Entender que el ahorro es parte fundamental de nuestras finanzas personales es necesario ya que sin él, no podemos invertir para conseguir objetivos vitales. Sé que invertir conlleva cuestiones que te planteas a menudo, como son: que riesgo corro, que impuestos, la inflación o la depreciación o pérdida de los activos.
A veces nuestro perfil puede venir condicionado por ciertas circunstancias, entonces si no fijamos en el presente, en el ahora, sin preguntarnos de dónde vienen esas circunstancias obtenemos un perfil de riesgo que nos determina a la hora de seleccionar los activos en los que estar invertido o dentro de ese activo seleccionar un perfil de inversión. A veces también podemos incluir el aspecto del ciclo económico donde vivimos o el general del mundo, pero en este caso sería bajo mi criterio para inversiones no a largo plazo sino para el medio.
Por tanto, a la hora de planificar con un cliente, como ves, son muchos los factores que se mezclan y afectan a la inversión que se puede recomendar después de la planificación.
Bajo mi criterio la inflación a día de hoy es el tema más popular e importante para el cliente, está cansado de ver como su banco le da poco, le obliga a comisiones altas, y encima cada vez que compra ya sea por necesidad o por ocio, todo está más caro. Es por eso que la inflación deteriora el poder adquisitivo del dinero, y por ello debemos buscar inversiones que superen o igualen a la inflación. (Lo mejor es que la superen)
Luego tenemos la propia depreciación del activo, o lo que es lo mismo, la disminución del valor por subida de tipos de interés, malas valoraciones, etc. Esto lo vemos en los bonos, acciones o inmuebles.
Una vez tenemos estas cuestiones solventadas y claras nos queda el tema de los impuestos, es decir, pagar al gobierno. De esta parte nadie escapa, estoy hablando de que haya beneficio, donde generalmente se paga por la rentabilidad obtenida pero no por lo aportado.
Como ya hablé aquí, si el perfil de inversión es conservador, lo lógico es integrar las inversiones con una buena diversificación de productos de bajo riesgo. Aquellos que se manejen mejor con el riesgo pueden incluir activos relacionados con materiales preciosos, acciones, inversiones en capital de riesgo o criptomonedas.
Una vez visto qué tipo de riesgos puede darse, nombró los activos que en función del perfil de riesgo y ciclo económico podrían ayudarte a mejorar tu inversión si decides hacerlo por tu cuenta y riesgo, como suele decirse:
Renta fija soberana. Inversión “segura", sobre todo en momentos de recesiones o como ahora, subida de tipos.
Renta fija corporativa. Muy parecido al anterior, pero recuerda que lo mejor es que sea bonos de empresas con calificaciones crediticias invesment grade.
Inmuebles. Activo que generalmente se suele mover bien en casi todos los ciclos económicos, ya sea para venta, alquiler, etc.
Metales preciosos. El oro o la plata son tradicionalmente activo refugios contra la inflación. En tiempos de incertidumbre económica o alta inflación, activos como el oro suelen apreciarse.
Empresas cotizadas. Growth y Value
Materias primas agrícolas (maíz, café, etc). Suele vincularse con factores climáticos y geopolíticos. En tiempos de inflación pueden ayudar ya que los precios de los alimentos suben. Podrían actuar como un cobertor, ya que los precios de los alimentos tienden a subir.
Materias primas industriales. El cobre y el paladio, por ejemplo, ahora con el tema de los coches eléctricos.
Infraestructuras. Inversiones que pueden generar ingresos estables sin grandes rentabilidades. Ejemplo: autopistas.
Divisas. Dependen de la política monetaria y en función del ciclo deberemos seleccionar bien aquella que se convierta en la más fuerte respecto a las otras.
Startups no cotizadas. Muy de moda en estos momentos pero difícil para la clase media poder invertir en ellas, va existiendo plataformas que te ayudan con tickets moderados a poder hacer una aproximación e invertir. En ciclos cercanos a recesiones o tipos de interés alto, según la fase de desarrollo no es aconsejable.
Criptomonedas. Último lugar ya que todavía queda para que sean usadas de forma cotidiana como el resto de divisas, en fases de alta inflación o de su aprobación por los legisladores suelen vivir buenos momentos.