Como viene siendo habitual, junto al vídeo que explica mi visión acerca de los mercados financieros traigo a colación unos gráficos que pueden ilustrar un poco más algunos de los argumentos esbozados.
En general, los mercados siguen estando en una zona lateral de congestión, aunque cabe diferenciar entre los distintos mercados:
- La bolsa americana presenta cierta aceleración, puesto que los resultados están siendo mejores que lo previsto, estando en máximos históricos de beneficios empresariales en EEUU.
- La bolsa japonesa muestra la subida de las empresas exportadoras, ya que se están beneficiando de la depreciación sufrida por el yen.
A la vista de estos datos, no parece que sea un buen momento para invertir en bolsa, por lo que debemos ser cautos. Salvo que se produzca una mejora inesperada de la economía a nivel global, los márgenes disminuirán.
¿De qué está pendiente el mercado?
- Revalorización del euro
- PIB
- Inflación
Por tanto, a la economía europea le interesa moderar la apreciación del euro, mientras que a EEUU le interesa una depreciación controlada del dólar. A corto plazo, pueden darse fluctuaciones en rangos muy pequeños.
Otros opinan que puede producirse una normalización de los bonos, por temas estrictamente monetarios.
¿Cómo afecta a la bolsa una fuerte revalorización de los bonos?
- Si se produce un fuerte incremento inesperado, el mercado corrige, debido a los gastos financieros, a las inversiones alternativas y al descuento de flujos.
- Si se produce un incremento moderado, la renta variable suele anticipar estos movimientos, debido a una ligera mejora de la economía.
En conclusión, opinamos que los bonos están caros en relación a la bolsa, sin embargo, no creemos que sea el momento para invertir en bolsa, para ello, deberíamos observar una mejora significativa de la economía, a través de un incremento de ventas, y de los márgenes, que no preveemos, o bien, unas valoraciones más exigentes.