Las cotizadas españolas abonaron en concepto de dividendos un monto de 4.900 millones de dólares (4.670 millones de euros al cambio) en el tercer trimestre, lo que implica una caída de un 12,5% en tasa general y un 3,5% en tasa subyacente en comparación con el mismo periodo del ejercicio previo, según la última edición del índice global de dividendos elaborado por la gestora Janus Henderson.
La firma, que ha recordado que el tercer trimestre es en términos estacionales el "más tranquilo" del año, ha explicado que la mayoría de las empresas españolas aumentó el pago de sus dividendos o los mantuvo estables; sin embargo, el recorte de Endesa -en relación a un pago de 530 millones de euros tras perder un laudo arbitral y que 'se comería' buena parte de sus beneficios- ha motivado la caída en el cómputo total del pago a accionistas.
Con todo, desde la entidad han matizado que, en lo que va de año, los dividendos españoles han aumentado casi en un 20%, por lo que el tercer trimestre "no es representativo del panorama general".
De hecho, y en consonancia con la idea de que el tercer trimestre discurre por un cauce propio, el estudio arroja que España, junto a Francia y Países Bajos, aportó la mitad del total de la retribución a los accionistas europeos -excluido el Reino Unido-.
Así, en un plano más amplio, el tercer trimestre ha marcado un mínimo estacional en Europa al repartirse 25.200 millones de dólares (casi 24.000 millones de euros), lo que se ha traducido en un descenso de un 1,6% respecto a los 25.600 millones del tercer trimestre de 2023, si bien en tasa subyacente se ha producido un alza de casi un 4%.
En palabras del director para el mercado ibérico de Janus Henderson, Juan Fierro, el impacto de este período ha sido relativamente moderado porque se ha visto influido por el parón estacional del verano, donde muchos países pagan, en términos relativos, pocos dividendos.
De su lado, las cotizadas británicas repartieron 25.800 millones de dólares (24.530 millones de euros) entre sus accionistas, lo que ha supuesto un retroceso del 7% en comparación con el mismo plazo de 2023; la explicación de esta caída se encuentra en la "pronunciada rebaja" por parte de Glencore.
Por su parte, en la región Asia-Pacífico (excl. Japón), donde el tercer trimestre suele ser relevante para los dividendos, estos bajaron de forma notable lastrados por Australia, Hong Kong y Taiwán, si bien Singapur se desmarcó de la tendencia gracias al fuerte incremento de los dividendos de la banca; en concreto, el reparto de dividendos cayó un 10%, hasta situarse en los 68.500 millones de dólares (65.130 millones de euros).
A la contra, China, India y Singapur registraron dividendos trimestrales récord, lo que ha motivado que el cómputo de los mercados emergentes haya aumentado casi un 9% su retribución a los accionistas, hasta alcanzar los 82.000 millones de dólares (78.000 millones de euros).
Entrando al detalle de esta geografía, Janus Henderson ha destacado que la mayor parte del crecimiento de las empresas chinas provino de Alibaba -que distribuyó efectivo a los accionistas por primera vez este año-, mientras que los dividendos de un amplio abanico de empresas indias crecieron de forma robusta.
En lo referente al mercado de Norteamérica, el más grande y, por tanto, el más influyente a la hora de elaborar la cuenta global, registró casi 176.000 millones de dólares (167.340 millones de euros) en el pago de dividendos en el tercer trimestre, un alza de un 8,7% y otra del 9,7% en términos subyacentes.
Desde el punto de vista sectorial, los bancos y las empresas de medios (impulsadas por Meta y Alphabet) fueron los que más contribuyeron al crecimiento en términos globales, mientras que los sectores de la minería y el transporte tuvieron el mayor impacto negativo.
RÉCORD GLOBAL EN EL TERCER TRIMESTRE, PERO RECORTE DE PREVISIONES
Los dividendos mundiales crecieron un 3,1% en el tercer trimestre, hasta 431.100 millones de dólares (410.000 millones de euros), una cifra récord para este periodo del año, en tanto que el alza subyacente fue a su vez de un 3,1%.
Así, el estudio ha constatado que la tasa de crecimiento fue relativamente moderada en comparación con los trimestres anteriores, ya que el incremento subyacente había sido del 6,6% en el primer semestre de 2024.
Siguiendo con el plano mundial, el 88% de las empresas incrementaron o mantuvieron las retribuciones, y la mediana de crecimiento -o crecimiento típico- de los dividendos fue del 6%.
Por otra parte, dado el menor nivel de los dividendos extraordinarios observado en el tercer trimestre, Janus Henderson ha recortado ligeramente su previsión para 2024 hasta los 1,73 billones de dólares (1,64 billones de euros), lo que deja la proyección del crecimiento mundial en el 4,2% respecto a 2023 (por debajo de una estimación anterior del 4,7%), mientras que la previsión del crecimiento subyacente se ha mantenido en el 6,4%.
"Nos mantenemos expectantes a cómo evolucionará la rentabilidad de las empresas en este último trimestre del año, donde la política monetaria y la incertidumbre geopolítica tendrán un gran impacto en los mercados", ha comentado Fierro de cara al futuro.
No obstante, ha apuntado que esperan que el crecimiento subyacente del ejercicio siga el ritmo positivo que ha caracterizado a la primera parte del año