Parece que en esta ocasión se están moviendo muy rápido los afectados para auto-organizarse. Desde luego, la experiencia de Eurobank les vendrá muy bien. Noticia de Efe:
Los afectados forman una asociación para defender sus intereses
MADRID.- La principal preocupación de aquéllos afectados por la operación judicial en Afinsa y Fórum Filatélico es saber qué va a pasar con su dinero. Aunque aún no hay información detallada sobre la posible repercusión de los presuntos delitos, un grupo de clientes está poniendo en marcha una organización de afectados para defender sus derechos, y la asociación de consumidores Facua recomienda acudir a los juzgados de guardia de sus respectivas localidades.
"Se trata de un primer paso para que las instancias judiciales puedan recabar los datos de los perjudicados en toda España y posteriormente, en su caso, comunicarles las actuaciones que vayan a llevarse a cabo", señala Facua en un comunicado.
Mientras, alrededor de medio millar de inversores en Fórum Filatélico comenzaron hoy a crear un plataforma para defender sus intereses. Enfrente de la sede central, en la madrileña calle de José Abascal, Isabel R. ha iniciado una recogida de nombres y números de teléfonos para "integrar a todos los afectados por esta operación judicial".
Aunque la asociación no está todavía formalmente constituida, los posibles perjudicados pueden enviar sus datos a los organizadores en la dirección [email protected].
Regulación de las empresas de bienes tangibles
Las empresas de bienes tangibles (sellos, obras de arte o antigüedades) no son entidades financieras, simplemente son intermediarios en la compra de estos bienes, y por lo tanto, sus clientes no tienen derecho a acudir a los fondos de garantía en caso de necesidad.
A diferencia de los depósitos en bancos y cajas o de las inversiones en Bolsa, que sí están garantizados -hasta un cierto límite- por los fondos de garantía, las inversiones en sellos, obras de arte o antigüedades, entre otros activos, no cuentan con ese "colchón". No obstante, expertos del sector consultados por EFE recordaron que tampoco cuentan con esta ayuda los titulares de los planes de pensiones ni los compradores de viviendas, por ejemplo.
Las compañías que invierten en bienes tangibles no tienen una regulación específica, aunque la Ley de Instituciones de Inversión Colectiva les dedica una disposición adicional en la que, incluso, les prohíbe utilizar en su denominación o publicidad los términos "financiero" o "colectivo".
La Ley precisa que las empresas de bienes tangibles "no podrán realizar las actividades reservadas a las entidades de crédito, empresas de servicios de inversión, instituciones de inversión colectiva, entidades aseguradoras o reaseguradoras o a cualquier otra entidad inscrita en los registros del Banco de España, Comisión Nacional del Mercado de Valores y Dirección General de Seguros y fondos de pensiones". Asimismo, obliga a estas sociedades a someter sus documentos contables a auditoría de cuentas y a remitir copia del informe a las autoridades competentes en materia de consumo.
Pese a tener una legislación diferente y no compartir supervisores, los productos que ofrecen estas sociedades de bienes tangibles son en muchos casos muy parecidos a los que ofrecen bancos y cajas, y algunos de los clientes que hoy se concentraban a las puertas del Fórum o de Afinsa hablaban de "depósitos", "planes de pensiones" o "fondo de inversión en sellos".