Ah, pero ahora que leo mejor su mensaje, tiene razón. Dado que las cuentas en Esfera Capital Agencia de Valores están bloqueadas por la intervención, en efecto, para el reembolso es necesario el paso previo de la figura del "traspaso" que tienen los fondos de inversión, hacia otro fondo o el mismo fondo en otra comercializadora, para posteriormente hacer el reembolso desde ese otro intermediario.Disculpe mi respuesta, que no era precisa ni adecuada a su comentario. Está usted en lo cierto.
Puedo asegurarte que no fueron las carteras con gestión delegada o discrecional, sino un auténtico puñado de cuentas particulares, de las que hacen trading con alto apalancamiento y escasos conocimientos en su gestión, a quienes se les concedió una tregua en la aplicación de las medidas previstas para cancelar posiciones abiertas hasta adecuar el saldo neto a las necesidades de garantía. Las cuentas en gestión delegada o discrecional, como bien sabes, están sometidos a limitaciones similares a las de instituciones de inversión colectiva.
Lamento decirle que está equivocado. No hay que traspasar el patrimonio a otra entidad, ni nada parecido. El comunicado es claro, la intervención a solicitud de la propia entidad, se realiza sobre la agencia de valores y no sobre la sociedad gestora de instituciones de inversión colectiva. Un fondo de inversión consiste en una asociación de partícipes sin personalidad jurídica. Por ese motivo necesita de dos entidades para relacionarse con el mercado: una entidad gestora y otra que actúa como depositaria del patrimonio (dinero e instrumentos de inversión). Como bien sabrá, en un fondo de inversión ni los títulos ni el dinero están depositados en la sociedad gestora, sino en la depositaria. Por lo que, incluso una intervención o quiebra de la gestora, no afectaría al patrimonio del fondo ni del de sus partícipes.Un saludo.Jorge Del Canto.
Creo que se olvidan de los dividendos. Hasta desde el peor momento del índice Nikkei (pico de 1989), con dividendos la rentabilidad es positiva hoy en día y desde hace años.
Con su permiso, me gustaría matizar que los gestores son como otros trabajadores que cobran por su trabajo, claro que sí. Los habrá más o menos vagos, más o menos eficientes, pero cumplen un cometido y todos ellos están cualificados. Ni son la banca, ni son un casino.
Que de vez en cuando se cuele algún figura tatuado, al que sigue una legión de seguidores con menos conocimientos que él, no puede ni debe servir para atacar a un colectivo. Creo que estará de acuerdo conmigo.
Ignoro en qué es la licenciatura de Alejandro Estebaranz o los máster de José Luís Benito. Si son de química, de física cuántica o de Educación Física. ¿De verdad importa en qué colegio han estudiado, más que el reflejo de su trabajo?
Tampoco comprendo a los Hooligans para los que solo existe el llamado value investing, ni a los que se ponen por delante el precio de la gestión sin compararla con los resultados. Muchas veces lo barato resulta caro. El cuánto es importante, pero por qué se paga y qué se recibe lo es más.
¿Han visto ustedes el rendimiento -neto después de gastos- del valor liquidativo de este fondo? ¿Han comparado su volatilidad con la de su índice de referencia -otra etiqueta que está sobrevalorada- o la de cualquier media de renta variable?
Para terminar, y no lo digo por la mayoría de ustedes, observo una contradicción derivar una parte a este estilo de inversión y estar mirando los resultados cada quince días. Creo que muchos no han entendido esta filosofía de inversión.
Estupendo artículo. Ha llamado mi atención porque trata el asunto de la literatura sobre la inversión financiera desde una perspectiva poco tratada: Lo peor, lo que se debe evitar. Me ha gustado porque mi opinión es muy afín en todos los puntos reseñados, aún en los que fueron inevitables para que mi libro más vendido llegara a publicarse.
En mi caso el título fue casi impuesto por la editorial, pero al menos pude influir sobre la portada bajo la decisión de no permitir que se publicara con un gráfico dentro de una bola de cristal, de esas de las pitonisas.
Para el título me dieron una lista de 15 títulos posibles para que rechazara cinco de ellos; el título fue uno de los rechazados. Reconozco que tiene poco que ver con lo que digo dentro, pero que llamó la atención para que fuese un éxito de ventas. Para la portada me pasaron tres propuestas para que rechazase una y me comunicaron que la seleccionada era la repudiada (la de la bola de cristal), ahí conseguí imponerme y proponer una, la de la hucha-cerdito, que finalmente fue aceptada. Tal vez con la bola de cristal el éxito hubiera sido mayor, pero era superior a mis fuerzas.
En cuanto a los temas, alguno se quedó cojo (indexada planificada, bajo el epígrafe gestión pasiva) por limitación de espacio.
Enhorabuena por el artículo
Tal y como han sido publicados estos informes, da la impresión de que es el instrumento el que genera pérdidas y no el uso que se hace de el. Me gustaría ver ese informe segregado por tipo de operaciones, trading intradiario o swing con alto nivel de apalancamiento, y no solo referido a CFD sino tambien con futuros. Los estudios de Barber y Odean, Hoffman, Shefrin... segregados por tipo de inversor y no por instrumento, indican el alto porcentaje de inversores con pérdidas en niveles muy activos de actuación, con independencia del instrumento financiero utilizado. De hecho, en la fecha de cierre de esos estudios, los CFD aún no habían llegado.
Al igual que con las preferentes, o con determinadas salidas a bolsa, se debería supervisar la formación e información que se entrega a los clientes, para que no sea deformación o desinformación, para que no exista conflicto de intereses. Porque buena parte del problema está ahí y no en el producto.