad sólo el perdón puede hacerlo.
Cuando vemos la diplomacia entendemos que se trata de personas que deben lidiar con políticos enfermos mentales, paranoicos, neuróticos y con baja autoestima y ego grande que no soportan la más mínima descalificación. Quizá por ello WikiLeaks es algo tan temido, porque ataca la autoestima débil de un político.
Cuando vemos a los banqueros y narcotraficantes especuladores (¿De que se nutre el capital especulativo?), entendemos que esas gentes no entienden lo que es el deleite de hacer a otros felices y no comprenden la felicidad por vivir como avatares atrapados en un videojuego (El sistema económico ¿es sólo un videojuego?) que se engañan creyendo que son felices, cuando en realidad ganan dinero arruinando a millones de seres humanos.
Vemos que las guerras son un caso extremo de enfermedad mental colectiva, donde se ve a los enfermos de la política y a los enfermos mentales de avaricia que sufren sensación de escasez, conjugados en una crisis que provoca infelicidad en la zona de guerra.
Entendiendo la felicidad
Hemos visto lo que NO es felicidad y cómo evitar la propagación de la enfermedad, pero como sabemos, salud no es la ausencia de enfermedad. Antes de entrar a entender la felicidad, veamos lo que dicen los científicos. Recientemente los neurólogos afirman que la felicidad se puede medir (La fórmula de la felicidad, en el cerebro):
Después de miles de años en busca de la fórmula mágica, un equipo de neurólogos afirma que la felicidad es el resultado directo de la actividad cerebral, susceptible de ser observada y medida
Cuando la falta de felicidad tiene su origen en daños o mal funcionamiento por causas bioquímicas, los problemas podrían ser tratados médicamente (La felicidad depende del tamaño de las regiones subcorticales del cerebro):
Una investigación abre nuevas posibilidades al tratamiento de la depresión y la esquizofrenia
Lo que he aprendido de los suicidas es que tienen un concepto equivocado de la felicidad, y esto sumado a percepciones abrumadoras de la realidad que se asumen como reales, causadas por desequilibrios bioquímicos, terminan empujando a las personas al suicidio.
- Concepto erróneo: "La felicidad es la ausencia de problemas". Bajo esta definición la felicidad es imposible, porque siempre tendremos un problema, por más pequeño que sea.
- Concepto correcto: "La felicidad es lo que hacemos MIENTRAS tenemos problemas".
Pero comprender esto no es suficiente, porque a un concepto errado de felicidad se suma una alteración bioquímica.
La depresión, un engaño bioquímico
Cuando estés feliz, piensa "¿cuál es el mundo real? ¿El que veo cuando estoy triste o este mundo que veo estando feliz?". Te darás cuenta de que el mundo que ves cuando estás feliz y en paz es el mundo real. Cuando estés triste o deprimido recuerda esto. Ese punto de partida será tu salvación.
Recuerda que cuando estás triste o deprimido todo se ve diferente, pero es sólo una ilusión bioquímica de tu cerebro, y debes recordar estos 4 "mandamientos" cuando estés en ese estado:
- "No puedo confiar en la realidad que percibo". Ese no es el mundo real, el mundo real es el mundo cuando estoy feliz. Desconfía de esa realidad triste, fantasmagórica y terrible que ves. Es un velo bioquímico que te impide ver el mundo real.
- "No puedo confiar en lo que pienso". El cerebro bioquímicamente alterado te va a alterar la manera en que piensas, en que razonas y conectas las cosas. Simplemente no puedes confiar en las ideas que surgen de la tristeza o depresión.
- "No puedo confiar en lo que siento". El cerebro bioquímicamente alterado te hace sentir mal. No puedes confiar en tus emociones, en lo que te dicta tu corazón, en lo que te dictan los sentimientos.
- "No debo reaccionar a los que veo, siento y pienso". Cuando estés triste, evita reaccionar ante eso, y eso te protegerá. Si sientes una realidad amenazante reaccionarás ante otros de forma amenazante y defensiva, y al volver a la normalidad habrás destruido lo que te costó construir, y habrás dañado a los que más te aprecian o te habrás dañado a tí mismo. Lo mejor es no reaccionar, y esperar a que vuelvas a estar feliz, sabiendo que ese estado es una ilusión bioquímica, es falsa, es una mentira que surge de un mal funcionamiento. Como sabes cualquier órgano del cuerpo es susceptible de fallar en algún momento, y el cerebro no es la excepción.
Cabe añadir que existen situaciones que te harán más propenso a esos estados:
- Adolescencia y adultez joven: De los 15 hasta los 25 años aproximadamente vas a ser más propenso a sentirte mal, pero eso se debe a cambios bioquímicos en tu cuerpo. Si un día te despiertas y el mundo se ve triste y sombrió piensa "el mundo se ve triste y oscuro... pero qué diablos... vamos a disfrutarlo".
