El riesgo de deflación que "sobrevuela" la Eurozona sería como una "bomba" de relojería de cara a la recuperación económica de los países miembros y modificaría por completo la evolución de los mercados y las "buenas" expectativas que hay sobre el 2014.
Tampoco nos podemos olvidar en la retirada de estímulos llevada a cabo por la Reserva Federal y las consecuencias que puede tener sobre la evolución de la inflación y los tipos de cambios, así como la potencial crisis de crédito que se puede producir en China.
Las expectativas de crecimiento de la Eurozona hacen pensar que lo más probable es que podamos estar mucho tiempo con tasas de desempleo "exageradamente" altas, y que han supuesto un récord negativo que ha alcanzado el 12,1%. La fortaleza del €uro no ayuda y los "graves" problemas que están sacuendiendo los mercados emergentes tampoco.
Recordando lo sucedido no hace tanto tiempo, puede parecer que nos estamos acercando a lo sucedido en Japón hace aproximadamente 20 años, cuando entró en deflación en 1994, se puede aprender de los sucedido.
lo que nunca debemos olvidar es que se puede caer en deflación sin que nadie espere que vaya a ocurrir, incluso aunque se haya conseguido crecimiento positivo.
Según el deflactor del PIB, Japón entró en deflación en el segundos semestre del año y según el IPC no entraría en deflación hasta 1995. Desde aquel entonces, la economía nipona sigue luchando para alcanzar el 2%, y tras 20 años, aún no lo han conseguido.
El Banco Central Europeo afirma que el riesgo de deflación es pequeño, ya que la economía real está entrando en un proceso de recuperación, pero no creo que nos debamos confiar, pues las estimaciones de crecimiento de la Eurozona para 2014 son del 1%, y tras estar en mínimos históricos, 0,7%,la inflación subyacente parece que se estabilizará en torno al 0,8-0,9% durante el 2014.
Todo el mundo está a la expectativa de la próxima reunión del Banco Central Europeo que tendrá lugar el próximo mes de Marzo, en la que ofrecerá sus estimaciones de inflación hasta 2016. Lo más previsible es que revise dichas estimaciones a la baja:
- La previsión para 2014 es del 1,1% y puede que disminuya hasta el 0,8-0,9%.
- La previsión para 2015 es del 1,3% y puede verse reducida hasta el 1,2%.
- La estimación para 2016 se acercará al 1,5%.
Hasta que el mercado "no acepte o se sienta decepcionado" con las estimaciones del BCE, es decir, no se ajusten a la realidad, Mario Draghi no tomará medidas al respecto y seguirá con su discurso de que el Banco Central Europeo está preparado para cualquier tipo de intervención.
¿Puede estar "tranquila" la Eurozona o el riesgo de deflación es más serio de lo que parece?¿A qué espera el BCE para tomar decisiones?