Un instrumento financiero es, en esencia, un contrato suscrito entre dos partes. En este acuerdo, una parte adquiere un activo financiero en tanto en cuanto la otra parte asume un pasivo financiero.
Un instrumento financiero es aquel activo que surge de ese contrato suscrito entre las dos partes.
Cuando compramos un
bono, por ejemplo, firmamos un contrato mediante el cual aportamos capital en tanto en cuanto la otra parte asume la deuda y la obligación de devolver este capital en el vencimiento, así como unos intereses. Como puede observarse, una parte adquiere un
activo o instrumento financiero, mientras que la otra asume la deuda, o lo que es lo mismo, un pasivo financiero.
Instrumento financiero es, por tanto, una especie de sinónimo de activo financiero. Pues el instrumento financiero, como hemos señalado y como debemos recalcar, es el activo que surge del contrato suscrito entre esas dos partes.
En resumen, hablamos de un concepto que hace referencia a cualquier activo que podemos adquirir en el
mercado. En este sentido, un término muy relevante en el mundo de la economía y las finanzas y muy frecuente de ver en entornos como el de la
bolsa de valores.
Instrumento financiero complejo y no complejo
Cuando hablamos de instrumentos financieros, es preciso señalar que podemos distinguir entre instrumentos financieros complejos e instrumentos financieros no complejos.
Cuando hablamos de instrumentos no complejos, hacemos referencia a los instrumentos de
renta fija (
deuda pública y deuda privada) y de
renta variable (
acciones, materias primas, divisas...).
Por otro lado, cuando hablamos de instrumentos complejos, estamos haciendo referencia a los
derivados financieros; derivados financieros que vamos a ver a continuación.
Instrumentos complejos: instrumentos financieros derivados
Los instrumentos financieros derivados son aquellos
activos financieros, los cuales su valor se encuentra indexado al valor de otro activo, al que llamamos
subyacente. En función de los movimientos que sufra el subyacente, el hecho de que estén indexados provocaría un movimiento automático del valor del derivado.
Los principales instrumentos financieros derivados que encontramos en el mercado son los
futuros financieros, las
opciones, los
CFDs, los
Swaps, entre otros.
Debido a esa complejidad que conlleva su relación con otros activos, se les puso el nombre de instrumentos financieros complejos.
Las NIIF y los instrumentos financieros
Las Normas Internacionales de Información Financiera (por sus siglas, NIIF) son el conjunto de reglas internacionales a seguir en contabilidad. Estas, entre otros objetivos, persiguen la unificación y la homogeneización de la normativa contable en pro de una economía globalizada.
Este conjunto de normas, que tratan de estandarizar la práctica contable a nivel internacional, señalan aquellos requisitos sobre los que se rige el reconocimiento, la medición, la presentación y la información a revelar sobre aquellas transacciones y hechos económicos de otra índole que, además de afectar a la empresa, deben quedar reflejados en los estados financieros de esta.
En lo que a los instrumentos financieros se refiere, hemos de señalar que las NIIF también los contemplan. En este caso, en la NIIF 9.
La NIIF 9 Instrumentos financieros es la norma que sustituyó a la norma NIC 39. Esta entró en vigor el 1 de enero de 2018.
NIIF 9 es una normativa centrada en aquellos capítulos que establecen los requisitos de clasificación y valoración, reconocimiento y baja en cuentas, deterioro y contabilidad de coberturas.
Instrumento financiero, ejemplos
Para terminar, veamos algunos ejemplos de instrumento financiero que, por lo habitual, podemos encontrarlos en nuestro entorno.
Entre los principales instrumentos financieros que existen, podemos destacar los siguientes:
Entre otros activos financieros que, como decíamos al inicio, surgen de ese contrato al que, junto con ese activo, llamamos instrumento financiero.