- Periodo en las mujeres: Cuando te viene el periodo, si eres mujer, deberás saber que eso te cambiará la manera de ver el mundo por alteraciones bioquímicas. Tu esposo también deberá saber que eso te ocurrirá. Así como uno no le da importancia a lo que una persona dice cuando está borracha (una forma artificial de alteración bioquímica), así tampoco tu marido debe tomarse a pecho lo que digas cuando estas en esos días del mes.
- Medicamentos y sustancias: Puede haber medicamentos o sustancias que te indizcan a la depresión. El alcohol es un ejemplo de sustancias depresivas.
- Clima: Dicen que los días grises y nublados hacen a las personas más propensas a la depresión.
- Problemas: Hay una gran variedad de problemas que suelen hacer que la gente se suicide, como acoso en la escuela, acoso por internet, malas relaciones en el trabajo, desempleo, desamores, culpas, etc. Allí lo importante es recordar la definición de felicidad y además el manejo de la frustración que es algo de lo que hablaré más adelante.
- Otros: En Japón se suicida mucha gente en una sociedad muy competitiva y que no considera pecaminoso el suicidio y tampoco es comprensiva hacia los familiares de los muertos (Suicides can run up a posthumous bundle). Las circunstancias pueden variar de país en país.
Recuerda, la depresión y la tristeza son un engaño bioquímico que sucede cuando tu cerebro funciona mal. Puede ser que funcione mal porque hay algún factor externo que altera la bioquímica, o puede ser por malos hábitos a la hora de poensar y sentir, ocasionados por patrones disfunionales aprendidos de muestros padres o nuestras familias.
Mitos
Puede ser que tu no seas propenso al suicidio, pero es posible que te encuentres con alguien que sí lo sea. Puede ser un conocido, un amigo, un familiar, y no hay segundas oportunidades en el manejo de estos casos. Al igual que en un paciente que va a emergencias del hospital, un suicida también es una persona enferma cuya vida corre peligro, porque está programada para la autodestrucción.
Existen mitos alrededor del suicidio como los siguientes:
- El que se suicida no avisa.
- El que avisa no se va a suicidar. Está tratando de llamar la atención o manipular.
Lo cierto es que hay muchas personas que se han suicidado y han tenido momentos donde han pedido ayuda de muchas formas.
Si te encuentras con una persona en situación de posible suicidio, no la dejes sola. Debes hacer que se sienta apoyada y debes buscar ayuda profesional de inmediato. Dependiendo de la seriedad del problema, la persona podría recaer cuando no hay nadie y suicidarse.
Si la insistencia de esta persona es muy grande, deberás lograr que postergue el suicidio por al menos 5 años, pero no para suicidarse en 5 años por las razones que tenga en el futuro, sino por las razones que tenga hoy. Como consejo general, apréndete lo que dije aquí y usa lo dicho aquí para lograr que la persona cambie su concepto de la felicidad, y si no está en un estado muy crítico con sólo eso podría bastar.
Así salvarás vidas.
Agentes estresantes
Cuando hablamos de sentirnos mal, a veces no basta con no jugar el triángulo del drama. Hay ocasiones donde tenermos personas que son especialistas en fregar la paciencia, porque no solo están mentalmente enfermas, sino que encima se niegan a buscar ayuda o incluso aceptar que están mentalmente enfermas. Estas personas generalmente son muy negativas y tratan de arrastrarnos hacia su negatividad.
Una persona así en un rol de jefatura generará mucho estrés a sus subalternos sin necesidad. Si son empleados, para el jefe será muy estresante lidiar con esa persona, principalmente si es muy manipuladora y perezosa, y generalmente estas persona será odiada también por sus compañeros de trabajo porque se porta de manera grosera y hostil. Hay quienes tienen padres o madres que hunden a sus hijos en estados emocionales muy negativos. Habrá quienes digan ser amigos, pero no lo son...
Hay una gran variedad de situaciones donde hay personas que no aceptan ayuda y que generan mucho estrés. La regla básica para ser feliz frente a agentes estresantes es "acércate a aquellos que te ayudan a ser mejor y te hacen crecer como persona y aléjate de aquellos que te hunden y que son un ancla para tu desarrollo personal".
En general es fácil reconocer a un agente estresante, porque al apartarse de su influencia se goza de una gran paz.
Manejo de las frustraciones
A nosotros nos enseñaron a vivir la vida en las siguientes condiciones:
- Una cantidad de intentos limitada
- Plazos para lograr las cosas
Estas son las reglas que aplicarían en un mundo de negocios, pero extrañamente estas reglas se han extrapolado a la vida personal. De esta manera te enseñan que sólamente puede ocurrir una vez que te hayas encontrado con "el amor de tu vida" (sólo hay oportunidad para un intento) y si no tienes a esa persona es el fin. Eso funciona en los cuentos de hadas, que son exactamente eso, un cuento. La vida no funciona como en los cuentos. Cuando a un equipo de futbol le descalifican por sus resultados (puntos y goles), ¿acaso se suicidan los jugadores? No, saben que habrá un siguiente campeonato. Asimismo, si te "dejó el tren" en materia de amores, debes saber que los trenes pasan a cada rato.
