La semana pasada se celebraron las ferias Expoquimia y Equiplast en Barcelona. Como economista tenía un especial interés en visitar estas ferias ya que representan dos de los sectores económicos clave de la economía española: la industria química (Expoquimia) y el sector del plástico y el caucho (Equiplast).
Me llamó especialmente la atención la segunda y en concreto las máquinas de moldeo por inyección, que sirven para fabricar productos o piezas de plástico mediante el proceso de moldeo por inyección, un proceso de fabricación que sirve para producir grandes cantidades de piezas. Normalmente se utiliza en procesos de producción en masa, donde se crea la misma parte miles o incluso millones de veces seguidas.
En el argot económico entraría dentro de la categoría de bienes de equipo: activos fijos tangibles necesarios para la producción de bienes y servicios en una empresa. Estos incluyen maquinaria, herramientas, equipos, vehículos y otros medios de producción utilizados para fabricar productos o prestar servicios.
Lo que más me llamó la atención aparte de la ingeniería tan avanzada de estas máquinas era la gran cantidad de stands de empresas chinas.
Indagando en el sector he encontrado que en el mundo hay cincuenta y cuatro fabricantes de estas máquinas y el país con mayor número de fabricantes es China, con dieciséis, lo que supone el 30% del total del mercado.
A mucha distancia encontraríamos Japón con nueve, Alemania con siete e Italia con cinco. Corea del Sur cuenta con dos fabricantes importantes y Taiwán también, acaparando los países asiáticos más del 50% del mercado.
En España sólo hay un fabricante importante, Mateu & Solé. En Francia apenas dos, en Estados Unidos otros dos y uno en Canadá, Suiza, Austria y Países Bajos. Destacan también los dos fabricantes que tiene Turquía.
Este sector nos permite ver y entender de forma rápida las principales dinámicas macroeconómicas: el principal dinamismo económico se concentra en la zona de Asia Pacífico, a su vez China tiene una balanza comercial positiva muy importante y en el continente europeo Alemania es el país con mayor superávit comercial e Italia, a pesar de los serios problemas de su economía, tiene superávit exterior gracias al potente norte industrializado.
Francia y sobretodo Reino Unido, España, Portugal y Grecia siguen con su crónica balanza comercial negativa.
Japón tuvo superávit comercial en las décadas de los ochenta, noventa y primera década del presente siglo pero el terremoto y posterior tsumani de 2011 lastraron notablemente la producción en los siguientes años, lo que contribuyó al déficit comercial cosechado entre 2011 y 2015.
Me llamó especialmente la atención la segunda y en concreto las máquinas de moldeo por inyección, que sirven para fabricar productos o piezas de plástico mediante el proceso de moldeo por inyección, un proceso de fabricación que sirve para producir grandes cantidades de piezas. Normalmente se utiliza en procesos de producción en masa, donde se crea la misma parte miles o incluso millones de veces seguidas.
En el argot económico entraría dentro de la categoría de bienes de equipo: activos fijos tangibles necesarios para la producción de bienes y servicios en una empresa. Estos incluyen maquinaria, herramientas, equipos, vehículos y otros medios de producción utilizados para fabricar productos o prestar servicios.
Lo que más me llamó la atención aparte de la ingeniería tan avanzada de estas máquinas era la gran cantidad de stands de empresas chinas.
Indagando en el sector he encontrado que en el mundo hay cincuenta y cuatro fabricantes de estas máquinas y el país con mayor número de fabricantes es China, con dieciséis, lo que supone el 30% del total del mercado.
A mucha distancia encontraríamos Japón con nueve, Alemania con siete e Italia con cinco. Corea del Sur cuenta con dos fabricantes importantes y Taiwán también, acaparando los países asiáticos más del 50% del mercado.
En España sólo hay un fabricante importante, Mateu & Solé. En Francia apenas dos, en Estados Unidos otros dos y uno en Canadá, Suiza, Austria y Países Bajos. Destacan también los dos fabricantes que tiene Turquía.
Este sector nos permite ver y entender de forma rápida las principales dinámicas macroeconómicas: el principal dinamismo económico se concentra en la zona de Asia Pacífico, a su vez China tiene una balanza comercial positiva muy importante y en el continente europeo Alemania es el país con mayor superávit comercial e Italia, a pesar de los serios problemas de su economía, tiene superávit exterior gracias al potente norte industrializado.
Francia y sobretodo Reino Unido, España, Portugal y Grecia siguen con su crónica balanza comercial negativa.
Japón tuvo superávit comercial en las décadas de los ochenta, noventa y primera década del presente siglo pero el terremoto y posterior tsumani de 2011 lastraron notablemente la producción en los siguientes años, lo que contribuyó al déficit comercial cosechado entre 2011 y 2015.
