Que si que hay robos de delincuentes, que no quieren pagar a sus acreedores, pero están más cerca de lo que uno piensa y los borregos son los conspiranoicos que prefieran alejarse de la cruda realidad con asuntos del cuarto milenio impulsados y bien pagada por la propaganda del Tea Party republicano americano, cuando la realidad está tan cerca y a los chorizos y a los cerdos, les llega tarde, pero les llega su San Martín y están tan cerca:
Cuatro años después de que Teconsa se declarara en concurso de acreedores, la compañía inicia su liquidación. Los acreedores de la constructora fundada por la familia Martínez Núñez, con un pasivo de 500 millones, prácticamente no van a cobrar nada. Quien sí lo ha hecho ha sido Ángel de Cabo, el empresario valenciano detenido hace ahora un año por presuntas prácticas delictivas en la adquisición y gestión del concurso de Marsans.
El grupo de Martínez Núñez facturó 427 millones
Teconsa se había convertido en 2007 en la mayor constructora de Castilla-León. La compañía controlada por la familia Martínez Núñez, con fuerte implantación en Castilla-León, Galicia y Madrid, había llegado a registrar en 2007 un volumen de negocio de 427 millones y un beneficio de 9,9 millones. Pero al término de ese año sólo la deuda con proveedores del grupo ascendía a 296 millones. Además la compañía se había visto salpicada por el caso Gürtel, relacionada con supuestos pagos al entorno del principal imputado, Francisco Correa.
Tras la adquisición de Teconsa en 2009, De Cabo se hizo un año después con Marsans, en una situación similar. Al tiempo que acordaba con los anteriores propietarios de la compañía de viajes la adquisición (Gerardo Díaz Ferrán y Gonzalo Pascual), el grupo entraba en concurso de acreedores.
En septiembre de 2011 Nueva Rumasa, de la familia Ruiz-Mateos, traspasó las firmas del grupo a empresas de Ángel de Cabo, también al tiempo que las compañías se declaraban en concurso de acreedores.
http://cincodias.com/cincodias/2013/12/27/empresas/1388177068_674654.html
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Es tan dura la realidad y tan cercana, que es mejor evadirse y pensar en extrañas y esótericas conexiones de causa-efecto, cuando la tarea ardua es remangarse y hacer salir y sacar la mierda que es lo necesario (Snowden no es ninguna novedad).
Si la próxima vez que nazca me preguntan a que Estado me hubiera gustado pertenecer, recuerdamé que les diga que el americano, pero después del Noruego o Danés con más presencia estatal y calidad de vida solo por nacer o tener su nacionalidad.
Tenemos que tener la valentía de cambiar lo que podemos cambiar y de aceptar con resignación lo que no podemos cambiar, pero sobretodo la sabiduría de distinguir cuando podemos o no cambiar algo (fijate la FED).
Un Saludo