Según los datos publicados el 30 de junio de 2014, por el INE, la población en España a día 1 de enero de 2014 es de 46.507.760 habitantes, 220.130 menos que en 2013.
La principal causa de esa disminución en el número de habitantes es el descenso en un 7,8% en el número de extranjeros y el saldo migratorio negativo de 256.849 personas, provocado por un descenso del 4,3% de la inmigración y un aumento del 22,7% de la emigración.
Y es que, a pesar de que en 2013 en España hubieron 36.716 nacimientos más que defunciones (algo que no se daba desde hacía mucho tiempo), el flujo migratorio fue negativo como podemos comprobar en la siguiente tabla.
Si observamos la siguiente gráfica, podréis comprobar como en los años de expansión económica, España sufrió un aumento de población considerable pasando de los 40.476.723 habitantes en 2001 a 45.668.938 habitantes en 2008, es decir, 5.192.215 habitantes más en tan solo 7 años.
Este aumento de la población se produjo básicamente por la llegada de inmigrantes a nuestro país en busca de trabajo. Durante ese periodo, muchos extranjeros, especialmente procedentes de países subdesarrollados o en vías de desarrollo, salieron de sus países de origen en busca de una mejora en sus condiciones de vida y encontraron en España ese trabajo que tanto ellos como nosotros necesitábamos. Sin embargo, con el inicio de la crisis, se han cambiado las tornas.
Con una tasa de paro de alrededor del 26%, no solo muchos inmigrantes están saliendo de España, bien para volver a su país de origen, bien para migrar a otro país, sino que los propios españoles están emigrando buscando oportunidades de trabajo que en España no encuentran.
Así pues, la elevada tasa de paro y las bajas expectativas de una mejora en las condiciones del mercado laboral están provocando que miles de españoles, especialmente jóvenes de entre 20-35 años con una alta cualificación salgan de España hacia países como Reino Unido, Francia y Alemania en busca de oportunidades de trabajo.
Por su parte, aquellos que emigraron a nuestro país en la época del boom económico se han visto arrastrados a la necesidad de volver a emigrar ya que España ya no ofrece las buenas condiciones laborales que ofrecía entonces. El colectivo más afectado ha sido el sudamericano, concentrándose sobre todo en nacionalidades como la boliviana, ecuatoriana, colombiana o peruana.
Descenso de población por comunidades autónomas
Si nos fijamos en el descenso de población por comunidades autónomas, podemos ver que solo Islas Canarias y Baleares registran un aumento de población del 0,46% en ambos casos. El resto ha visto disminuir su número de habitantes.
Las comunidades con un mayor número de descenso en su población en términos relativos son La Rioja, Cataluña, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Asturias y Madrid.
Si cada vez hay menos gente en España y la tasa de paro sigue rondando el 25, ¿cómo se van a poder mantener las pensiones?