Asimismo cuando buscas realizar sueños y tocas puertas, generalmente tocas una o dos puertas y si no se abren entonces abandonas tus sueños.
Esas dos reglas que aplicas a tu vida generan mucha frustración y las frustraciones son un componente importante en las motivaciones de suicidio en bastantes casos. Para evitar el efecto de la furtración debes cambiar las dos reglas que enumeré antes por estas:
- "Tengo una cantidad ilimitada de intentos. Si no lo conseguí en esta, en la próxima será". ¿Sabes cuantos intentos se ocuparon para inventar la luz eléctrica? Tengo entendido que fueron unos 2000 intentos, unos 2000 fracasos antes de tener éxito. Walt Disney la primera vez que se lanzó fue a la quiebra, aprendió de los errores y se lanzó de nuevo.
- "No tengo plazos, lo conseguiré algún día". Cabe agregar que si le agregas persistencia, ese "algún día" estará mucho más cerca.
Aunque parece sonar a conformismo y mediocridad, en realidad no lo es. Cuando te lanzas a lo desconocido no es razonable que pongas plazos o cantidades de intentos irreales. La frustración te puede matar, literalmente. El fracaso viene cuando te rindes, y suicidarte por una frustración es morir por plantear mal las cosas.
Las mayores tragedias y frustraciones de las personas vienen con:
- Desamores: No existe "el amor de tu vida". Eso llega cuando uno está listo. Si no ha llegado es porque no estás listo.
- Desempleo: Siempre habrá otro empleo al que puedas aspirar. Quizá en algún momento podrá hablar de cómo enfrentar este problema. Sólo te diré que para conseguir empleo necesitas paz interior, y no estrés, deseperación y frustración.
- Malas relaciones: Con lo que he mencionado en este post ya tienes suficientes herramientas para mejorar tus relaciones.
Una misión de vida
A esta vida no vinimos a sufrir. La misión de vida no necesariamente es vivir como todos los demás. Si vivimos algo distinto es porque probablemente nuestra misión es única y excepcional. No te distraigas con el sufrimiento, no estás deprimido, sino distraido. Te distraes de lo realmente importante en esta vida y te aferras a cosas que pasan, que vienen y van.
Todos tenemos una misión de vida, y cuando la descubras, vas a encontrar gozo. En mi caso personal, mi misión es "cambiar el mundo". Pero no cambiar por cambiar, sino cambiar para mejorar la condición de las personas, y cuando lo hago soy imparable, no porque yo lo sea, sino porque parece que hay algo que hace que sea así. Es algo que siempre he hecho y mejoro la vida de otros, las cosas me salen bien y me siento bien. Encuentra tu misión de vida.
Risa contra la ansiedad
Contra la ansiedad hay un remedio muy simple: La risa. Según investigaciones en la Universidad de Lomalinda en California, la gente que se ríe en cosa de segundos reduce la cantidad de hormonas estresantes como el cortisol y la adrenalina y mejora la producción de células NK (Natural Killers) que se encargan de combatir el cáncer entre otras enfermedades.
Te recomiendo que te impongas una autodisciplina de reirte al menos 15 minutos al día.
He aquí otras cosas que deberías conocer para mejorar tu vida y alejarte definitivamente de la tristeza y acercarte a la felicidad. La ganancia es para tí.
- 'Laugh your sorrows away'
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Laughter May Indeed Be the Best Medicine
Study Shows Laughing Changes Blood Chemistry, Helps Protect Against Disease, Depression - Anticipating A Laugh Reduces Our Stress Hormones, Study Shows
Aprender a crecer
Una vez que te hayas librado de lo que te causaba infelicidad, sería bueno que empezaras a reconstruirte, a reconstruir tus hábitos mentales y emocionales usando la siguiente información:
En 5 años (y señalo tanto tiempo para que no vayas de prisa) si te esfuerzas en ser feliz, te aseguro que aquí están todas las herramientas que necesitas.
Si te sientes triste hoy, seguramente quisieras que viniera alguien hoy y te quitara la tristeza. Te tengo no ticias, eso no es posible, y lejos de ser una mala noticia, es una muy buena, porque significa que tu felicidad depende solamente de ti, está en tus manos. Nadie más puede hacer nada más que mostrarte la puerta, y tú eres quien debe cruzar. Si todo te sale mal, probablemente es porque te autosaboteas, te castigas. Si tienes el mal hábito de castigarte, perdónate y sigue adelante. El mundo necesita tanto la ayuda de cuantos podamos estar para mejorarlo, así que no gastes tu tiempo castigándote, porque ese no es tu propósito en la vida.
Yo espero ver que en 5 años me cuentes historias de lo feliz que has estado. Con esto que he dicho he salvado a 3 personas. Si sabes de alguna que hayas podido salvar con esta información, me gustaría saberlo. Regalarle esta información a alguien es un regalo muy barato y muy importante.
Empujemos hacia una navidad y año nuevo sin suicidios, con una felicidad que dure más allá de estos tiempos festivos, que dure toda nuestra vida.